La nueva ley antiterrorista brit¨¢nica aumenta los poderes de Interior en perjuicio de los jueces

El ministro brit¨¢nico del Interior, Charles Clarke, present¨® ayer en el Parlamento un proyecto de ley de prevenci¨®n del terrorismo que aumenta sus poderes en detrimento de los jueces para controlar a los sospechosos de terrorismo contra los que no haya pruebas suficientes para procesarles. El Gobierno laborista de Tony Blair, sin embargo, ha decidido retrasar varias semanas la presentaci¨®n de medidas que exijan la suspensi¨®n de parte de la Convenci¨®n Europea de Derechos Humanos y en particular el pol¨¦mico arresto domiciliario de sospechosos.

Esa renuncia temporal se debe a la imperiosa necesidad que tiene el Home Office de que la ley sea aprobada de inmediato para que entre en vigor antes del 14 de marzo pr¨®ximo. Ese d¨ªa expira la normativa que todav¨ªa hoy permite la prisi¨®n preventiva e indefinida de los extranjeros sospechosos de terrorismo que no puedan ser juzgados debido a falta de pruebas o a que ¨¦stas procedan del servicio de inteligencia y el Gobierno no quiera revelarlas.

Esa normativa fue desarbolada una semana atr¨¢s por la C¨¢mara de los Lores en sus funciones de ¨²ltima instancia judicial. Aunque aquel dictamen no era jur¨ªdicamente vinculante, s¨ª era pol¨ªticamente letal y convert¨ªa en tarea imposible para el Gobierno de Tony Blair que el Parlamento, y en especial la C¨¢mara de los Lores, aceptara renovar su vigencia.

Desde entonces, el reci¨¦n nombrado ministro del Interior, Clarke -su predecesor, David Blunkett, dimiti¨® un d¨ªa antes del dictamen de los jueces-lores debido a un esc¨¢ndalo de abuso de poder-, ha buscado f¨®rmulas para acatar la opini¨®n de los altos magistrados sin perder el control sobre la decena de sospechosos que se encuentran detenidos en la c¨¢rcel de alta seguridad de Belmarsh, al sur de Londres.

Aplicaci¨®n a los nacionales

La nueva ley, que a diferencia de la que caduca en marzo ser¨¢ de aplicaci¨®n tanto a los extranjeros como a los nacionales brit¨¢nicos para evitar la discriminaci¨®n denunciada por los lores, introduce la pol¨¦mica figura de las "¨®rdenes de control". ?stas permiten al ministro del Interior imponer las condiciones que le parezcan necesarias para controlar las actividades del sospechoso. Van desde prohibir la posesi¨®n de determinados art¨ªculos o sustancias hasta restringir su trabajo o negocios, la asociaci¨®n o comunicaci¨®n con ciertos individuos, restringir su lugar de residencia o la gente que puede acceder a ella, obligarle a estar en determinado lugar o zona a ciertas horas, restringir sus movimientos dentro del Reino Unido o viajes internacionales, una prohibici¨®n espec¨ªfica de movimientos durante 24 horas, permitir el registro de su domicilio o la incautaci¨®n de alguna pertenencia, etc¨¦tera.

El Gobierno ha renunciado a introducir ¨®rdenes de control que conlleven la suspensi¨®n de toda o parte de la Convenci¨®n Europea de Derechos Humanos, como el arresto domiciliario. Ese tipo de propuestas se presentar¨¢n al Parlamento en un plazo no superior a 40 d¨ªas y ser¨¢n debatidas con menos prisas que la propuesta de ley de Prevenci¨®n del Terrorismo.

Sin embargo, subsisten puntos muy pol¨¦micos en la propuesta actual y sobre todo el hecho de que la ley deja en manos del ministro del Interior, y no de un juez, la aplicaci¨®n de las ¨®rdenes de control, aunque los jueces podr¨¢n derogar la decisi¨®n del ministro en un plazo de una semana. "Como ministro del Interior tengo que rendir cuentas ante el Parlamento por las decisiones que tomo y mi primera responsabilidad es proteger al pa¨ªs. Eso deja en mis manos la decisi¨®n de imponer ¨®rdenes de control a ciertos individuos", dijo Charles Clarke a los diputados.

Pero la oposici¨®n cree que deber¨ªan ser los jueces los encargados de imponer esas restricciones a las libertades individuales. "Planea usted sacrificar unos principios esenciales y antiguos de la libertad y la justicia brit¨¢nicas de una manera que acabar¨¢ yendo en contra de la seguridad", le respondi¨® el portavoz tory de Interior, David Davis.