La Generalitat pondr¨¢ fin a la prohibici¨®n de abrir hipermercados

Prohibido prohibir. Esta es la filosof¨ªa sobre aperturas de centros comerciales que impregnar¨¢ la normativa que prepara la Generalitat. Bas¨¢ndose en ella, dejar¨¢ de prohibir por reglamento la implantaci¨®n de nuevos hipermercados y grandes superficies mayores de 45.000 metros cuadrados, una norma que aprob¨® en su plan de Equipamientos Comerciales en julio de 2001.

A partir de ahora se deber¨¢ justificar la negativa a otorgar licencias de apertura, pero nunca a trav¨¦s de una norma legal limitativa, dicen fuentes del Departamento de Comercio. El cambio supone un triunfo para la patronal de grandes superficies Anged que llev¨® la prohibici¨®n a los tribunales y gan¨® el pleito en el Tribunal Superior de Justicia de Catalu?a el pasado noviembre.

Los tiempos que se avecinan para la normativa comercial catalana son de cambio. En los pr¨®ximos meses se va a modificar la ley de Equipamientos Comerciales -que regula c¨®mo se otorgan las licencias de las grandes superficies- y a redactar un nuevo plan sectorial del sector. El borrador de la nueva ley prev¨¦ mantener la obligaci¨®n de obtener dos licencias para abrir un gran centro comercial: la de la Generalitat y la del Ayuntamiento donde se vaya a ubicar. Necesitar¨¢n licencia los centros que tengan entre 400 y 2.500 metros cuadrados, entre 10.000 y 240.000 habitantes. Se consideran grandes supercicies los centros que sobrepasan los 2.500 metros cuadrados de venta en las ciudades de m¨¢s de 240.000 habitantes y 400 en los de menos de 10.000 habitantes. Entre ambos extremos existe una escala que combina metros y poblaci¨®n.

Normas para 60 ciudades

El Departamento de Comercio, que dirige Josep Huguet, ya ha decidido introducir una novedad importante en la nueva ley de Equipamientos Comerciales: s¨®lo se podr¨¢n abrir grandes superficies en los centros urbanos o en "sus barrios hist¨®ricos consolidados" (v¨¦ase EL PA?S del 4 de febrero). La medida pretende "atender al impacto en el medio ambiente y evitar desplazamientos a la periferia para satisfacer sus necesidades de compra", dice el director general de Comercio, Raimon Serret. Tambi¨¦n se planea prohibir que las grandes superficies puedan ampliar sus instalaciones si est¨¢n fuera de los centros urbanos, medida por la que la patronal de grandes superficies Anged pone el grito en el cielo.

Una de las claves de la reforma en ciernes radica en definir qu¨¦ se entiende por centro urbano o barrio hist¨®rico consolidado para autorizar grandes superficies. Comercio afirma que ser¨¢ necesario definir mediante reglamento el per¨ªmetro de lo que se considera centro urbano en unas 60 ciudades de m¨¢s de 10.000 habitantes.

Pero el sector est¨¢ reticente a los planes de la Generalitat. Algunos recuerdan aquella frase del Conde de Romanones: "Hagan ustedes las leyes que yo har¨¦ los reglamentos", para destacar que ¨¦stos ¨²ltimos suelen acabar siendo m¨¢s decisivos que la propia la ley.

Las grandes superficies est¨¢n en contra de situar s¨®lo en el centro urbano los grandes comercios, pero adem¨¢s se oponen a la forma de legislarlo. "No se puede dejar para el reglamento la concreci¨®n de qu¨¦ se entiende por centro urbano. Es tan importante que la filosofia debe estar en la ley", dice Anged. Sin embargo, fuentes del Departamento de Comercio aseguran que en este punto no est¨¢ previsto incorporar medidas concretas en la ley, y s¨ª en el reglamento.

Las enmiendas de la C¨¢mara de Comercio de Barcelona al borrador de la nueva ley de Equipamientos comerciales son elocuentes. Tambi¨¦n las de la Confederaci¨®n de Comercio de Catalu?a. "Consideramos que la ley y no el reglamento debe concretar qu¨¦ se entiende por centro urbano", dice la patronal de comerciantes, que agrupa a 90.000 peque?os empresarios. "Es necesario un debate m¨¢s profundo", arguye la C¨¢mara de Comercio.