"Soy escritor, no un conspirador"
El jueves 20 de marzo de 2003 una decena de agentes de la polic¨ªa cubana irrumpieron en casa del periodista y poeta Ra¨²l Rivero y se lo llevaron detenido. A los pocos d¨ªas, Rivero, fundador de la agencia de noticias disidente Cuba Press, fue acusado de "conspirar" con Estados Unidos y de atentar contra la independencia del Estado socialista. Fue condenado a 20 a?os de c¨¢rcel. Otros 74 opositores fueron juzgados aquellos d¨ªas y sentenciados a largas penas de privaci¨®n de libertad. El Gordo, como le llaman sus amigos, fue excarcelado ayer y regres¨® a su casa despu¨¦s de 21 meses de calvario. En este tiempo ha recibido siete premios internacionales de periodismo y ha perdido 20 kilos de peso, aunque no el sentido del humor que le hizo famoso.
"La c¨¢rcel no me ha cambiado para nada. Creo que lo ¨²nico que vale la pena es el periodismo que trata de hacerse de la forma m¨¢s honrada posible"
"Tengo un sentimiento de gratitud con el Gobierno de Aznar por lo que hizo cuando ca¨ª preso, pero la nueva pol¨ªtica espa?ola ha sido m¨¢s efectiva"
Blanca Reyes, su esposa, que ha batallado durante todo este tiempo por su libertad, est¨¢ junto a ¨¦l, feliz. Su modesto apartamento de La Habana est¨¢ repleto de gente: su hija Mar¨ªa Carla; Yenia, hija de crianza; algunos vecinos y una multitud de periodistas que lo felicitan y lo interrogan.
Pregunta. ?En qu¨¦ condiciones ha sido liberado?
Respuesta. Me han concedido una licencia extrapenal indefinida para atender mis problemas de salud. No se me puso ninguna limitaci¨®n, ni de movimientos, ni de a qui¨¦n pod¨ªa ver, ni tampoco para escribir.
P. ?Le han pedido o sugerido que abandone su pa¨ªs?
R. No; las insinuaciones de los oficiales de la seguridad no han sido para que emigre, sino m¨¢s bien para que me quede. Cuando me preguntaron qu¨¦ iba a hacer, les respond¨ª que yo, para quedarme, ten¨ªa que poder seguir escribiendo y trabajando. Me dijeron que s¨ª, que yo pod¨ªa quedarme y trabajar, y buscar un espacio.
P. ?Se va a marchar de Cuba?
R. Nunca he querido irme de Cuba. Voy a esperar a observar en los pr¨®ximos d¨ªas y semanas qu¨¦ pasa con mi vida. Si puedo escribir aqu¨ª normalmente, hacer el tipo de periodismo que considero que debo hacer, como lo hac¨ªa antes de entrar a la c¨¢rcel, no me ir¨ªa. Lo que no puedo es trabajar permanentemente con la espada de Damocles de que puedo caer preso otra vez. Desde luego, s¨ª quisiera salir a ver mis hijas. Hace diez a?os que no veo a mi hija
[Cristina, que reside en Miami], ni conozco a mi nieta. En fin, salir y entrar como una persona normal. Si puedo hacer eso, me voy a quedar, que es lo que me interesa.
P. ?Ha cambiado la c¨¢rcel su forma de entender el periodismo?
R. La c¨¢rcel no me ha cambiado para nada. Creo que lo ¨²nico que vale la pena es el periodismo que trata de hacerse sin mandato, de hacerse de la forma m¨¢s honrada y profesional posible.
P. ?C¨®mo est¨¢ de salud?
R. Tengo un enfisema pulmonar que se me agrav¨® porque estuve casi un a?o en una celda muy h¨²meda, y en condiciones muy dif¨ªciles. En la c¨¢rcel tuve un problema de neuritis intercostal y me descubrieron un quiste muy grande en un ri?¨®n, pero est¨¢ asintom¨¢tico. La verdad, me encuentro bien.
P. ?C¨®mo fueron las condiciones en estos 21 meses de cautiverio?
R. Los primeros meses estuve en condiciones muy duras, en una celda muy peque?a, recluido en solitario. Para salir a coger sol o ir al m¨¦dico, ¨ªbamos esposados. Era una prisi¨®n de alto rigor, y creo que aquellos meses fueron los que m¨¢s afectaron mi salud. Era una celda de castigo, estuve 11 meses, cuando lo normal, el m¨¢ximo, son 21 d¨ªas. De ah¨ª, yo y otros compa?eros de la misma causa salimos a un destacamento con m¨¢s personas y las condiciones mejoraron.
