S¨¢nchez Robayna re¨²ne 32 a?os de poes¨ªa en 'En el cuerpo del mundo'

"Yo no empiezo el poema, empieza ¨¦l. Para m¨ª, la escritura es una aventura espiritual: no s¨¦ ad¨®nde me lleva; cada poema es un comienzo, un eterno comienzo", resumi¨® ayer Andr¨¦s S¨¢nchez Robayna (Las Palmas, 1952) en la presentaci¨®n ante la prensa de En el cuerpo del mundo, que re¨²ne la totalidad de su obra po¨¦tica escrita entre 1970 y 2002 (Galaxia Gutenberg / C¨ªrculo de Lectores).

"La palabra que alumbra, la que abisma, la que supone un reto", enumer¨® el escritor y cr¨ªtico T¨²a Blesa para delinear la propuesta del autor canario, a quien defini¨® como "un agitador del mundo de la poes¨ªa en una situaci¨®n de aton¨ªa general". Conceptos ambos compartidos luego por S¨¢nchez Robayna, que aprovech¨® para denunciar "la poes¨ªa f¨¢cil", el "ombliguismo" de quienes no leen sino poes¨ªa espa?ola, y para citar a Juan Goytisolo: "La dificultad es la cortes¨ªa del escritor hacia los lectores inteligentes".

Blesa destac¨® "la unidad y la coherencia" de la obra de S¨¢nchez Robayna ("una de las p¨¢ginas m¨¢s espl¨¦ndidas de la poes¨ªa espa?ola actual") y marc¨® la idea de "alumbramiento" en un verso de D¨ªa de aire, un poema de 1970, como clave de toda su "est¨¦tica del conocimiento", que inscribi¨® en la tradici¨®n de autores como Jos¨¦ ?ngel Valente, Juan Ram¨®n Jim¨¦nez y Wallace Stevens. La insularidad, la "ligaz¨®n decisiva a la tierra" y el misticismo como "lo sagrado que no necesita dioses, para hablar de trascendencia", nutren

este universo en 472 p¨¢ginas, que llega hasta El libro, tras la duna, suerte de autobiograf¨ªa del poeta, cr¨ªtico y traductor canario. Incluye, adem¨¢s, un Ep¨ªlogo, de 1995, en el que apunta: "El poeta sigue condenado, s¨ª, a los m¨¢rgenes, pero es hoy m¨¢s consciente de su esencial trabajo de esperanza".