?frica, el cambio clim¨¢tico y la cumbre del G-8
El primer ministro brit¨¢nico, Tony Blair, ha declarado que los problemas en los que se centrar¨¢ la cumbre del G-8 el pr¨®ximo julio ser¨¢n la pobreza africana y el cambio clim¨¢tico del planeta. Puede que parezcan asuntos distintos, pero est¨¢n relacionados. Un viaje que he hecho a una aldea de Etiop¨ªa nos muestra por qu¨¦. Una ma?ana me llevaron al lecho seco de un r¨ªo a las afueras de una aldea donde los agricultores estaban cavando un pozo hasta la capa fre¨¢tica, a dos metros de profundidad. Hasta hace poco, ¨¦ste era un r¨ªo perenne -de ¨¦sos que fluyen todo el a?o-, pero ahora para durante la estaci¨®n seca. S¨®lo cuando empiezan las lluvias anuales, en el verano, reaparece el agua. Hasta entonces, las comunidades sedientas cavan en busca de agua; si la encuentran y si pueden, pagar el bombeo.
Las aldeas et¨ªopes dependen desde hace tiempo de dos cosechas: una durante el periodo corto de lluvias de marzo y abril, y la cosecha principal, durante la temporada larga de lluvias, en los meses de verano. En a?os recientes no ha habido temporada corta y la larga ha sido desigual. El hambre es omnipresente. Posiblemente la mitad de los ni?os tenga un peso muy por debajo del normal. Buena parte del ?frica subsahariana ¨¢rida ha experimentado un pronunciado descenso de la pluviosidad en los ¨²ltimos 25 a?os. La escasez de lluvia no s¨®lo contribuye a provocar hambrunas y hambre cr¨®nica, sino tambi¨¦n a la aparici¨®n de la violencia cuando la poblaci¨®n hambrienta se enfrenta por el agua y los alimentos escasos. Cuando estalla la violencia en zonas faltas de agua como Darfur, en Sud¨¢n, los dirigentes pol¨ªticos tienden a contemplar los problemas desde el punto de vista estrictamente pol¨ªtico. Si se deciden a actuar, movilizan fuerzas de paz, sanciones internacionales y ayuda humanitaria. Pero lo que hace falta es una estrategia de desarrollo para luchar contra el hambre y la sequ¨ªa. Los soldados no pueden mantener la paz entre poblaciones desesperadamente hambrientas.
Las regiones con problemas de agua como Etiop¨ªa y Sud¨¢n pueden adaptarse, al menos en parte, mediante la introducci¨®n de tecnolog¨ªas mejoradas, como el "riego gota a gota", la recogida de las aguas de lluvia, la mejora de las instalaciones de almacenamiento de agua, pozos profundos, y t¨¦cnicas agr¨ªcolas y silv¨ªcolas que hacen un mejor uso de la lluvia ca¨ªda. Unas pr¨¢cticas mejores de gesti¨®n de la tierra (como por ejemplo la replantaci¨®n de bosques degradados) pueden recargar los acu¨ªferos subterr¨¢neos. La ayuda a los pa¨ªses pobres de ?frica y de otras partes para que se adapten al cambio clim¨¢tico no deber¨ªa describirse como beneficencia o ayuda, sino como compensaci¨®n por los perjuicios impuestos a los m¨¢s pobres del planeta. Hace d¨¦cadas que se promete m¨¢s ayuda para que estos pa¨ªses escapen de la pobreza, pero todav¨ªa no la han recibido.
Adem¨¢s de adaptarse al cambio clim¨¢tico, el mundo debe tambi¨¦n "mitigar" los riesgos futuros para el planeta, reduciendo las emisiones de gases de efecto invernadero, que son la fuente del cambio clim¨¢tico provocado por los humanos. Las hambrunas de Etiop¨ªa y la violencia de Darfur nos dan una idea de lo que nos puede deparar el futuro. La mejor forma de reducir el cambio clim¨¢tico a largo plazo es reducir las emisiones de carbono. He aqu¨ª al menos tres opciones:
- Cambiar a fuentes energ¨¦ticas que no liberen carbono, como la energ¨ªa solar.
- Captar y eliminar el di¨®xido de carbono emitido por las centrales el¨¦ctricas de combustibles f¨®siles.
- Ahorrar energ¨ªa.
El esfuerzo para reducir los gases de efecto invernadero exigir¨¢ d¨¦cadas de acci¨®n, pero, dado el amplio margen de tiempo que se necesita para revisar los sistemas energ¨¦ticos mundiales, debemos empezar ahora. Los pa¨ªses ricos deben abrir el camino. Los africanos que sufren el hambre y la sequ¨ªa, y de hecho los pobres de todas partes, tienen derecho a pedir mucho m¨¢s a Estados Unidos y a los dem¨¢s pa¨ªses ricos. Tony Blair tiene raz¨®n al hacer un llamamiento a sus hom¨®logos de los pa¨ªses ricos para que cumplan las promesas hechas.
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