Protestas en la jornada de reflexi¨®n

M¨¢s de 40 manifestaciones ilegales en una jornada de reflexi¨®n sin convocante oficial, sin publicidad en medios impresos, difundidas por mensajes de m¨®vil. Nunca se hab¨ªa llegado tan lejos. Aunque fueron muy limitadas en n¨²mero, el PP las considera una de las claves de su derrota.

Desde el principio, el partido de Mariano Rajoy acus¨® al PSOE de organizar esa protesta con un lema com¨²n: "Queremos la verdad, antes de votar". Los que estuvieron all¨ª saben que, aunque entre los manifestantes hubiera algunos militantes del PSOE y de IU -Llamazares ha reconocido que ¨¦l tambi¨¦n reenvi¨® el mensaje-, los partidos no estaban detr¨¢s.

La persona que envi¨® el primer mensaje, que luego escap¨® a su control con un reenv¨ªo masivo (creci¨® un 20% el tr¨¢fico sobre la media de un s¨¢bado) es un padre de familia que este a?o cumplir¨¢ los 40 y esconde su nombre por temor a la presi¨®n del PP. No es militante de ning¨²n partido, pero s¨ª activista contra el Gobierno de Aznar. Estuvo en todas las manifestaciones del no a la guerra, el Prestige y la huelga general. ?l s¨®lo envi¨® la convocatoria ante la sede central del PP en Madrid a 12 personas. El resto lo hizo la tensi¨®n de ese s¨¢bado, que deriv¨® en tragedia en Pamplona, donde un polic¨ªa retirado mat¨® a un panadero porque se neg¨® a colocar en su tienda un cartel con el lema "No al terrorismo, ETA no".

Las manifestaciones no eran espont¨¢neas. Detr¨¢s de ellas hab¨ªa activistas de min¨²sculas organizaciones. Y voluntarios que van por libre. Uno de los argumentos m¨¢s utilizados para tratar de demostrar que hab¨ªa un partido o un sindicato detr¨¢s es la coincidencia de las pancartas en Madrid. Miles de p¨¢ginas con la palabra Paz en rojo no pueden improvisarse, se?ala el PP. Es verdad. Detr¨¢s de ellas est¨¢ Mart¨ªn Sagrera, un jubilado de 69 a?os. Es muy conocido por los habituales de las manifestaciones. Las recorre todas -las de la guerra, las del terrorismo, hace a?os las del 0,7% y m¨¢s recientemente, las del no a la Constituci¨®n europea- con un carrito lleno de pancartas. Las hace ¨¦l, y las regala. No llevan el lema de ning¨²n partido, son sencillas (Eta No, Paz) y gratuitas. Todo el que se acerca a ¨¦l las coge. S¨®lo para la protesta contra la guerra de Irak hizo 20.000. Lo paga todo, "m¨¢s barato de lo que parece", asegura, con una herencia que tuvo de su abuelo y que destina a su pasi¨®n, el activismo.

Su casa en Madrid es como una imprenta. En cada armario y debajo de las camas hay cajas enteras llenas de papeles con mensajes y palos para sujetarlos, que compra a una empresa de Alicante. "Soy un voluntario profesional", se r¨ªe Sagrera, ex profesor universitario, te¨®logo laico, que lleva sus pancartas por toda Espa?a.

Ahora se enfada cuando lee la pregunta: ?Qui¨¦n llev¨® esas pancartas a la manifestaci¨®n del 13 de marzo? "Fui yo. Unas 1.500. Me sobraban muchas del a?o anterior, porque calcul¨¦ que la guerra durar¨ªa mucho m¨¢s tiempo. Y no soy militante de ning¨²n partido. S¨®lo estuve dos a?os en el PSOE en los 80, pero me fui, no me gustan. Estas semanas he repartido miles de panfletos contra la Constituci¨®n europea. Todo lo hago con mi coche, un carrito adaptado y alg¨²n amigo jubilado".

Sagrera no se arrepiente de nada y cree, como muchos de los manifestantes, que ayud¨® a derrotar al PP. Aunque tambi¨¦n piensa que fue muy ¨²til la publicidad que le dio Mariano Rajoy a una protesta muy limitada (10.000 personas como m¨¢ximo), cuando entr¨® en directo en el telediario, seguido por casi cinco millones de personas, precisamente para denunciar el acoso a su sede.