Jaque a la UVI bancaria
La sentencia del Banco de Valladolid deja sin patrimonio al Fondo de Garant¨ªa
Es dif¨ªcil encontrar otro caso igual. Los juristas expertos en temas bancarios reconocen que s¨®lo Jos¨¦ Mar¨ªa Ruiz Mateos (amigo y socio en varios negocios de Domingo L¨®pez Alonso) le ha hecho sombra. L¨®pez Alonso, hombre polifac¨¦tico nacido en Le¨®n en 1912, fue propietario del Banco de Valladolid, entidad que qued¨® bajo la tutela de la Corporaci¨®n Bancaria (antecesor del Fondo de Garant¨ªa de Dep¨®sitos) en 1978. La entidad ten¨ªa un balance de 32.000 millones de pesetas (192 millones de euros), cantidad muy inferior a la que ahora reclama su due?o.
Despu¨¦s de 26 a?os de decenas de litigios, salpicados de pol¨¦micas y actuaciones oscuras, un juez,
Joaqu¨ªn Ebile Nsefum, acord¨® la pasada semana que se le entregaran a L¨®pez Alonso 1.022 millones de euros, el 80% del patrimonio del Fondo reunido tras 26 a?os de aportaciones.
El 62% del riesgo estaba concentrado en empresas de la familia L¨®pez Alonso
El juez ha pedido que se paguen 1.021 millones al antiguo propietario de la entidad
Para valorar lo sucedido hay que remontarse a los primeros a?os del franquismo. Domingo L¨®pez Alonso empez¨® de picador en una mina de Le¨®n y acab¨®, a finales de los ochenta, con un emporio de empresas y un banco, el de Medina, que posterior llam¨® Banco de Valladolid. Adem¨¢s, fue concejal en el Ayuntamiento de Le¨®n y fundador del diario ultraderechista El Imparcial.
Con la llegada de la democracia empezaron sus problemas. Entre 1977 y 1978, el Banco de Espa?a detect¨® graves irregularidades en el Valladolid. A principios de 1978 se acord¨® que Domingo L¨®pez (que controlaba el 64% del capital) dejara la presidencia en favor de Vicente Calder¨®n, el que fuera presidente del Atl¨¦tico de Madrid, pero ¨¦ste, acosado por el due?o del capital, desisti¨®. Calder¨®n advirti¨® al supervisor de la concentraci¨®n de riesgo de la entidad con las empresas de Domingo L¨®pez y de Jos¨¦ Luis Pinto Font¨¢n, constructor de Madrid.
El Banco de Espa?a estableci¨® que el 62% del riesgo estaba concentrado en empresas de la familia L¨®pez Alonso, parte de ellas en quiebra. Para solucionarlo, el supervisor dise?¨® un curioso sistema: las buenas empresas deb¨ªan asumir las deudas de las malas. Acto seguido, el Valladolid entregaba alrededor de 6.000 millones de pesetas de entonces a las empresas buenas, que se lo trasfirieron a las malas y en ese momento el banco se qued¨® sin morosidad.
Domingo L¨®pez, con plenos poderes, acept¨® el acuerdo, pero cuando lleg¨® el momento de hacer las transferencias, no las envi¨® a sus empresas quebradas sino a otros destinos. Resultado: se vac¨ªa de capital el banco y queda abocado a la quiebra. El 1 de diciembre de 1978, tras un duro forcejeo, Corporaci¨®n Bancaria compra el 63% de las acciones de Domingo L¨®pez por una peseta por t¨ªtulo, es decir, cinco millones de pesetas. Pero al entrar en los despachos se descubri¨® que hab¨ªan desaparecido los resguardos de las transferencias. Se sospech¨® que Domingo L¨®pez se llev¨® los 6.000 millones, pero, por razones no aclaradas, nunca se le denunci¨® ante la Fiscal¨ªa.
Lo m¨¢s rocambolesco del asunto es que Domingo L¨®pez empez¨® a pleitear contra el Fondo pidiendo los resguardos de las transferencias desaparecidas, as¨ª como fuertes cantidades de dinero que supuestamente hab¨ªa aportado para sanear el banco. Este episodio es clave, ya que explica la decisi¨®n del juez de indemnizar a Domingo L¨®pez con los 1.022 millones.
