El arte dentro del taller
El Grupo Alfa abre en Eibar una nave de 1.800 metros cuadrados donde expone las esculturas que funde
El arte ha encontrado en Eibar un magn¨ªfico escaparate, un recinto de 1.800 metros cuadrados donde se exponen las esculturas que el grupo empresarial Alfa elabora en su propia fundici¨®n sobre los originales de los artistas. Supone un maridaje perfecto entre el arte y la industria. Lo m¨¢s sorprendente del caso es que este amplio espacio expositivo se abre en uno de los municipios donde el suelo resulta un bien escaso.
El suelo, por inexistente, no tiene precio en Eibar. En este compacto municipio industrial, las f¨¢bricas y los grandes bloques de viviendas han ido adue?¨¢ndose del territorio de forma desordenada hasta ocuparlo por completo. El feroz desarrollo urbano de mediados del siglo XX dej¨® el pueblo sin un solo metro cuadrado disponible.
Es parad¨®jico que all¨ª donde el terreno libre escasea, la iniciativa privada haya establecido una de los mayores escenarios art¨ªsticos de Guip¨²zcoa -la sala Kubo del Kursaal cuenta con un total de 1.000 metros cuadrados de exposici¨®n-. El Grupo Alfa inaugur¨® ayer esta gran nave de 1.800 metros cuadadros y siete metros de altura que contiene una exposici¨®n permanente con parte de sus fondos escult¨®ricos, obras que ha fundido de Jos¨¦ Ram¨®n Anda, N¨¦stor Basterretxea, Vicente Larrea, Remigio Mendiburu, Andr¨¦s Nagel, Jorge Oteiza, Dora Salazar y Jos¨¦ Zugasti, entre otros autores.
La compa?¨ªa, que naci¨® en 1920 y se hizo presente con sus m¨¢quinas de coser en casi todos los hogares de Espa?a, cre¨® en 1993 una l¨ªnea de trabajo orientada al mundo del arte, denominada Alfa Arte: "En los primeros a?os de actividad se orient¨® a la fabricaci¨®n de piezas de peque?o tama?o. En los ¨²ltimos tiempos, sin embargo, la realizaci¨®n de piezas grandes destinadas a espacios p¨²blicos, como plazas, calles, jardines, edificios institucionales o recintos empresariales, ha ido tomando mayor peso dentro de la producci¨®n de la empresa", explica su director gerente, Luis Zamakona.
Alfa Arte se ha especializado en la fundici¨®n art¨ªstica de obras de autor en bronce, aluminio, acero corten, inoxidable y hierro. En la fundici¨®n, una nave contigua de 2.000 metros cuadrados, se encontraba ayer ya acabado un majestuoso torso en bronce de 5,5 metros de altura, obra de Pedro Chillida, que se colocar¨¢ en la localidad murciana de Ceut¨ª.
En una dependencia anexa, los operarios dan los ¨²ltimos retoques a unos imponentes morlacos que formar¨¢n un conjunto escult¨®rico de 10 metros de largo por cuatro de ancho, creado por el escultor Rafael Huerta para su instalaci¨®n en los aleda?os de la plaza de toros de Pamplona. Muestra un encierro con seis toros, tres cabestros y diez mozos que tambi¨¦n acabar¨¢n pasando por la fundici¨®n. Al igual que estos dos casos, Alfa Arte tiene repartidas por numerosos lugares de Espa?a otras tantas esculturas de gran formato. La empresa cuenta con "obras de cat¨¢logo, seriadas, y listas para ser instaladas en el lugar que se desee", asegura Zamakona.
Los originales del autor, explica el responsable de Alfa Arte, se someten a un proceso de digitalizaci¨®n que permite reproducirlos a gran tama?o. A su n¨®mina de clientes ha incorporado en fecha reciente a seis artistas franceses y, en estos momentos, la compa?¨ªa est¨¢ intentando entrar en el mercado estadounidense, lo que mejorar¨ªa notablemente su volumen de negocio. En la actualidad, Alfa Arte factura un total de 1,8 millones de euros anuales.
Las actividades de Alfa Arte en este campo le han permitido dotarse de un "estimable" fondo art¨ªstico que ahora se muestra en la gran nave de exposiciones. Son 20 piezas de gran tama?o y otras 60 m¨¢s peque?as de reconocidos escultores, todos ellos clientes de la compa?¨ªa que, o bien han donado su obra, la han cedido de forma temporal o ha sido adquirida por Alfa Arte. En un piso inferior cuenta con otra sala m¨¢s reducida, de unos 300 metros cuadrados, donde se exponen un total de 48 pinturas y 70 piezas escult¨®ricas peque?as. Es un espacio abierto al p¨²blico que funcionar¨¢ como una galer¨ªa, afirma Zamakona.
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