Batacazo definitivo en el Palau

El Scavolini hizo trizas al Barcelona, que se fue por la puerta de atr¨¢s de la Euroliga. El equipo italiano gan¨® con todas las de la ley, con una suficiencia inusitada, con una facilidad para anotar triples que hel¨® el Palau Blaugrana. El p¨²blico respondi¨® como siempre pero el equipo dej¨® much¨ªsimo que desear. Tir¨® s¨®lo de entusiasmo y trat¨® de buscarle las vueltas al partido pero su funcionamiento fue deficiente en todas las l¨ªneas. Defendi¨® mal, atac¨® peor, no encontr¨® ant¨ªdoto para un rival muy inspirado y tampoco recibi¨® ox¨ªgeno desde el banquillo. Ninguna de las decesiones de Manolo Flores logr¨® ni darle aire a su equipo ni rebajar la autoridad insultante del Scavolini. No logr¨® subir el baj¨ªsimo nivel defensivo de su equipo en ninguno de sus tiempos muertos, no enmend¨® la iniquidad con la que Penn, Smith, Mottola y Malaventura lanzaron desde fuera del per¨ªmetro, ni hubo noticias de alguna estrategia presionante que rompiera el ritmo del equipo italiano. Tampoco las rotaciones de los jugadores azulgrana fueron las m¨¢s efectivas, empezando por la ausencia de Navarro en los cinco minutos y pico iniciales en los que el Barcelona no meti¨® ni una canasta.

El Scavolini sali¨® a todo trapo. Cometi¨® tres faltas en la primera arremetida del Barcelona. Un s¨ªntoma que pod¨ªa interpretarse de dos maneras. O bien sus jugadores se hab¨ªan contagiado de la desaforada gestualidad de su entrenador, Marco Crespi, o bien estaban metidos de lleno, desde el primer instante y hasta las ¨²ltimas consecuencias en la tarea defensiva. Sucedi¨® lo segundo.

La forma en que el tembleque general afect¨® a todos y cada uno de sus jugadores qued¨® reflejada en la estad¨ªstica de tiros libres en la que apenas super¨® un paup¨¦rrimo 55% de acierto. Cuando el Barcelona quiso darse cuenta, Penn -7 triples-, Smith y Malaventura ya hab¨ªan metido tanta tierra de por medio que darle la vuelta al marcador era misi¨®n imposible. El Barcelona jug¨® a la desesperada desde mediado el tercer cuarto (43-57) y nada m¨¢s entrar en el ¨²ltimo se cercior¨® de que la suerte estaba echada (64-82). El Scavolini acompa?ar¨¢ al CSKA a cuartos de final y el Barcelona y el Real Madrid tendr¨¢n que disputar la pr¨®xima semana una ¨²ltima jornada intrascendente, el cl¨¢sico m¨¢s in¨²til y triste de los ¨²ltimos tiempos.