El 'protegido' de Xabi Alonso

Aparte de ser, como ¨¦l dice, un cocinitas, el donostiarra Juan Ugarte es el nuevo ¨ªdolo de los hinchas del Wrexham gal¨¦s, asiduo de la parte baja de la tabla de la League One, categor¨ªa correspondiente a la Segunda B espa?ola. "Ser¨¢ porque en el ¨²ltimo mes he metido 10 goles... me est¨¢n saliendo bien las cosas", cuenta Ugarte con cierto arrobo. A sus 24 a?os, el ex realista ha recalado en el Wrexham tras la mediaci¨®n de su amigo de siempre Xabi Alonso. "Estudiamos juntos en el Ekintza, correteamos por el barrio del Antiguo y coincidimos en los juveniles, el filial y el primer equipo de la Real Sociedad", dice.

Ahora, Ugarte vive d¨ªas de ensue?o. En la clasificaci¨®n de su equipo para semifinales de la Copa, marc¨® los dos goles de su club al Haverfordwest (2-1), y en la Liga volvi¨® a acaparar todos los goles marcados en la cancha del Chesterfield (2-4) y en el empate de ayer, a ¨²ltima hora con el Torquay (1-1). En estos momentos, los dragones, que est¨¢n a cuatro puntos de la salvaci¨®n, idolatran a Ugarte, que por fin se siente importante. "Porque aqu¨ª el f¨²tbol es m¨¢s respetado, se da la misma importancia a todas las Ligas nacionales, un jaleo que en Espa?a s¨®lo pasa en Primera".

Siguiendo el hilo de tantas promesas que al final no cuajan porque no cuentan con el respaldo suficiente en Espa?a, Juan Ugarte era uno de los valores mimados por el franc¨¦s Raynald Denoueix cuando dirig¨ªa a la Real Sociedad. "Pero tuve una lesi¨®n de rodilla, de tan s¨®lo 20 d¨ªas, pero con ella se acabaron mis opciones", relata con mal trago. Ugarte s¨®lo jug¨® un partido de Liga, en Zaragoza, que encima perdi¨® (3-2).

Su ca¨ªda en desgracia continu¨® con las cesiones de medio a?o en el Eibar -"no encaj¨¦ por el estilo de juego"- y otros tantos meses en la Real Uni¨®n. Tras meditar el consejo de otro amigo y futbolista guipuzcoano, Joseba Barandiaran, y de preparar su desembarco en el Reino Unido -"antes no me lo hab¨ªa planteado porque estaba en la Real, bien colocado"- a conciencia con clases de ingl¨¦s "centradas en la jerga", se decidi¨® a aterrizar en el Dorchester ingl¨¦s. All¨ª logr¨® siete goles en seis partidos, "y fue entonces cuando Xabi se meti¨® por medio y consigui¨® que me concedieran dos semanas de prueba en mi actual equipo", refiere Ugarte.

Tras demostrar sus habilidades con los reservas, el 30 de noviembre le contrataron para lo que resta de temporada. "Me hab¨ªan dicho que aqu¨ª te miman y te cuidan... luego resulta que es m¨¢s", cuenta todav¨ªa con sorpresa. Porque nunca se le borrar¨¢ del disco duro de su memoria el d¨ªa en que empez¨® a calentar para debutar "y el estadio se puso en pie, mientras yo me dec¨ªa: 'pero si todav¨ªa no he hecho nada".

Su voracidad ante el marco contrario, su rapidez y su buen manejo del bal¨®n -"soy diestro pero no tengo prejuicios a la hora de rematar"- le han convertido en un fen¨®meno m¨¢s all¨¢ del Canal de La Mancha. "Aqu¨ª se valora el d¨ªa a d¨ªa, no hay tantos prejuicios como en Espa?a", asegura.

Apadrinado por Xabi Alonso, Ugarte es en Wrexham el equivalente del centrocampista de toque r¨¢pido y exquisito en Anfield. "Salvo el d¨ªa que Lampard le rompi¨® el tobillo, suelo ir a verle al campo", cuenta el delantero vasco.

A media hora en coche de Liverpool, Juan, que vive en un apartamento habilitado dentro de una mansi¨®n de Chester, a tiro de piedra de Wrexham, propiedad de un aficionado "con sus mayordomos y todo eso", disfruta "de una vida relajada". Aunque no puede recorrer la playa de la Concha ni subir en el funicular al monte Igeldo, siempre que puede queda con Xabi para comer o dar una vuelta, ocio que apenas comparte con I?igo Idiakez, en el Derby County, a dos horas por carretera.

James y Tom, sus dos nuevos "amigos para toda la vida", son quienes m¨¢s disfrutan de sus habilidades culinarias. "L¨¢stima que lo ¨²nico que pidan sea paella", dice entre risas Ugarte, que pens¨® emular en los fogones a Juan Mar¨ªa Arzak -"he comido en El Bulli, pero prefiero la comida tradicional antes que la cocina reconstruida de Ferr¨¢n Adri¨¢"- y al que se la da igual o mejor amasar y fabricar goles. "Siempre tuve la ilusi¨®n de estudiar cocina pero, si alguna ilusi¨®n ten¨ªa en la vida, era triunfar en el f¨²tbol".