Una flauta de hace 35.000 a?os

Hace unos 35.000 a?os, cuando los neandertales estaban en trance de desaparici¨®n y la especie humana actual comenzaba a poblar Europa, los hombres de las cavernas ya hac¨ªan m¨²sica con flautas fabricadas con colmillos de mamut. Arque¨®logos de la Universidad de Tubinga, en el sur de Alemania, han recompuesto las piezas de una flauta de mamut que consideran la m¨¢s antigua de la historia de la humanidad. El hombre de las cavernas sin duda no interpretaba las sonatas para flauta de H?ndel, pero los arque¨®logos de Tubinga sostienen: "La m¨²sica representaba un papel importante en la vida de nuestros antepasados de la era glacial".

Una nota de prensa de la universidad de Tubinga inform¨® de la reconstrucci¨®n de una flauta elaborada con el colmillo de un mamut, y la revista especializada Archeologisches Korrespondezblatt detalla en su ¨²ltima edici¨®n el descubrimiento, del que se han hecho eco estos d¨ªas algunos medios de prensa alemanes.

Por falta de recursos, las piezas que componen la flauta no se investigaron durante casi 30 a?os

La flauta tiene al menos tres agujeros y se ha reconstruido con 31 fragmentos

En 1996, el paleont¨®logo Ivan Turk, de la Academia Eslovena de Ciencias, anunci¨® el hallazgo de una flauta m¨¢s antigua a¨²n (unos 45.000 a?os) en el asentamiento neandertal de Divje Babe I, en Eslovenia. Se trataba de un f¨¦mur de oso en el que, seg¨²n Turk, los neandertales hab¨ªan perforado varios agujeros. Pero otros cient¨ªficos consideran m¨¢s probable que esas perforaciones fueran obra de los dientes de un animal.

El m¨¦rito del actual trabajo arqueol¨®gico consiste en haber resuelto el rompecabezas que representaban 31 piezas de colmillo de mamut descubiertas a mediados de los a?os setenta en la cueva de Geissenkloesterle, cerca de Blaubeuren, una peque?a ciudad de poco m¨¢s de 10.000 habitantes en el Estado federado de Baden-Wurtemberg, en el sur de Alemania. Por falta de recursos, no se investigaron entonces las piezas que desde hace casi treinta a?os dorm¨ªan el sue?o de los justos. El peri¨®dico Frankfurter Allgemeine Zeitung destaca el celo de un funcionario local, Wolfgnag Sch¨¹rrle, que se empe?¨® en conseguir fondos para financiar la investigaci¨®n de los arque¨®logos de Tubinga. El peri¨®dico atribuye a la t¨¦cnica arque¨®loga Maria Malina el m¨¦rito de resolver el rompecabezas.

La edad de la flauta, seg¨²n un m¨¦todo de radiocarbono, se estima entre 30.000 y 35.000 a?os. Otro procedimiento de termoluminiscencia m¨¢s exacto, seg¨²n el catedr¨¢tico de 43 a?os director del proyecto arqueol¨®gico de Tubinga, Nicholas Conrad, remonta la edad del instrumento a los 37.000 a?os. Esto significa que la flauta ahora reconstruida ser¨ªa 1.000 a?os m¨¢s antigua que otra de hueso de ave hallada en la misma zona el a?o 1995. Se tratar¨ªa por tanto, seg¨²n el Spigel Online, "tal vez del instrumento musical m¨¢s antiguo del mundo". Y no s¨®lo eso. La calidad de la flauta de colmillo de mamut, comparada con las anteriores de huesos de aves, es muy superior. Seg¨²n Conrad, "ser¨ªa como comparar un Toyota con un Rolls Royce".

La nota de Tubinga describe el instrumento como "una flauta tallada con esmero del colmillo de un mamut". A?ade el comunicado: "La flauta de 18,7 cent¨ªmetros de longitud provista de al menos tres agujeros se reconstruy¨® uniendo 31 piezas de marfil. Junto con otras dos flautas de huesos de ave, halladas en la misma cueva de Geissenkloesterle, constituyen los tres instrumentos m¨¢s antiguos del mundo. Los hallazgos documentan que los or¨ªgenes de la m¨²sica se remontan a la era de las glaciaciones, hace m¨¢s de 30.000 a?os". La flauta demuestra que los primeros hombres modernosestaban capacitados para producir m¨²sica.

El especialista en arqueolog¨ªa musical Friedrich Seeberger, que ha reconstruido instrumentos musicales prehist¨®ricos, declara que los hombres de las cavernas pod¨ªan realizar una m¨²sica est¨¦tica y rica en variaciones. Destaca Seeberger la importancia del hallazgo de la flauta de mamut: "Un instrumento hecho con un colmillo macizo, en vez de un hueso de p¨¢jaro hueco, resulta un hecho por completo extraordinario". Sobre todo por la dificultad que supon¨ªa el trabajo de tallar el marfil sin las herramientas de que se dispone hoy d¨ªa. Seg¨²n Seeberger, los experimentos muestran que las flautas del periodo auri?aciense permiten realizar "una m¨²sica rica en variantes y adecuada a los niveles de est¨¦tica vigentes hoy".

Aunque no se conozcan las melod¨ªas espec¨ªficas que tocaban los m¨²sicos de la edad de piedra, Seeberger ha podido simular con las reconstrucciones modernas de las flautas el espectro de notas y las posibles combinaciones de tonos. Este especialista explica que los tonos de la m¨²sica de la flauta de mamut son muy superiores a los de las flautas de hueso de ave, porque desaparecen los crujidos que producen las ramificaciones del hueso -un radio- empleado para construir el instrumento: "El radio tiene l¨ªmites en la dimensi¨®n, y los tonos resultan altos en extremo. La flauta de marfil tiene un sonido m¨¢s bajo".

La nota informativa de Tubinga destaca: "La t¨¦cnica aplicada para tallar una flauta de duro marfil hay que catalogarla como muy superior a la de las producidas a partir de huesos de ave huecos. La flauta de marfil se construy¨® con dos mitades talladas con cuidado, y despu¨¦s se pegaron las juntas de forma herm¨¦tica para no dejar pasar el aire". En el Frankfurter Allgemeine Zeitung se especula con la posibilidad de que las dos partes se pegasen con resina de abedul.

Para el profesor Conrad, el que construy¨® un instrumento tan espl¨¦ndido ten¨ªa en la cabeza algo m¨¢s que la simple funci¨®n, y si una cultura era capaz de producir una flauta as¨ª, ten¨ªa que conceder un gran valor a la m¨²sica. Concluye Conrad: "Es inimaginable que en aquel tiempo no hubiese cantos y bailes".