El Gobierno del PP desech¨® por irrelevantes en 2002 grabaciones de Huarte con Bensmail

Las conversaciones y contactos mantenidos antes del atentado del 11-M entre el preso islamista argelino Abdelkrim Bensmail, vinculado al grupo terrorista GIA, y el militante socialista Fernando Huarte, presidente de la ONG Asociaci¨®n Nacional Amigos del Pueblo Palestino Al-Fatah, fueron grabadas, como se hace con car¨¢cter rutinario con todos los internos por terrorismo, y desechadas por "irrelevantes" para la investigaci¨®n judicial o para la seguridad del Estado. Estos hechos ocurrieron en 2002, cuando era ministro del Interior ?ngel Acebes, actualmente secretario general del PP.

La Direcci¨®n general de Instituciones Penitenciarias, dependiente del ministro del Interior, no consider¨® oportuno trasladar a la polic¨ªa o al juez el contenido de las conversaciones que, en marzo y abril de 2002, mantuvo el socialista Fernando Huarte con Abdelkrim Bensmail, interno en la c¨¢rcel de Villabona. Al contrario, destruy¨® las cintas o las regrab¨®, seg¨²n fuentes conocedoras de esos hechos.

Por esa raz¨®n, a pesar de que el PP ha solicitado que se facilite toda la informaci¨®n sobre esos contactos y el PSOE ha propuesto que se conozca el contenido de dichas conversaciones a trav¨¦s de la Comisi¨®n de Secretos Oficiales del Congreso, nada hay que pueda arrojar luz sobre cualquier proleg¨®meno del atentado del 11 de marzo 2004, que cost¨® la vida a 191 personas.

Lo ¨²nico que conserva la Direcci¨®n General de Instituciones Penitenciarias es la rese?a sobre una carta de junio de 2003 cuyo contenido s¨®lo versa de "cuestiones dom¨¦sticas o cotidianas", en ning¨²n caso valiosas para la investigaci¨®n judicial, as¨ª como la conversaci¨®n entre ambos grabada hace s¨®lo unos meses, en octubre de 2004, y conservada por orden del actual equipo del Ministerio del Interior.

Por motivos relacionados con la seguridad del Estado, la Direcci¨®n General de Instituciones Penitenciarias interviene todas las comunicaciones (vis-¨¤-vis, comunicaciones telef¨®nicas, cartas, etc.) de los presos por terrorismo.

Bajo el mandato del PP, se destru¨ªan todas las conversaciones cuyo contenido fuera irrelevante, bien desprendi¨¦ndose de las cintas o regrab¨¢ndolas. En caso de que encontraran en las grabaciones elementos valiosos para la lucha antiterrorista se trasladaban de inmediato a la polic¨ªa y al juez, pero la Administraci¨®n del PP no hizo esto en ninguna de las dos ocasiones en que Huarte visit¨® en prisi¨®n al islamista, por lo que sorprende m¨¢s que los responsables populares, entre los que se encuentra el propio ex ministro Acebes, aseguren ahora que no sab¨ªan nada de esos contactos y los considere primordiales para esclarecer el 11-M.

Viaje a Israel

La ¨²nica grabaci¨®n que se conserva es la correspondiente a la visita que Huarte hizo a la prisi¨®n siete meses despu¨¦s del 11-M y s¨®lo d¨ªas antes de que el juez Garz¨®n imputara a Bensmail por su implicaci¨®n en una c¨¦lula terrorista que planeaba volar la Audiencia Nacional. La conversaci¨®n vers¨® sobre los ¨²ltimos viajes realizados por Huarte a Oriente Pr¨®ximo y las dificultades que la polic¨ªa israel¨ª le pon¨ªa para moverse por esa zona.

Seg¨²n fuentes conocedoras de la conversaci¨®n, Huarte aludi¨® tambi¨¦n a que sus comunicaciones estaban intervenidas por los israel¨ªes y mostr¨® su comprensi¨®n por la causa ¨¢rabe, pero en ning¨²n momento hablaron de actividades terroristas ni se refirieron al 11-M. En dicha conversaci¨®n, Huarte expres¨® su abierto rechazo a ETA.

En uno de los bolsillos del preso islamista se encontr¨® una nota con el nombre de dos dirigentes de ETA, aunque los servicios de Seguridad de Instituciones Penitenciarias negaron que mantuviera relaciones con los reclusos etarras.

Bensmail estaba muy relacionado con uno de los supuestos jefes del comando del 11-M. Se trata del tambi¨¦n argelino Allekema Lamari, excarcelado en junio de 2002 por un error de la Audiencia Nacional agravado por el retraso en la comunicaci¨®n de una sentencia por el Tribunal Supremo. Desde su excarcelaci¨®n, Lamari se preocup¨® por lo que denominaba "sus hermanos", entre ellos Bensmail, a quien en ocasiones envi¨® dinero a trav¨¦s de un sirio que regentaba una poller¨ªa en Valencia.

Huarte visit¨® dos veces en prisi¨®n a Bensmail en 2002. En 2003 tan s¨®lo hubo una carta entre ambos y algunas conversaciones telef¨®nicas. En 2004 s¨®lo qued¨® registrada la visita de octubre.

Huarte asegura que fue Bensmail, detenido en 1997 junto a Lamari y condenado en 2001 por pertenencia al Grupo Isl¨¢mico Armado (GIA), quien contact¨® con la ONG que preside para recibir ayuda humanitaria. Huarte le consigui¨® a Bensmail, seg¨²n su testimonio, una cita con el dentista, algunas revistas en ¨¢rabe y le llev¨® a la c¨¢rcel ropas y otros objetos personales. Huarte mantiene que nunca habl¨® con ¨¦l de los atentados del 11-M o de ETA.

Por otra parte, para el pr¨®ximo martes el Grupo Parlamentario Socialista probablemente ya tendr¨¢ la decisi¨®n sobre c¨®mo abordar la informaci¨®n que quiere facilitar al resto de los grupos sobre las conversaciones entre Bensmail y Huarte en la c¨¢rcel de Villabona.

En principio la d¨ªrecci¨®n del Grupo Socialista prefiere que el marco sea la Comisi¨®n de Secretos Oficiales del Congreso. La raz¨®n es alejar este episodio del 11-M porque Bensmail no estaba en prisi¨®n por el atentado de Madrid sino por su pertenencia al Grupo Islamista Armado (GIA) por lo que est¨¢ preso desde 1998.