Un recuerdo constante de las dos Espa?as
Cientos de calles y monumentos honran al franquismo. S¨®lo en Madrid hay 167, incluida la colosal tumba de Franco
Parece que nadie los ve. Ni siquiera est¨¢n catalogados por ning¨²n organismo oficial. Y sin embargo, siempre que alguien intenta quitarlos, salen sus defensores. Son los s¨ªmbolos y recuerdos del franquismo, presentes en casi toda Espa?a, especialmente en el callejero. Aunque tambi¨¦n aqu¨ª la influencia de la pol¨ªtica es fundamental. Mientras en Catalu?a, donde el PP tiene s¨®lo una decena de alcaldes, est¨¢n casi erradicados, en Cantabria, tierra de tradici¨®n pol¨ªtica conservadora, hay pocos pueblos que no tengan referencias franquistas.
Es un asunto al que muchos alcaldes, tambi¨¦n los de izquierdas, le tienen terror, aunque cada vez menos. S¨®lo eso explica que en un lugar como Guadalajara, donde la izquierda ya gobern¨® en el pasado y ahora lo hace desde mayo de 2003, a¨²n no haya sido retirada la estatua de Franco y otra, m¨¢s espectacular, dedicada a Jos¨¦ Antonio. El ayuntamiento se ha comprometido a retirar la primera esta primavera, pero no tiene ni siquiera planes para la del l¨ªder hist¨®rico de la Falange.
"Nadie quiere que le quemen el coche", dice el teniente de alcalde de Guadalajara, de IU
Jorge Bedel, teniente de alcalde de Guadalajara, de Izquierda Unida -el alcalde es socialista-, admite que estas cosas no son sencillas en ciudades peque?as, y mucho menos en los pueblos. Por eso, tambi¨¦n aqu¨ª, se busca la excusa de una remodelaci¨®n de la plaza donde est¨¢ la estatua. "El alcalde ten¨ªa miedo a la pol¨¦mica. La verdad es que nos esper¨¢bamos m¨¢s l¨ªo cuando lo anunciamos. Es mejor hacerlo con cierta discreci¨®n. Nadie quiere que le quemen el coche".
S¨®lo en Madrid, una ciudad donde la izquierda gobern¨® m¨¢s de 10 a?os -aunque desde el 89 los conservadores ocupan la alcald¨ªa ininterrumpidamente- hay 167 v¨ªas dedicadas a prebostes del franquismo, contabilizadas por IU, la formaci¨®n m¨¢s activa a la hora de reivindicar que se deje de honrar, con una calle o un monumento, al dictador y sus adl¨¢teres. En Madrid hay calles dedicadas a los Ca¨ªdos de la Divisi¨®n Azul, al general Mill¨¢n Astray -famoso por su frase "?Muera la inteligencia, viva la muerte!"-, al general Moscard¨® o a Yag¨¹e. Tambi¨¦n existen otros tantos colegios, institutos y centros de salud dedicados a ellos.
Cuando la izquierda lleg¨® al poder en miles de ayuntamientos, en 1979, hubo una especie de furia de cambio de nombres y retirada de monumentos. Luego se par¨®, y s¨®lo en los ¨²ltimos a?os se ha recuperado, lentamente. La presi¨®n de las asociaciones se ha convertido en un problema incluso para el PP, como sucedi¨® en Santander.
A falta de recuentos oficiales -la vicepresidencia primera del Gobierno, que lleva seis meses trabajando en este asunto y prepara una ley para prohibir los s¨ªmbolos franquistas, reconoce que no los tiene clasificados-, una b¨²squeda por Internet demuestra la espectacular presencia de calles como Avenida del General¨ªsimo. Centenares de ellas est¨¢n en los pueblos peque?os de Espa?a, pero no s¨®lo. En Pozuelo de Alarc¨®n, a las afueras de Madrid, que se ha convertido ya en una peque?a ciudad residencial gobernada por el PP, la calle principal es Avenida del General¨ªsimo y otra de las mayores, General Mola.
La presencia es mayor en algunas zonas m¨¢s conservadoras, como Castilla y Le¨®n, Cantabria, Galicia o Canarias, y en ciudades mito para el franquismo, como Burgos o Toledo. Dos gobiernos de coalici¨®n BNG-PSOE aprovecharon sus breves estancias en el Ayuntamiento de Ferrol, ciudad natal del dictador, y Ponteareas (Pontevedra), para quitar sendas estatuas de Franco. Pero otros alcaldes socialistas llevan muchos a?os gobernando pero no han resuelto el conflicto. Es el caso de Francisco V¨¢zquez, primer edil de A Coru?a, una ciudad en la que Mill¨¢n Astray, por ejemplo, tiene una plaza y una estatua.
En los pueblos peque?os se necesita m¨¢s coraje pol¨ªtico. En San Vicente de la Barquera (Cantabria), la calle principal, atravesada en verano por miles de turistas espa?oles y extranjeros, se llama Avenida del General¨ªsimo, como sucede en el vecino Cabez¨®n de la Sal. El PP perdi¨® por sorpresa la alcald¨ªa de San Vicente en 2003. El PSOE gobierna ahora, pero en coalici¨®n con IU, los regionalistas y un independiente. Por si acaso, de momento nadie ha cambiado esa calle.
El Foro por la Memoria, vinculado al PCE, tiene una p¨¢gina web (http://www.pce.es/foroporlamemoria/simbolos_franquistas.htm), en la que los ciudadanos dejan constancia, tambi¨¦n fotogr¨¢fica, de lo que han ido encontr¨¢ndose en sus viajes. Hay cruces de los ca¨ªdos repartidas por toda Espa?a, nombres de pueblos (como los Llanos, Guadiana o Ti¨¦tar del Caudillo), y sobre todo iglesias, en cuyas paredes permanecen, inmutables, 66 a?os despu¨¦s del fin de la guerra, la lista de los "Ca¨ªdos por Dios y por Espa?a". Varias asociaciones han pedido a la Iglesia espa?ola que las quite, pero ¨¦sta no responde.
El monumento m¨¢s emblem¨¢tico es la propia tumba de Franco y Jos¨¦ Antonio en el Valle de los Ca¨ªdos, a 50 kil¨®metros de Madrid, con su enorme cruz que se divisa desde toda la sierra. 430.000 personas la visitan cada a?o, muchos de ellos extranjeros que encuentran aqu¨ª un monumento ¨²nico en una democracia. El Gobierno est¨¢ estudiando cambiar su uso, ya que ahora los falangistas acuden a rendir honores al dictador.
ERC pide cerrarlo, pero la mayor¨ªa de las asociaciones se conformar¨ªan con que una placa recordara a los 1.200 presos pol¨ªticos que durante 20 a?os pagaron, algunos con la vida, su "adhesi¨®n a la rebeli¨®n", seg¨²n la terminolog¨ªa franquista. Ni siquiera eso se ha podido lograr en 27 a?os de democracia.
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