La Educaci¨®n de Adultos refuerza sus v¨ªnculos con Europa y el mercado laboral
Los planes de estudio incluir¨¢n el uso de ordenadores, idiomas y Formaci¨®n Profesional
La educaci¨®n de adultos tal y como se conceb¨ªa en los ¨²ltimos 25 a?os ha pasado a la historia. La Consejer¨ªa de Educaci¨®n ha iniciado la renovaci¨®n de estas ense?anzas con un doble objetivo: adaptarlas a los est¨¢ndares europeos y satisfacer las demandas de formaci¨®n de sus usuarios. Hasta el momento, la educaci¨®n de adultos se relacionaba principalmente con la erradicaci¨®n del analfabetismo y con la obtenci¨®n del t¨ªtulo de Graduado Escolar o el de Secundaria. Ahora, casi erradicado el analfabetismo, Educaci¨®n pretende sustituir estos conceptos por el de "formaci¨®n permanente", creando para ello centros de educaci¨®n de adultos permanentes y dotarlos de las infraestructuras materiales y humanas de las que antes carec¨ªan.
"Se trata de desterrar muchos de los t¨®picos que rodean a este tipo de ense?anzas. La educaci¨®n de adultos no es acudir a un centro a echar la tarde haciendo ganchillo o manualidades; es un tipo de formaci¨®n muy completa que persigue distintos fines, entre ellos la inserci¨®n socio-laboral de personas que en su d¨ªa no pudieron adquirir la formaci¨®n acad¨¦mica necesaria para acceder al mercado laboral", explica la directora general de Formaci¨®n Profesional (FP), Mar¨ªa Jos¨¦ V¨¢zquez.
Precisamente, una de las principales novedades que Educaci¨®n prev¨¦ generalizar a partir del pr¨®ximo curso 2006-2007 es convertir los centros de formaci¨®n permanente de adultos en trampolines hacia las escuelas taller y dem¨¢s iniciativas laborales bajo tutela de la Consejer¨ªa de Empleo y hacia la propia Formaci¨®n Profesional Ocupacional. Para ello, seg¨²n explica la directora general de FP, los alumnos recibir¨ªan la formaci¨®n te¨®rica en los centros de adultos, paso previo a la realizaci¨®n de cursos pr¨¢cticos en las escuelas taller o en los centros de FPO.
"Todo estar¨¢ reglado y controlado a trav¨¦s de comit¨¦s mixtos formados por los equipos directivos de los centros de adultos y los de los centros de recepci¨®n, quienes celebrar¨ªan reuniones peri¨®dicas para delimitar los planes de estudio y evaluar los resultados", explica V¨¢zquez, quien resalta otro factor imprescindible para asegurar la eficacia y calidad de este plan: "Ser¨¢n los propios alumnos los que hagan una memoria anual al final del curso para evaluar los programas en los que han participado y corregir sus posibles deficiencias".
Atenci¨®n a inmigrantes
Otra de las novedades que incluye el nuevo plan de formaci¨®n de adultos es el reforzamiento de la atenci¨®n al alumnado inmigrante. A este colectivo va dirigido un programa intercultural que facilite su adaptaci¨®n en su nueva realidad. ?ste incluye, adem¨¢s de las clases de alfabetizaci¨®n en castellano, cursos de cultura y costumbres espa?olas. Este programa contar¨¢ en pr¨®ximos cursos con nuevos materiales did¨¢cticos m¨¢s acordes con sus necesidades, seg¨²n afirma la directora general de FP. "Los materiales que se emplean actualmente han quedado casi obsoletos, por eso estamos trabajando con un grupo de especialistas para elaborarlos de nuevo", indica V¨¢zquez.
