C¨¦sar Manrique absorbe el "esp¨ªritu de la tierra" en sus pinturas abstractas

C¨¦sar Manrique (1919-1992) metabolizaba su tierra natal, Arrecife, a trav¨¦s de sus pinturas, que parecen surgir del cromatismo, la geolog¨ªa y el paisaje volc¨¢nico insular de Lanzarote. Fue un pintor que "absorbi¨® al esp¨ªritu de la tierra", seg¨²n afirm¨® ayer Fernando G¨®mez Aguilera, presidente de la Fundaci¨®n C¨¦sar Manrique y comisario de la exposici¨®n que ayer se inaugur¨® con 53 obras en el IVAM y que reivindica al artista como uno de los renovadores de la abstracci¨®n espa?ola en los a?os cincuenta, sesenta y setenta desde el informalismo y la pintura mat¨¦rica.

Quiz¨¢ la obra pict¨®rica de C¨¦sar Manrique ha quedado "algo oscurecida" por el peso del arte p¨²blico que el creador cultiv¨® con una gran proyecci¨®n en las ¨²ltimas d¨¦cadas, apunt¨® el comisario. Pero sus aportaciones en la pintura fueron muy "singulares" y se produjeron en plena sinton¨ªa con las representaciones m¨¢s contempor¨¢neas de la ¨¦poca que optaron por el camino de la abstracci¨®n informalista y mat¨¦rica, avanzado ya el ecuador del siglo XX. Otros artistas espa?oles como Antoni T¨¤pies, Lucio Mu?oz o Manuel Millares caminaban entonces en la misma direcci¨®n.

De modo que la exposici¨®n del IVAM, y que se podr¨¢ ver hasta el 24 de abril, reivindica al Manrique "m¨¢s sobrio e ¨ªntimo", el que empieza a investigar a finales de los a?os cincuenta con la materiales como referencia expl¨ªcita al paisaje insular "que conform¨® su sensibilidad", a?adi¨® G¨®mez Aguilera. Las diferentes texturas y colores de la lava volc¨¢nica, de la tierra, constituyen la materia que nutre y define sus obras. La producci¨®n de los a?os sesenta y setenta centra la atenci¨®n de la muestra que contiene obras comprendidas entre 1959 y 1992, a?o en que la Expo de Sevilla le dedic¨® una antol¨®gica.

Fue en 1959 cuando Manrique reorienta su producci¨®n hacia lo mat¨¦rico. Organiza una exposici¨®n en su estudio de Covarrubias de Madrid (donde hab¨ªa estudiado en la Academia de Bellas Artes de San Fernando) en el que presenta, adem¨¢s de piezas de otros artistas, obras suyas sobre papel y m¨®viles. ?stos ¨²ltimos fueron filmados por el director de cine Nicholas Ray para un programa de la televisi¨®n americana. Al a?o siguiente, el artista de Arrecife particip¨® en la Bienal de Venecia. En 1965 se instal¨® en Nueva York, donde conoce a artistas como Frank Stella, Andy Warhol o Mark Rothko. All¨ª empieza a liberar parte del lienzo de la materia, creando fondos de color m¨¢s intenso. Son cuadros que atrapan la mirada en el recorrido expositivo por el estallido crom¨¢tico de los rojos.

En 1966, el artista fija su residencia en Lanzarote y se reencuentra con el paisaje de su infancia que plasmar¨¢ en las obras que prepara para Nueva York. Este a?o, Manrique empieza a desarrollar numerosos proyectos paisaj¨ªsticos en la isla, convirti¨¦ndose en un activista de la preservaci¨®n del patrimonio natural y cultural, as¨ª como de la conciencia ambientalista.

"El esp¨ªritu de la naturaleza" alienta sus obras, se?al¨® el comisario de la muestra. Manrique fue "un pintor naturalista de la abstracci¨®n que supo olfatear muy bien el espacio en el que se mov¨ªa. No hizo nunca m¨ªmesis, no reprodujo la naturaleza, sino que interioriz¨® las sensaciones del paisaje y pint¨® una memoria creada de la realidad", agreg¨®. En este sentido, G¨®mez Aguilera record¨® la pregunta formulada por el poeta Francisco Brines: "?Es C¨¦sar Manrique un pintor abstracto o un pintor hiperrealista?".

La mitad del m¨¢s de medio centenar de obras que forman la exposici¨®n nunca se han visto en Espa?a con anterioridad, se?al¨® el comisario. Las obras proceden de colecciones de pa¨ªses como EE UU, Francia, Costa Rica o Alemania. Otros cuadros apenas son conocidos y pertenecen a colecciones particulares. Adem¨¢s, la muestra se alimenta de los fondos de la Fundaci¨®n C¨¦sar Manrique y del Gobierno canario.

El presidente canario, Ad¨¢n Mart¨ªn, de Coalici¨®n Canaria, asisti¨®, junto a otros miembros de su gobierno, al acto de inauguraci¨®n de la primera retrospectiva de Manrique desde su fallecimiento. Tambi¨¦n el expresidente canario y ex ministro socialista Ger¨®nimo Saavedra arrop¨® a varios miembros de la familia del artista. Por parte del gobierno valenciano, estuvo presente la secretaria auton¨®mica de Cultura, Concha G¨®mez.

Es importante "reivindicar el papel de Manrique como un pintor hist¨®rico y necesario para completar el mapa de la pintura espa?ola de los a?os cincuenta y sesenta", sostuvo el comisario. De este modo se acabar¨ªa con la "incomprensi¨®n y menosprecio" que el artista canario sufri¨® en ocasiones por parte de la administraci¨®n a causa de su condici¨®n de artista "ortodoxo y poco usual en este pa¨ªs", agreg¨® G¨®mez Aguilera. Adem¨¢s, el especialista anim¨® tambi¨¦n a poner fin al "aislamiento" y "exclusi¨®n" que los artistas canarios han venido sufriendo fundamentalmente de Madrid. En este punto, se mostr¨® esperanzado porque "la situaci¨®n est¨¢ cambiando en la Espa?a de las autonom¨ªas", al constituirse redes y no centros de irradiaci¨®n cultural".

La directora del IVAM, Consuelo Ciscar, defini¨® a Manrique como un "artista total", que conjug¨® en su trabajo "una funci¨®n educadora, ¨¦tica, est¨¦tica y medioambiental". Record¨® tambi¨¦n su preocupaci¨®n por su entorno, en el que intervino a trav¨¦s de sus actuaciones urban¨ªsticas en Lanzarote y otras islas del archipi¨¦lago canario. Los Jameos del Agua (1966), Taro de Tahiche (1969), Mirador del R¨ªo (1973) y Jard¨ªn de Cactus (1990) son algunos de las obras m¨¢s relevantes.

La muestra viene acompa?ada por una cat¨¢logo que reproduce las obras expuestas y contiene diversos textos de especialistas.