Las peticiones de ayuda econ¨®mica a C¨¢ritas suben un 46% en un a?o

Las desigualdades crecen y los pobres cada vez lo son m¨¢s. Este es el mensaje que ayer quiso lanzar C¨¢ritas ante la inminencia de las fiestas navide?as y de su campa?a anual de captaci¨®n de fondos. Y es que la ONG de la Iglesia no da abasto: s¨®lo en los primeros ocho meses de este a?o las demandas de ayuda econ¨®mica a esta organizaci¨®n se han disparado un 46% respecto al mismo periodo del a?o anterior.

Si en los ¨²ltimos a?os C¨¢ritas ya alertaba de los devastadores efectos que la carest¨ªa de la vivienda y la precarizaci¨®n del trabajo estaban teniendo sobre miles de catalanes, esta ONG dio ayer un paso m¨¢s al hacer p¨²blicos algunos datos de sus usuarios. El director de C¨¢ritas diocesana de Barcelona, Jordi Rogl¨¤, explic¨® ayer que el 68% de los beneficiarios de C¨¢ritas en 2003 no ten¨ªan ning¨²n tipo de ingreso. En 2001, este grupo era el 61%. Por contra, s¨®lo el 15% de sus usuarios son pensionistas, seis puntos menos que dos a?os antes.

Rogl¨¤ prosigui¨® denunciando que en las grandes ciudades catalanas est¨¢ creciendo un nuevo tipo de pobreza que se ceba en personas que pocas veces habr¨ªan imaginado acabar acudiendo a la beneficiencia. "Cada vez m¨¢s vienen a nosotros hombres solos, de unos 55 a?os, cuya empresa ha cerrado y sin apenas formaci¨®n; de un d¨ªa para otro pasan a ser pobres", dijo. Y no s¨®lo hay hombres en este grupo. Tambi¨¦n mujeres separadas con hijos a su cargo y hombres j¨®venes con poca formaci¨®n que no pueden acceder al mercado de trabajo.

La precarizaci¨®n del mercado laboral es el principal problema. "S¨®lo el 9% de nuestros usuarios tiene alg¨²n tipo de contrato laboral", explic¨® el director de C¨¢ritas, quien record¨® que este ¨ªndice tambi¨¦n ha ca¨ªdo cuatro puntos en s¨®lo dos a?os.