El t¨²nel de Mar¨ªa de Molina, cortado dos horas al quedar enganchado un autocar

El t¨²nel de la calle de Mar¨ªa de Molina, el m¨¢s largo de Madrid con sus dos kil¨®metros de longitud, tuvo que ser cortado al tr¨¢fico ayer durante casi dos horas, hasta poco antes de la hora punta de la tarde, tras quedar enganchado un autocar a la entrada del subterr¨¢neo. El veh¨ªculo superaba la altura m¨¢xima permitida en el t¨²nel (3,5 metros) y, al intentar pasar, qued¨® atrapado. No hubo heridos ni da?os a otros coches, seg¨²n Emergencias Madrid.

El accidente se produjo a las cuatro de la tarde, cuando la circulaci¨®n en el t¨²nel "no era intensa", seg¨²n el portavoz de Emergencias. El autocar, dedicado al transporte discrecional (escolar, de empresa o similares), enfil¨® la entrada al subterr¨¢neo pero, al ser m¨¢s alto que ¨¦ste, qued¨® enganchado por el techo. Los servicios de emergencias no supieron precisar si el veh¨ªculo iba con gente o vac¨ªo.

La Polic¨ªa Municipal cort¨® al tr¨¢fico la circulaci¨®n en todo el t¨²nel, que tiene la boca de entrada en el cruce de Mar¨ªa de Molina con la plaza del Doctor Mara?¨®n, y tres bocas de salida: a la calle de Vel¨¢zquez, a L¨®pez de Hoyos y, bastante m¨¢s all¨¢, a la carretera de Barcelona. La circulaci¨®n fue desviada por Mar¨ªa de Molina y el paseo de la Castellana. "Ha habido complicaciones [atasco], pero no ha sido el caos. Afortunadamente no era hora punta", apunt¨® el portavoz de Emergencias Madrid.

Los bomberos desplazados al lugar estuvieron una hora y media, hasta las 17.35, tratando de desencajar el autocar. Primero desinflaron las ruedas, con lo que el veh¨ªculo perdi¨® altura. Despu¨¦s, con unas "herramientas especiales" lograron liberarlo y lo empujaron hacia el interior del t¨²nel para sacarlo por la calle de Vel¨¢zquez. All¨ª, la empresa se hizo cargo del veh¨ªculo. El tr¨¢fico en el subterr¨¢neo fue restablecido a las 17.45.

No es la primera vez que un veh¨ªculo se empotra en el t¨²nel de Mar¨ªa de Molina obligando a cortar la circulaci¨®n. El 9 de mayo de 2003, s¨®lo unas horas despu¨¦s de ser inaugurado, un coche y un cami¨®n corrieron igual suerte que el autocar de ayer: los conductores no se percataron de que superaban el g¨¢libo permitido y se empotraron contra la viga del techo. Dos meses m¨¢s tarde le sucedi¨® lo mismo a otro cami¨®n. Tambi¨¦n en esa ocasi¨®n hubo que cerrar el t¨²nel entre una y dos horas para sacar los veh¨ªculos.