"Los que quer¨ªan impedir estos comicios no lo consiguieron"

Pregunta. ?Podemos calificar de limpias estas elecciones? [Carlos Valenzuela, el hombre de la ONU en Irak, el t¨¦cnico neutral de la consulta, sopesa sus palabras].

Respuesta. Hasta ahora no ha habido reclamaciones ni recursos. Sabemos que en algunas zonas no pudieron votar. Pero un proceso electoral como ¨¦ste, en un pa¨ªs grande, dif¨ªcil y complejo, hay que valorarlo en su conjunto.

P. ?Y cu¨¢l es su valoraci¨®n?

R. Hoy podemos decir que se ha expresado el voto. El Comit¨¦ Electoral ha sido cre¨ªble, independiente e imparcial. Eso lo considero ya un ¨¦xito, porque era una de las grandes prioridades.

P. Dos horas antes de cerrar los colegios, el Comit¨¦ hablaba de una participaci¨®n del 72%. Despu¨¦s descendi¨® al 60%. Luego la cifra oscilaba entre el 60% y el 75%. ?No le parece un poco vago?

R. Hubo un entusiasmo comprensible. El pa¨ªs votaba por primera vez y hab¨ªa una expectaci¨®n y una tensi¨®n fort¨ªsimas. Los colegios estaban abarrotados y los representantes de los partidos y los interventores llamaban desde ellos sin cesar. El Comit¨¦ se dej¨® llevar y proclam¨® una valoraci¨®n que no era m¨¢s que una impresi¨®n. Tuve que intervenir para advertirles sobre el riesgo que corr¨ªan al difundir datos que no pod¨ªan ser fidedignos. A veces es m¨¢s f¨¢cil hablar que comprender. Irak estaba viviendo un momento verdaderamente hist¨®rico. Ha sido una prueba muy dif¨ªcil, pero estoy convencido de que se ha superado.

Valenzuela, colombiano de 47 a?os, es hijo de diplom¨¢ticos y habla cinco idiomas. Desde hace ocho meses trabaja para preparar la maquinaria organizativa que se encargar¨¢ de establecer el resultado de las urnas. Posee una experiencia digna de respeto: Camboya, Sur¨¢frica, Mozambique, Hait¨ª, Liberia, Rep¨²blica Centroafricana, M¨¦xico, Timor Oriental, Palestina.

P. ?A qu¨¦ altura del recuento nos encontramos?

R. Las primeras urnas llegaron esta ma?ana. Ahora comienzan los controles en el centro de recogida de Bagdad, que van a ser ocho. Los datos se introducir¨¢n en 80 ordenadores y la base de datos los procesar¨¢. Los resultados se conocer¨¢n en el plazo de una semana.

P. ?Por qu¨¦ no han llegado hasta hoy?

R. Hemos preferido hacer las cosas como es debido para evitar errores. El sistema de control, recuento y proceso de datos comprende varias etapas de verificaci¨®n. Primero, el recuento en los colegios; luego, un segundo control tambi¨¦n en los colegios. Despu¨¦s, el traslado de las urnas. Luego, otros recuentos y controles. Todo tiene que ser transparente. Es una maquinaria compleja, y hacerla funcionar requiere tiempo. Lo cual evita los fraudes que siempre est¨¢n al acecho.

P. ?C¨®mo los han evitado?

R. En ¨²ltima instancia, contando el material delicado. Las urnas, las papeletas, la tinta. Todo se llev¨® a los colegios pocas horas antes de la apertura. El objetivo era evitar falsificaciones y copias. Las papeletas estaban hechas de un papel especial, la tinta indeleble estaba comprobada, el sistema de transmisi¨®n se prob¨® una y otra vez.

P. En muchas provincias no se vot¨®. ?No lo considera un fracaso?

R. La cuesti¨®n de la seguridad no entraba en el mandato de la ONU. Exist¨ªa un Comit¨¦ para la seguridad que se coordinaba con la Comisi¨®n electoral. Nosotros ten¨ªamos que centrarnos en la transparencia del sistema electoral.

P. Pero eso no excluye la existencia de un voto frustrado.

R. Todos pudimos ver lo que ocurri¨® el 30 de enero. El grado de violencia fue inferior al que estamos acostumbrados a ver en Irak. Los que quer¨ªan impedir estas elecciones no consiguieron disuadir a los ciudadanos de que acudieran a votar. Eso es una realidad.

P. A los medios s¨®lo se les dej¨® ver cinco colegios. ?No le parecen pocos?

R. Ocurre en todas las elecciones que se celebran en pa¨ªses dif¨ªciles y con una gran inseguridad. Lo mismo sucedi¨® en Timor Oriental.

P. Se ha dicho que se trasladaron 700 mesas electorales de ¨¢reas dif¨ªciles a otras m¨¢s tranquilas.

R. No me parece un dato real. De todas formas, es normal trasladar mesas por motivos de seguridad. Aunque el dato fuera cierto, el resultado global no cambia. La participaci¨®n ha sido muy alta. Y el criterio de valoraci¨®n final es evidente: fue la voluntad colectiva del pueblo iraqu¨ª de ir a votar. Lo que hay que preguntarse es si la voluntad se ha podido expresar a trav¨¦s de las urnas.

P. ?Y qu¨¦ responde?

R. No puedo decir gran cosa, pero creo sinceramente que s¨ª.

? La Repubblica