P. ?Pod¨ªa leer y escribir?
R. S¨ª, pod¨ªa leer y escribir poes¨ªa, de hecho escrib¨ª en esas condiciones. Despu¨¦s, cuando ya estaba m¨¢s c¨®modo, escrib¨ª menos, es el masoquismo de los poetas. Hice m¨¢s de 50 poemas que permit¨ªan sacar, previa revisi¨®n de la Seguridad del Estado. A veces me aprobaban todos, a veces me quitaban uno o dos. Uno que me quitaron y me llam¨® la atenci¨®n, dec¨ªa: "Esta noche est¨¢ lloviendo sobre mi casa", una cosa as¨ª, nost¨¢lgica. Realmente no hubo una censura f¨¦rrea, dejaron salir casi todos.
P. ?Se los quitaban?
R. No, me los devolv¨ªan, pero no se los entregaban a Blanca.
P. ?Eran poemas de amor a Blanca?
R. Eran poemas de amor en general, y ah¨ª uno aprovecha y hace poemas de ex amor, de todo. Pero el tema era ¨¦se: pod¨ªa hacer poemas de amor, pero no de otro tema.
P. En el juicio se le acus¨® de conspirar con Estados Unidos para atentar contra la independencia del Estado y desestabilizar el sistema. ?Qu¨¦ tiene que decir de esas acusaciones?
R. No soy un conspirador; soy un escritor. Tambi¨¦n se ha dicho mil de veces que soy un mercenario, y eso es una calumnia. En mi defensa durante el juicio dije que puedo respetar a Estados Unidos como pa¨ªs, como naci¨®n, como pueblo, pero soy de una estirpe mambisa y no quiero para este pa¨ªs un Gobierno que no sea cubano, y cubano aut¨¦ntico. Tengo una visi¨®n personal: a m¨ª no me gusta vivir en Estados Unidos, me gusta vivir aqu¨ª, pero no odio a Estados Unidos. Tengo all¨ª a mis hijos, tengo sentimientos positivos y les respeto; ahora, no quiero que los americanos vayan a dirigir Cuba.
P. ?C¨®mo sale de la c¨¢rcel?
R. Sin odios. Por lo menos no grandes odios, quiz¨¢s peque?os reconcomios.
P. ?Cree que el nuevo clima de dialogo con el Gobierno de Rodr¨ªguez Zapatero ha influido en su liberaci¨®n?
R. Tengo un sentimiento de gratitud con el Gobierno de [Jos¨¦ Mar¨ªa] Aznar por lo que hizo cuando ca¨ª preso. Pero, efectivamente, me parece que la nueva pol¨ªtica espa?ola ha sido m¨¢s efectiva. La confrontaci¨®n nunca en pol¨ªtica resuelve nada. Creo que el cambio s¨ª ha favorecido, por lo menos, que en Cuba hubiera m¨¢s receptividad en las autoridades cubanas. Mi experiencia, que vivo hace 59 a?os en La Habana, es que nunca con las autoridades cubanas ha funcionado la presi¨®n. Estas cosas p¨²blicas de decir: le recomiendo, hay que soltarlos..., esas cosas aqu¨ª no funcionan.
P. En estos momentos hay un debate en Europa sobre la conveniencia de cambiar la actual pol¨ªtica de sanciones y de promover un di¨¢logo pol¨ªtico con las autoridades. ?Qu¨¦ recomendar¨ªa usted?
R. Aconsejar¨ªa di¨¢logo. Siempre he cre¨ªdo que el di¨¢logo es mejor que la presi¨®n. Claro, siempre que haya con quien dialogar; lo que no es di¨¢logo, es mon¨®logo.
P. ?Piensa escribir alg¨²n libro sobre su experiencia en la c¨¢rcel?
R. S¨ª; quiero hacer un libro sobre eso. Tengo muchos poemas escritos de all¨ª. Y uno pasa por experiencias incre¨ªbles: en la c¨¢rcel te puedes pasar seis meses al lado de un tipo y no verlo. Est¨¢s solo, sales solo al patio, pero el tipo est¨¢ en la celda de al lado y te cuenta su vida. La primera vez que pude salir con los dem¨¢s pregunt¨¦: "Oye, ?cu¨¢l es Gari?". Y el tipo estaba frente a m¨ª y yo me sab¨ªa su vida entera.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Archivado En
- Cuba
- Presos pol¨ªticos
- Oswaldo Alfonso Vald¨¦s
- Ra¨²l Rivero
- Declaraciones prensa
- Pol¨ªtica exterior
- Caribe
- Presidencia Gobierno
- Represi¨®n pol¨ªtica
- Estados Unidos
- Uni¨®n Europea
- Prisiones
- Gobierno
- Gente
- Organizaciones internacionales
- Am¨¦rica
- Espa?a
- Centros penitenciarios
- Relaciones exteriores
- Administraci¨®n Estado
- R¨¦gimen penitenciario
- Pol¨ªtica
- Administraci¨®n p¨²blica
- Justicia
- Sociedad