Junto a la alfabetizaci¨®n de los inmigrantes, la formaci¨®n permanente de adultos pretende impulsar el aprendizaje del ingl¨¦s entre sus alumnos, al considerarlo un requisito ya casi imprescindible para acceder al mercado laboral, como el t¨ªtulo de Graduado Escolar. "No se trata de formar a especialistas, pero s¨ª proporcionarles los conocimientos b¨¢sicos del idioma para que puedan desenvolverse y que les permitan continuar con una formaci¨®n m¨¢s exhaustiva si as¨ª lo desean", se?ala V¨¢zquez, quien tambi¨¦n resalta el reforzamiento de otras ense?anzas como la protecci¨®n medioambiental y la prevenci¨®n de riesgos laborales.
Durante el curso 2004-2005, 84.164 personas cursan estudios en algunos de los 659 centros de adultos que hay en Andaluc¨ªa. Las mujeres son las usuarias principales de estos centros, concretamente 66.654, lo que representa un 79% del total de alumnos frente a 17.510 hombres, es decir, un 21%. Del total, 7.491 alumnos son de origen extranjero.
Esta acusada diferencia entre sexos es algo que pretende corregir Educaci¨®n mediante una serie de campa?as de promoci¨®n de la educaci¨®n permanente dirigidas a los varones y que sirvan para echar por tierra los t¨®picos que han acompa?ado a estos estudios. "Hay que desterrar la idea de que esto es s¨®lo para que se reunan las mujeres o que aqu¨ª s¨®lo acude gente que fue incapaz de aprobar los estudios en su d¨ªa. Es una magn¨ªfica oportunidad para retomar la formaci¨®n y lograr la plena inserci¨®n en el mercado laboral", concluye V¨¢zquez.
El primer TIC para mayores
El Centro de Adultos El Torcal de M¨¢laga es un ejemplo de la optimizaci¨®n de recursos que persigue Educaci¨®n. Durante el d¨ªa, sus aulas acogen a alumnos de Infantil y de Primaria, escolares que luego ceden sus pupitres a los adultos. "Como ciudadano y contribuyente entiendo que hay que aprovechar al m¨¢ximo todos los recursos p¨²blicos", explica Ram¨®n Roa, director del Centro de Adultos El Torcal. Roa, junto a su compa?ero Francisco Garc¨ªa Vicario, coordina desde hace dos a?os la formaci¨®n de 329 adultos. De ellos, tan s¨®lo una escasa treintena son hombres. Adem¨¢s de la formaci¨®n tradicional -alfabetizaci¨®n, neo-lectura y preparaci¨®n para el Graduado Escolar-, El Torcal se va a convertir el pr¨®ximo curso en el primer Centro de Adultos TIC (Tecnolog¨ªa de la Informaci¨®n y la Comunicaci¨®n) de Andaluc¨ªa. Educaci¨®n ya le ha dado el visto bueno a su proyecto educativo y el pr¨®ximo curso habr¨¢ un ordenador por cada dos alumnos.
Roa asegura que las nuevas tecnolog¨ªas har¨¢n m¨¢s llevadero el aprendizaje para los alumnos, al tiempo que se formar¨¢n en un cap¨ªtulo que para muchos ser¨¢ imprescindible a la hora de buscar trabajo. "No se trata de formar a especialistas en Inform¨¢tica, sino de que obtengan los conocimientos m¨ªnimos para que puedan acceder libremente a la mayor fuente de informaci¨®n que existe hoy en d¨ªa", explica el director. Un ejemplo de esta libertad tecnol¨®gica adquirida son "sus ni?as", un grupo de mujeres que rondan los 60 a?os y que ya han usado el ordenador en clase. Al tiempo que se han ido soltando en la escritura y en la lectura han aprendido a moverse con cierta soltura en los vericuetos de la red. Mar¨ªa, Mari Carmen, Margarita, Ana y Juanita, la mayor del grupo a sus 78 a?os, aseguran estar muy satisfechas de poder utilizar el ordenador. "Al principio les cost¨® hacerse, por ejemplo, con el manejo del rat¨®n, pero ya son capaces de buscar e intercambiar informaci¨®n sin ayuda a trav¨¦s de las cuentas de correo que les abr¨ª. Incluso m¨¢s de una va a los ciber-caf¨¦s del barrio para consultar su correo o para contactar entre ellas", cuenta satisfecho Roa.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.