La fiscal¨ªa pedir¨¢ a Sanidad su informe por las muertes en las urgencias de Legan¨¦s

La Fiscal¨ªa de Madrid va a requerir al consejero de Sanidad de la Comunidad, Manuel Lamela, para que le remita el informe que han elaborado sus inspectores sobre la supuesta alta tasa de mortalidad registrada en los ¨²ltimos dos a?os en las urgencias del hospital Severo Ochoa de Legan¨¦s (Madrid). ?sta es la primera medida que va a adoptar la fiscal¨ªa en el marco de las diligencias que ha abierto tras recibir una denuncia an¨®nima en la que se da cuenta de una supuesta "mala praxis" en la administraci¨®n de calmantes a enfermos terminales.

La denuncia que ya investiga la fiscal¨ªa ha llegado al ministerio p¨²blico por dos v¨ªas diferentes: a trav¨¦s del consejero de Sanidad de Madrid, Manuel Lamela -"para que la fiscal¨ªa valore su contenido y act¨²e en consecuencia"-, y por la Asociaci¨®n de Defensa del Paciente, cuya portavoz es Carmen Flores. Ambas denuncias, con el mismo contenido, se van a acumular en unas mismas diligencias. Lamela recibi¨® la citada denuncia an¨®nima el pasado d¨ªa 8 y en ella se indicaba que unos 400 pacientes del hospital -muchos de ellos enfermos de c¨¢ncer en fase terminal- pudieron haber sido v¨ªctimas de dosis excesivas de morfina, Dormicum y Tranxilium en los dos ¨²ltimos a?os.

El fiscal jefe del Tribunal Superior de Justicia de Madrid, Manuel Moix, ha encargado la investigaci¨®n del caso al decano del destacamento que posee la fiscal¨ªa madrile?a en los municipios de Gatafe y Legan¨¦s, Pedro Mart¨ªnez.

Seg¨²n fuentes cercanas a la investigaci¨®n, lo primero que har¨¢ la fiscal¨ªa ser¨¢ requerir al propio consejero de Sanidad para que le remita los informes y toda la documentaci¨®n que han recabado los inspectores de Sanidad en las urgencias de este hospital durante la visita que efectuaron al centro, por orden de Lamela, el pasado d¨ªa 9. El propio Lamela inform¨® al fiscal jefe de que su departamento hab¨ªa efectuado una investigaci¨®n interna. En la denuncia an¨®nima origen de las pesquisas hay un anexo en el que figuran los nombres de ocho pacientes y una larga relaci¨®n de n¨²meros supuestamente correspondientes a los historiales m¨¦dicos de otros enfermos. Fuentes sanitarias creen que el autor de la misma es "alguien del hospital".

Precisamente, en las conclusiones provisionales de esa investigaci¨®n se ha basado el consejero Lamela para relevar temporalmente de su cargo al coordinador del servicio de urgencias de Legan¨¦s, Luis Montes.

Entre otros extremos, Sanidad ha comprobado que el ¨ªndice de mortalidad en las urgencias del hospital Severo Ochoa de Legan¨¦s es "tres o cuatro" veces superior al de otros hospitales de sus mismas caracter¨ªsticas, sin que aparentemente haya nada que lo explique, seg¨²n fuentes sanitarias. Aunque en las urgencias la tasa de mortalidad es muy elevada, no ocurre igual en las plantas del hospital, con par¨¢metros inferiores a otros centros sanitarios. Es m¨¢s, comparados los datos totales (urgencias y planta) con otros hospitales, la mortalidad en el Severo Ocho es inferior.

Tras analizar el informe, y en funci¨®n de su contenido, fuentes cercanas a la fiscal¨ªa madrile?a no descartan la posibilidad de que tambi¨¦n se pidan historiales cl¨ªnicos de pacientes con patolog¨ªas terminales que hayan pasado por las urgencias. El objetivo ser¨ªa comprobar si, como se deja entrever en la denuncia an¨®nima, se les administr¨® dosis excesivas de f¨¢rmacos -b¨¢sicamente, calmantes y tranquilizantes- que pudieron acortar sus vidas sin que los familiares de los pacientes hubiesen sido informados de ello.

Derecho del paciente

La Fiscal¨ªa de Madrid tiene ahora dos opciones: analizar el informe que le remita Sanidad y, si entiende que hay indicios delictivos, remitirlo a un juzgado para que prosigan all¨ª las pesquisas, o bien desarrollar una investigaci¨®n propia que podr¨ªa terminar con el archivo de las diligencias o bien con la presentaci¨®n de una denuncia o querella ante los juzgados de instrucci¨®n de Legan¨¦s.

"Primero hay que determinar qu¨¦ es lo que ha pasado realmente en el centro y luego tomar una decisi¨®n. Pero no debemos perder de vista que los enfermos terminales tienen derecho a una buena muerte, a una muerte con el menor sufrimiento y dolor posibles", se?alan fuentes jur¨ªdicas, que a?aden: "Y tampoco debemos olvidar que casi siempre son los propios pacientes o sus familiares quienes urgen a los m¨¦dicos para que hagan desaparecer el dolor del familiar moribundo. ?ste es un tema de extraordinaria sensibilidad y con el que hay que ser muy cautelosos: llevarlo a la sinraz¨®n puede ocasionar que los m¨¦dicos se anden con papel de fumar a la hora de administrar calmantes a petici¨®n de enfermos o familiares si no es con autorizaci¨®n de un juez", advierten estos medios.