Mientras tanto, se inyectaron 2.000 millones de pesetas al Banco de Valladolid para ponerlo en marcha y deshacer sus graves problemas: falta de tesorer¨ªa, la existencia de una caja B y concentraci¨®n de riesgos. Tras sanearlo, en marzo de 1981 se vendi¨® a Barclays Bank, ¨²nica entidad que mostr¨® inter¨¦s por ¨¦l, por 800 millones de pesetas. La filial espa?ola de la entidad brit¨¢nica cuenta con "indemnidad frente a terceros" por lo que la responsabilidad econ¨®mica es del Fondo de Garant¨ªa.
Tras perder los pleitos para conseguir el dinero, Domingo L¨®pez, inasequible al desaliento, activ¨® los juicios por los resguardos y avales que entreg¨® al Fondo para reflotar el Valladolid. En 1998 el juez orden¨® al Fondo que le entregara todos los papeles que reclamaba, una gran victoria para su causa. El Fondo pidi¨® aclaraciones para saber a cu¨¢les se refer¨ªa. Seg¨²n algunos juristas, Domingo L¨®pez pidi¨® documentos de 1979 que, aparentemente, se pod¨ªan entregar sin problemas. Otros, tambi¨¦n cercanos a la operaci¨®n, dicen que no solicit¨® esos papeles sino los dep¨®sitos que el banquero y su familia ten¨ªan en la entidad en 1978 por 4.400 millones (26,5 millones de euros).
El hecho es que, en 2002, no se le entregaron los documentos reclamados, pero s¨ª 26,5 millones de euros que hab¨ªa solicitado. El Fondo recurri¨® la sentencia y el juez la estim¨®, por lo que se recuper¨® la cantidad. Todo parec¨ªa ganado, pero Domingo L¨®pez reclam¨® por da?os y perjuicios, los 26,5 millones de euros y, sorpresa, en marzo de 2003 el juez Ebile acept¨®. El Fondo lo recurri¨® y antes de que se resolviera el asunto, el juez orden¨® que se le entregara esa cantidad a Domingo L¨®pez, el 24 de diciembre de 2003. No contento con esto, el leon¨¦s reclama los intereses de esta cantidad desde 1978, al 15% anual con pago trimestral. El juez le da la raz¨®n y pide, sin escuchar a las partes, que se le entreguen 1.021 millones de euros y 100 millones de costas.
Toda la maquinaria jur¨ªdica del Fondo est¨¢ ahora en marcha, dispuesta a llegar hasta el final. A principios de febrero presentar¨¢n un escrito de oposici¨®n para pedir al juez que se retracte de su auto.
Un juez con pol¨¦mica
El titular del Juzgado n¨²mero 4 de Primera Instancia de la Audiencia de Madrid, Joaqu¨ªn Ebile Ensefum, nacido en Guinea hace 65 a?os, ha saltado estos d¨ªas a la actualidad. Ebile ha impuesto al Fondo de Garant¨ªa de Dep¨®sitos (FGD) el pago de 1.022 millones de euros para Domingo L¨®pez Alonso, antiguo due?o del Banco de Valladolid.
En el auto, en el que se afirmaba que la deuda eran 1.022 billones, luego corregida a millones de euros, el juez hizo suyo un informe pericial enviado al juzgado por los abogados de L¨®pez Alonso. Pero el FGD deber¨¢ emitir ahora un escrito oponi¨¦ndose al de L¨®pez Alonso. En ¨¦l, el FGD detallar¨¢ la cantidad que ya ha pagado a L¨®pez Alonso (26 millones de euros) y su negativa a darle m¨¢s dinero. Despu¨¦s, Ebile tomar¨¢ una ¨²ltima decisi¨®n.
La resoluci¨®n provoc¨® que el Poder Judicial abriera a Ebile unas diligencias informativas que, seg¨²n fuentes del Consejo, previsiblemente acabar¨¢n archivadas por tratarse de un tema jurisdiccional.
No es la primera vez que Ebile, que lleva desde 1999 al frente del Juzgado de lo Civil 4 de Madrid, se topa con el Consejo. Ha sido expedientado dos veces por dilaciones indebidas, pero s¨®lo ha sido sancionado una vez, con una multa de 1.800 euros, en 2002. El otro expediente se resolvi¨® sin sanci¨®n en 1994.
La multa obedeci¨® a que los inspectores del Consejo analizaron su juzgado en 2002 y comprobaron que ten¨ªa 196 procesos en los que ya hab¨ªa celebrado el oportuno juicio pero que no se hab¨ªan dictado las respectivas sentencias.
El ¨²ltimo informe del Consejo sobre el juzgado de Ebile es, en cambio, muy positivo, ya que ha superado (con un 136%) el m¨®dulo de trabajo exigible a un juez civil.
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