"Soy capaz de bailar salsa y merecumb¨¦"

P. ?Es usted tan circunspecto como parece?

R. Si circunspecto significa que soy respetuoso de los dem¨¢s, mucho. Que intento no meter la pata, lo intento, aunque no lo consigo frecuentemente. Pero no tengo conciencia de parecer circunspecto.

P. Se lo dec¨ªa porque tiene cierta fama de serio y pe?azo. ?Aburre a las ovejas?

R. Yo creo que s¨ª, que aburro a las ovejas. Mis alumnos me lo dec¨ªan, y a m¨ª me sorprend¨ªa mucho, porque por dentro me sent¨ªa una persona como tierna, abierta, llena de afecto por los dem¨¢s.

P. Hagamos una prueba. ?Qu¨¦ le entretiene leer: el BOE?

R. Jam¨¢s, jam¨¢s. Soy lector de ensayo, de historia, de novela, de poes¨ªa. Leyes y decretos los tengo que leer por el oficio, pero como placer, cero.

P. Imparti¨® clases en la Universidad de Venezuela. ?Se le peg¨® algo de ritmo caribe?o?

R. Creo que no mucho, o que quiz¨¢s nada.

P. O sea, que si le saco a bailar salsa o merengue es un desastre.

R. No tan desastre, no tan desastre. Mucha gracia no tengo,pero s¨ª soy capaz de bailar con cierto decoro la salsa, la cumbia y el merecumb¨¦.

P. ?En qu¨¦ m¨¢s nota que no es usted todo texto y precepto?

R. En el empleo de mi tiempo libre. Me gusta estar con mis amigos, leer, o¨ªr m¨²sica, el aire libre, jugar al golf, nadar. Todo eso no tiene mucho que ver con el lector de Aranzadi.

P. "El futuro de la monarqu¨ªa no me quita el sue?o". ?Y el advenimiento de la rep¨²blica?

R. A m¨ª [r¨ªe] no me quita el sue?o casi nada, a decir verdad.

P. ?Pero puede imaginarse un futuro sin Leti y sin Felipe?

R. S¨ª, s¨ª, s¨ª. ?Usted no?

P. ?Recuerda su juguete preferido?

R. Muy de ni?o, me gustaba mucho jugar al aro, d¨¢ndole con un palito. Y una cosa a la que en mi tierra, Extremadura, llaman el candaje, y en Castilla, saltar a p¨ªdola.

P. ?Y su primera novia?

R. Hombre, claro. Prescindiendo de un amor que tuve a los siete a?os, despu¨¦s tuve una novia a la que am¨¦ apasionadamente cuando ten¨ªa diez, y despu¨¦s Nati, a los catorce. Me han gustado mucho las chicas, aunque no haya tenido ¨¦xito con ellas.

P. ?Qu¨¦ a?itos ten¨ªa cuando les dijo a sus padres: "De mayor quiero ser presidente del Consejo de Estado"?

R. No les he dicho esa insensatez nunca [r¨ªe]. Yo nunca he querido ser nada. Profesor de universidad, quiz¨¢s.

P. ?Cree que su vecina del tercero sabe para qu¨¦ vale este organismo que preside?

R. Supongo que no.

P. ?Y eso le preocupa?

R. No, en absoluto.

P. ?Es usted un poder f¨¢ctico?

R. En absoluto. Supongo que para serlo se necesitan dos cosas: tener poder y querer ejercerlo. Yo, ni lo uno ni lo otro.

P. ?Le pesa el cetro de n¨²mero uno del Derecho Constitucional,que parece reconocerle casi todo el mundo?

R. Todo el mundo, salvo mis colegas del Derecho Constitucional. Gracias a esa postura de mis colegas, ese cetro es perfectamente soportable.

P. No fue padre de la Constituci¨®n, pero, como letrado de las Cortes, s¨ª casi comadrona.

R. M¨¢s bien comadrona. Y para un profesor de Derecho Constitucional tener la oportunidad de ser partero de una constituci¨®n es la culminaci¨®n de los sue?os.

P. ?C¨®mo sali¨® la ni?a?

R. No mal del todo. Ning¨²n hijo es perfecto. Pero ¨¦sta no tiene defectos graves.

P. ?Y entonces por qu¨¦ hay que enderezarla? ?Porque est¨¢ en muy mala edad?

R. ?sa es una buena observaci¨®n. Porque a los hijos, a medida que van creciendo, hay que irles exigiendo m¨¢s y m¨¢s.

P. ?Usted y Peces-Barba son los dos constitucionalistas de cabecera del presidente?

R. Si yo soy constitucionalista de cabecera del presidente del Gobierno, necesita poco de los constitucionalistas.

P. ?Se considera de izquierdas?

R. Depende en relaci¨®n con qui¨¦n. Yo le dir¨ªa que soy un hombre razonablemente progresista.

P. "Judicializar el Plan Ibarretxe es una v¨ªa equivocada". ?Qu¨¦ contiene la cesta de Navidad que le ha mandado el lehendakari?

R. La estoy esperando. En cuanto llegue, se lo cuento.