Los l¨ªderes europeos debaten la fecha para abrir negociaciones con Turqu¨ªa
La decisi¨®n de la cumbre de Bruselas condicionar¨¢ el futuro de la UE, sus fronteras y su seguridad
Los jefes de Estado y Gobierno de la UE se re¨²nen hoy y ma?ana en Bruselas para tomar una decisi¨®n clave para el futuro de la Uni¨®n, sus fronteras, su seguridad y su capacidad de convivencia entre pueblos, civilizaciones y religiones. La cumbre debe decidir si abre negociaciones de adhesi¨®n con Turqu¨ªa, pa¨ªs de 70 millones de musulmanes, fronterizo con Ir¨¢n, Irak o Siria, llamado a ser el m¨¢s poblado de la UE. Salvo sorpresas imprevistas, Los 25 acordar¨¢n que las negociaciones comiencen a finales de 2005, pero lo har¨¢n mirando de reojo a una mayor¨ªa de sus electores disgustada con esa decisi¨®n.
La suerte parece echada para los turcos, que est¨¢n llamando a la puerta de la Uni¨®n desde 1963. Hasta 1999, no logr¨® el estatuto de pa¨ªs candidato y, el pasado 6 de octubre, la Comisi¨®n Europea certific¨® que Ankara hab¨ªa hecho "unas reformas impresionantes" y cumpl¨ªa ya los llamados criterios de Copenhague (democracia, derechos humanos, respeto a las minor¨ªas y econom¨ªa de mercado competitiva), pero aconsej¨® tambi¨¦n unas leoninas condiciones negociadoras que los l¨ªderes no s¨®lo se aprestan a imponer a Turqu¨ªa, sino tambi¨¦n a todos los potenciales candidatos en el futuro.
A Turqu¨ªa se le podr¨¢ aplicar una cl¨¢usula permanente de salvaguardia para que los turcos no disfruten del sagrado principio comunitario de la libertad de movimiento y establecimiento de trabajadores. La UE intenta paliar as¨ª el pavor de los europeos a una avalancha de emigrantes turcos hacia Alemania, Austria, B¨¦lgica, Holanda y Francia, pa¨ªses que ya suman m¨¢s de cuatro millones de turcos.
Tambi¨¦n se le aplicar¨¢n a Ankara cl¨¢usulas de salvaguardia temporales para limitar sus accesos a las ayudas regionales y agr¨ªcolas europeas o a las ventajas del mercado interior. El primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, ha declarado a este peri¨®dico: "Podemos aceptar limitaciones temporales, pero no permanentes". Reino Unido, Espa?a y B¨¦lgica tampoco ven con entusiasmo las cl¨¢usulas permanentes.
Seguimiento del compromiso
Adem¨¢s, durante los al menos 10 a?os que durar¨¢ la negociaci¨®n, la UE realizar¨¢ un permanente y pormenorizado seguimiento del compromiso turco para erradicar la tortura y los malos tratos o para respetar los derechos de las mujeres y de los kurdos. En caso de grave incumplimiento de algunos de estos principios democr¨¢ticos, las conversaciones quedar¨¢n suspendidas de inmediato.
No s¨®lo eso. La decisi¨®n de los 25 l¨ªderes europeos debe ser adoptada por unanimidad y, por tanto, debe contar con el apoyo de Chipre, un pa¨ªs no reconocido por Turqu¨ªa, que ocupa militarmente el norte de la isla desde 1974. El borrador de conclusiones de la cumbre de hoy y ma?ana incluye el compromiso de Ankara de actualizar su acuerdo aduanero con la Uni¨®n, lo que implicar¨ªa la firma en un acuerdo internacional de Turqu¨ªa y Chipre y, de paso, el reconocimiento de facto.
Ankara rechaza tal compromiso y, pese a todo, Chipre no vetar¨¢ la decisi¨®n y Los 25 se conformar¨¢n con un gesto de Ankara antes de que el pr¨®ximo a?o empiecen las negociaciones. Tampoco acepta Ankara las presiones de Francia para que, en el futuro, reconozca la existencia del genocidio armenio y su participaci¨®n en los terribles sucesos que costaron la vida a centenares de miles de personas entre finales del siglo XIX y comienzos del XX.
En ning¨²n documento figurar¨¢ por escrito por el momento, pero el canciller alem¨¢n, Gerhard Schr?der; el primer ministro brit¨¢nico, Tony Blair, y el presidente franc¨¦s, Jacques Chirac, ya han hablado esta semana de la posibilidad de que si Turqu¨ªa entra en la Uni¨®n ser¨¢n cambiadas las reglas de reparto de poder en la UE pactadas en la Constituci¨®n europea. De no ser as¨ª, Turqu¨ªa ser¨¢ el pa¨ªs con m¨¢s peso en el Consejo de la Uni¨®n y en la Euroc¨¢mara, porque, a partir de 2015, tendr¨¢ m¨¢s habitantes que Alemania.
Por todas esas razones, prevenciones y miedos, la UE dejar¨¢ escrito que el inicio de negociaciones no supone autom¨¢ticamente que el escenario final sea la entrada de Turqu¨ªa en el club. Ankara, en cambio, ha evitado que Austria, Francia y Dinamarca incluyeran tambi¨¦n en las conclusiones una referencia a un plan B para el caso de que las negociaciones fracasen. Se trata de la "asociaci¨®n privilegiada", sin pertenencia al club, que el Partido Popular Europeo defiende como alternativa al ingreso.
Rechazo popular
Por el contrario, y como pactaron hace dos semanas Alemania y Francia, en las conclusiones quedar¨¢ claro que el objetivo de las negociaciones es "la adhesi¨®n", aunque no pueda prejuzgarse ese final. "Nunca seremos un socio privilegiado, porque esa figura no existe", asegur¨® Erdogan.
Los sondeos m¨¢s recientes han puesto otra vez de manifiesto uno de los principales motivos por el que los l¨ªderes europeos toman tantas precauciones. Una encuesta difundida el lunes por el diario franc¨¦s Le Figaro se?ala que el 67% de los franceses rechaza la entrada de Turqu¨ªa, como un 55% de los alemanes y hasta el 75% de los austriacos. Por eso, Francia ha tomado m¨¢s cautelas que nadie: entre enero y marzo se incluir¨¢ en su Constituci¨®n la obligaci¨®n de convocar un refer¨¦ndum antes de cada nueva incorporaci¨®n. "La ¨²ltima palabra la tendr¨¢ el ciudadano", ha insistido el ministro franc¨¦s de Exteriores, Michel Barnier.
Reino Unido, Italia, Espa?a y Holanda han sido en este proceso los valedores de Turqu¨ªa. Fuera de Europa, ha sido EE UU su gran abogado en su acercamiento a la UE. Para Erdogan, el balance entre ventajas y desventajas de la adhesi¨®n se resume en estos comentarios: "Si Europa es s¨®lo un club cristiano, puede pasar sin nosotros; pero si es un conjunto de valores comunes, necesita a Turqu¨ªa, porque somos una pieza esencial para la reconciliaci¨®n de civilizaciones. Lo que proponemos es un acuerdo entre civilizaciones". Para eso, como record¨® el presidente de la Comisi¨®n Europea, "habr¨¢ que conquistar los corazones y las mentes de los ciudadanos".
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