"No quiero disolverme en una falsa universalidad"
Unas mil p¨¢ginas lleva ya publicadas Marcelo Birmajer bajo el mismo ep¨ªgrafe de Historias de hombres casados. Tras Historias de hombres casados (1999) y Nuevas historias de hombres casados (2001), acaba de salir ?ltimas historias de hombres casados (Seix Barral). En este nuevo conjunto de cuentos vuelve a aparecer el ¨¢lter ego del escritor bonaerense, Javier Mossen, ahora en la frontera de los 40 a?os, "m¨¢s viejo, m¨¢s prudente, menos dispuesto a arriesgarse".
Con sus libros de cuentos, novelas y obras de teatro y guiones de cine (El abrazo partido), Marcelo Birmajer (Buenos Aires, 1966) est¨¢ construyendo lo que ¨¦l denomina "una casa en un lugar muy concreto". Una cosa es que todos los seres humanos tengamos puntos en com¨²n -"nuestros miedos, el hecho de estar espiritualmente y ¨¦ticamente bajo el umbral de la pobreza"- y otra que sus cuentos se puedan definir como "historias de amor no rom¨¢ntico cien por cien de Buenos Aires, jud¨ªas y de clase media". "Yo no soy un ciudadano del mundo y no quiero disolverme en una falsa universalidad".
"Son historias de amor no rom¨¢ntico, cien por cien de Buenos Aires, jud¨ªas y de clase media"
"Los 10 mandamientos y la risa aparte, todo lo dem¨¢s permanece en la penumbra"
As¨ª, el lector se encuentra con una galer¨ªa de personajes que se cruzan por el barrio de Once -donde Birmajer creci¨® y mantiene el estudio de trabajo- y que veranean en Miramar, "uno de los pocos sitios aut¨¦nticamente jud¨ªos que restan en la Argentina"; que tienen presente el Holocausto y que partieron a luchar en la guerra del Yom Kippur. Pero tambi¨¦n de hombres y mujeres que se encuentran, se casan, tienen hijos, se mantienen juntos o se separan; que tienen deseos y miedos; que se cuestionan, se preguntan por qu¨¦ son creyentes o por qu¨¦ tienen relaciones extramatrimoniales...
A sus personajes los atrapa, explica, en un momento de "expectativa y libertad" equiparable al instante previo a la recepci¨®n de las Tablas de la Ley por parte del pueblo jud¨ªo: "En el Sina¨ª se concentra toda la tragedia, toda la esperanza y todo el disparate". Un momento de gran "efecto dram¨¢tico" que ¨¦l traslada al terreno del amor: "En la batalla del amor es terrible la cantidad de cosas que uno puede hacer sin violentar la ley. Pero, aun siendo un infierno, es uno de los pocos para¨ªsos a los que tenemos acceso", afirma. En el fondo, subyace la imposibilidad de ser buenos, la manera de respetar la vida y la libertad de los dem¨¢s: "Los 10 mandamientos y la risa aparte, todo lo dem¨¢s permanece en la penumbra".
Marcelo Birmajer establece un juego ambiguo con su personaje Javier Mossen. Como su autor, Mossen es "un escritor jud¨ªo, porte?o y de clase media que acumula cierto desconcierto ante la vida". Pero ya est¨¢: "Quiero poder tener una criatura a quien le pueda pasar cualquier cosa sin que yo salga lastimado". Los gui?os a la confusi¨®n entre autor y personaje son constantes y dan pie a situaciones c¨®micas o desconcertantes. Permiten tambi¨¦n a Birmajer establecer su teor¨ªa de c¨®mo se tiene que contar, sobre todo en ?ltimas historias de hombres casados, donde Mossen escucha las historias de los dem¨¢s y quiere hacerlo de un modo determinado: "El personaje Mossen pide que le cuenten las cosas en orden y de forma sencilla. La realidad es ca¨®tica y el arte no puede imitar a la realidad en su sinsentido. Pienso que el escritor tiene que ser m¨¢s piadoso con el lector que Dios con todos nosotros".
Babelia
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