Una locomotora con la caldera a medio gas

Los indicadores comienzan a dar visos de un t¨ªmido repunte de la econom¨ªa alemana, pero los enormes riesgos que la acechan y las deprimentes cifras de desempleo no permiten a¨²n hablar de un crecimiento sostenido en la antigua locomotora europea. "Estamos en un proceso de recuperaci¨®n moderado. No hay que tener demasiadas esperanzas", asegura Reinhard Kudi?, economista jefe de la Asociaci¨®n de la Industria Alemana (BDI).

El PIB alem¨¢n creci¨® un 1,7 % en 2004, el mayor aumento desde 2000. Pero sin las exportaciones el aumento se hubiera reducido al 0,5%

La peor noticia de las ¨²ltimas semanas ha sido, sin duda, la estrepitosa cifra de paro de enero que, alimentada por efecto de la reforma laboral -por primera vez se registraban los perceptores de ayuda social como buscadores de empleo- y por motivos estacionales, ha superado en 37.000 personas la barrera psicol¨®gica de los cinco millones, con lo que alcanza ya un 12,1% de la poblaci¨®n activa. Se trata del mayor desempleo sufrido por Alemania desde el final de la Segunda Guerra Mundial.

El efecto estad¨ªstico de la reforma aumenta el abismo entre el Este y el Oeste revelando que la proporci¨®n de perceptores de ayuda en la antigua Rep¨²blica Democr¨¢tica Alemana (RDA) es mucho m¨¢s alta. La distribuci¨®n de los desempleados es del 9,9% en el Oeste y de 20,5% en el Este. Esta parte de Alemania ve con pavor c¨®mo la entrada de los nuevos pa¨ªses en la UE va a suponer el cierre del grifo de las subvenciones, por lo que trata de dejar bien atados fondos por valor de 153.000 millones de euros que el Gobierno federal ya hab¨ªa prometido, pero que ven peligrar a causa de la crisis.

"Tendencia al negativismo"

El ministro de Econom¨ªa, Wolfgang Clement, sigue sin ver motivos para el pesimismo. Su primer comentario sobre el dram¨¢tico aumento del paro fue de satisfacci¨®n porque "por fin reina la claridad en las estad¨ªsticas". En la presentaci¨®n del informe econ¨®mico anual del Gobierno Clement critic¨® la "tendencia al negativismo" reinante. Seg¨²n su informe, por contra, el pa¨ªs muestra signos claros de recuperaci¨®n que confirman lo acertado de las reformas emprendidas.

Si Clement tilda a la opini¨®n p¨²blica de pesimista, la realidad acostumbra a demostrar que el optimismo del ministro es exagerado. Una vez m¨¢s, el Gobierno ha tenido que revisar a la baja su pron¨®stico de crecimiento, del 1,7% al 1,6% % para 2005. Bert R¨¹rup, jefe del comit¨¦ de sabios que emite informes sobre la econom¨ªa dos veces al a?o, dice que esa cifra est¨¢ "en la frontera superior de lo realista". "Eso significa que somos realistas", contesta el ministro.

El primero de enero entr¨® en vigor la reforma laboral, denominada Hartz IV, que tiene el objetivo de reanimar el mercado incentivando al parado a buscar empleo. Cu¨¢ndo empezar¨¢n a notarse los efectos de la reforma en las cifras de paro es algo que ni el optimista Clement se atreve a presagiar. "No antes de marzo", dice. Mientras que los economistas de la patronal y de la C¨¢mara de Comercio e Industria (DIHK) esperan m¨¢s bien al segundo semestre para hacer balance. Dierk Hirschel, de la Federaci¨®n de Sindicatos (DGB), asegura que "Hartz IV no va a servir para crear empleo. No creemos que el desempleo sea un problema de sobreregulaci¨®n del mercado sino de escasa demanda. En esto tenemos una postura diferente del Gobierno. Al final de este a?o veremos qui¨¦n ten¨ªa raz¨®n".

Reinhard Kudi? espera que el desempleo se mantenga inalterado en 2005. "Si aumenta el nivel de ocupaci¨®n ser¨¢ gracias a empleos a tiempo parcial, de baja remuneraci¨®n, y al n¨²mero de personas que decidan hacerse aut¨®nomas, pero los empleos tradicionales a tiempo completo van a seguir reduci¨¦ndose", dice Kudi?. "Hartz IV no servir¨¢ si no se crean otras condiciones, como la reducci¨®n de costes laborales y la desregulaci¨®n del despido", a?ade el economista de la patronal industrial.

Seg¨²n el Instituto Federal de Estad¨ªstica, el producto interior bruto (PIB) creci¨® en Alemania un 1,7 % en 2004, lo que supone el mayor aumento desde 2000. Sin embargo, gran parte de ese crecimiento lo impuls¨® un a?o r¨¦cord de exportaciones, que crecieron un 10% y provocaron un super¨¢vit de 155.700 millones de euros. Esta cifra incluye s¨®lo las exportaciones de productos. Si se incluye la cada vez m¨¢s importante cuota de servicios, el super¨¢vit se queda en 137.000 millones.

Aparte de las ventas al exterior, que se concentraron en la primera mitad del a?o y se estancaron luego, pocos indicadores reflejan en 2004 un repunte econ¨®mico. Sin las exportaciones, el crecimiento hubiese alcanzado s¨®lo un 0,5 %.

El desempleo y los temores de que este a?o sigan los recortes de plantilla en la gran empresa no ayudan a dar seguridad. Deutsche Bank, por ejemplo, que aument¨® su beneficio netos un 86,5 % en 2004, quiere reducir a¨²n m¨¢s sus costes, por lo que ha anunciado un recorte de 6.400 empleos.

Por el miedo al desempleo y por las incertidumbres con respecto a un sistema de pensiones capaz de aguantar el tipo pese a los retos demogr¨¢ficos, la cuota de ahorro se sit¨²a ya en un 10,9%, una cifra que seg¨²n los expertos supera lo recomendable.

Riesgos y esperanzas

Dos riesgos importantes, no s¨®lo para Alemania, son el alto precio del crudo y la apreciaci¨®n del euro. Un euro fuerte contribuir¨¢ a medio plazo a reducir la exportaci¨®n alemana, que en 2004 fue el motor del crecimiento. Est¨¢ por ver si George W. Bush cumple su objetivo de reducir el d¨¦ficit en EE UU, lo que impedir¨ªa un mayor desequilibrio con el d¨®lar.

Clement espera que un repunte de la demanda interna compense el menor aumento de la exportaci¨®n en 2005, y puede ser que su pron¨®stico se cumpla esta vez, pues las inversiones de las empresas en equipamiento est¨¢ aumentando. Sin embargo, el comercio minorista volvi¨® a registrar en diciembre un descenso de ventas del 2,7% respecto a 2003, lo que supone la peor ca¨ªda en diez a?os.

Cierta dosis de esperanza ha venido este mes de la mano del ¨ªndice de confianza empresarial, publicado por el instituto IFO, que confirma una t¨ªmida subida en enero, situ¨¢ndose en 96,4 puntos, dos d¨¦cimas m¨¢s que en el mes anterior.

Volker Treier, de la C¨¢mara de Industria y Comercio, comparte este optimismo. "Alemania se encuentra en v¨ªas de crecimiento lento pero sostenido".