Los invisibles
CIENT?FICOS DE TODO EL MUNDO se dar¨¢n cita la pr¨®xima semana en Espa?a para comprobar sobre el terreno los asombrosos efectos del agujero negro pol¨ªtico-medi¨¢tico que convierte a gran parte de la poblaci¨®n en invisible. "La madre que pari¨® al tontolpeo ¨¦ste, qu¨¦ especie de chorrada pretender¨¢ soltarnos este domingo". Es lo que est¨¢ pensando usted en este momento. No le niego raz¨®n. Por fortuna, se puede pasar p¨¢gina. Hay papel de sobra, y adem¨¢s de suplementos y revistas, Caperucita Roja con actividades de lectura comprensiva, que es lo que deber¨ªa hacerse con la informaci¨®n pol¨ªtica: "?Qu¨¦ es un bocazas? 1. Un pol¨ªtico que habla m¨¢s de lo que debe. 2. Un pol¨ªtico que habla. 3. Un pol¨ªtico". Retomo el hilo. Lo del agujero negro y toda la pesca. A por el segundo p¨¢rrafo, punto cr¨ªtico donde los haya, porque como dijo el cl¨¢sico: "?Qui¨¦n demonios lee el segundo p¨¢rrafo?" (el cl¨¢sico no dijo demonios, pero qu¨¦ necesidad hay de tratar el tema ¨®rganos genitales).
Ya sigo escribiendo para no dejar espacio en blanco en el peri¨®dico, pero lo mismo podr¨ªa copiar 500 veces "Zaplana es el mejor"
La presi¨®n de los medios de comunicaci¨®n para reducir la realidad a las reglas de la ficci¨®n impulsa a los pol¨ªticos a comportarse como actores. "V¨¢yase usted a tomar viento con su teor¨ªa de bolsillo, y que le den con una ca?a por donde m¨¢s ara?a". Correcto. No le entretengo m¨¢s. No se enfade. Muchas gracias, y disculpe las molestias. Ya s¨®lo sigo escribiendo para no dejar espacio en blanco en el peri¨®dico, pero lo mismo podr¨ªa copiar 500 veces "Zaplana es el mejor". (Que lo es, adem¨¢s).
Tercer p¨¢rrafo. El m¨¢s dif¨ªcil. La mayor¨ªa de los art¨ªculos se abandonan en el tercer p¨¢rrafo, hacia los 47 segundos de lectura. All¨¢ va: El pol¨ªtico cl¨¢sico, orador, lector y un poco fil¨®sofo, vive con absoluto desconcierto las reglas de la representaci¨®n, especialmente en los medios audiovisuales, que considera livianos, banales y est¨²pidos, y para adaptarse cree que debe decir cosas livianas, banales y est¨²pidas. O sea, tonter¨ªas. Resultado: pol¨ªtico de notable formaci¨®n intelectual dice tonter¨ªas sin venir a cuento.
4? p¨¢rrafo: Estas tonter¨ªas nos encantan a los medios, y tanto nos gustan que, en cuanto brota una, preguntamos por ella a otros pol¨ªticos. As¨ª puede ir el periodista de tonter¨ªa en tonter¨ªa como Tarz¨¢n de liana en liana, de manera que al final de la jornada uno ha podido cruzar la selva, y hacer el resumen: tonter¨ªas del d¨ªa.
Llegados hasta aqu¨ª, debo dar dos noticias, una buena y otra mala. La buena es que el art¨ªculo se va acabando. La mala es que no est¨¢ bien resuelto. A¨²n puede abandonar la lectura. Vamos a lo que estamos: este efecto de acci¨®n-reacci¨®n, tonter¨ªa+tonter¨ªa, forma un agujero negro que absorbe la realidad, la sustituye por una representaci¨®n y convierte a la mayor¨ªa de la poblaci¨®n en invisible. En Espa?a hay dos millones de personas dependientes. Son invisibles. Sus cuidadores, familiares cercanos, son otros dos o tres millones. Tambi¨¦n invisibles. Desaparecen del teatrillo de la actualidad devorados por el agujero negro que forman cada d¨ªa el sufl¨¦ de Maragall, el cond¨®n de Manuel Fraga, el franc¨¦s de ZP o la ¨²ltima de Bono. Cient¨ªficos de todo el mundo estudiar¨¢n este fen¨®meno la semana que viene. Logicamente, nadie les har¨¢ caso. La semana que viene habr¨¢ tonter¨ªas para aburrir. Como para ocuparse de una reuni¨®n de cient¨ªficos.
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