Ibarretxe acusa al PP y al PSE de no tener proyecto y de no creer en Euskadi

El debate entre los cuatro candidatos a lehendakari, emitido anoche por la televisi¨®n p¨²blica vasca (ETB), no depar¨® sorpresas. Juan Jos¨¦ Ibarretxe volvi¨® a presentar a socialistas y populares como un viaje hacia el pasado y sin proyecto. Los aspirantes del PNV-EA, PP y EB aprovecharon el flanco abierto por la indefinici¨®n del socialista Patxi L¨®pez sobre los posibles pactos poselectorales. Mar¨ªa San Gil, del PP, acus¨® al candidato de la coalici¨®n nacionalista "haber pactado con ETA" y L¨®pez le reproch¨® haber abandonado a las v¨ªctimas del terrorismo. Javier Madrazo (EB) invit¨® al PSE a unirse al tripartito.

No fue un debate a tres, pero lo pareci¨®. Los candidatos se hicieron preguntas directas e incisivas, b¨¢sicamente en la misma direcci¨®n: los aspirantes del PP y del PSE hacia el candidato a la reelecci¨®n, Juan Jos¨¦ Ibarretxe.

La rigidez del debate afect¨® a la forma, pero no al contenido. Los bloques dedicados al plan Ibarretxe, el derecho a decidir de los vascos y el referido a la pacificaci¨®n y el terrorismo de ETA elevaron la temperatura del plat¨® donostiarra de ETB, en Miram¨®n. En cambio, los dedicados a la cultura o la econom¨ªa fueron una retah¨ªla de cifras deslavazadas que unos se lanzaban a otros, aclarando m¨¢s bien poco al espectador, o de lugares comunes habituales en el discurso pol¨ªtico vasco.

La r¨ªgida realizaci¨®n pactada entre los partidos fue a la postre excesiva y forzada. De hecho, en buena parte de las intervenciones, tanto San Gil como L¨®pez aparec¨ªan en la imagen casi todo el tiempo de perfil. Madrazo, por el contrario, casi siempre se dirig¨ªa al moderador del debate, el jefe de informativos de ETB, Jaime Otamendi, explicando sus propuestas y entrando en el cuerpo a cuerpo con el resto de candidatos en contad¨ªsimas ocasiones.

Una de ellas fue para espetar a Patxi L¨®pez, en el bloque dedicado al futuro Gobierno y los posibles pactos, su indefinici¨®n a la hora de aclarar con qui¨¦n quer¨ªa cerrar acuerdos tras el 17-A. Fue el carro cr¨ªtico al que se sumaron todos. Mar¨ªa San Gil no ocult¨® su desilusi¨®n por las frases gen¨¦ricas y huidizas de L¨®pez en este asunto. Algo que de alguna manera ella atribuy¨® al "complejo" de L¨®pez por no ser nacionalista. "Yo no tengo complejo de no ser nacionalista (...) y ya es hora de que venga una mujer a solucionar este gallinero y el embrollo en el que usted, lehendakari, nos ha metido". Madrazo aprovech¨® el flanco d¨¦bil de su adversario socialista para decirle que gobernar con el PP "es leg¨ªtimo, lo que no es leg¨ªtimo es no decir a la gente qu¨¦ es lo que se quiere hacer con sus votos" el 18-A. Y apost¨® por un Gobierno plural y transversal PNV-EA-EB al que se permiti¨® invitar a sumarse a Patxi L¨®pez. Ibarretxe, empleando un lenguaje sencillo que no abandon¨® en ning¨²n momento, plante¨® el tripartito "para avanzar", frente a la entente PP-PSE, una "vuelta al pasado, para retroceder" y "sin proyecto para este pa¨ªs". "El problema es que ustedes no creen en este pa¨ªs y para dirigirlo hay que creer en ¨¦l", argument¨®. Ibarretxe tambi¨¦n mordi¨® el polvo a manos de los candidatos socialista y popular en relaci¨®n con las v¨ªctimas del terrorismo y sus supuestos pactos con ETA. San Gil se hizo fuerte mostrando al candidato de la coalici¨®n nacionalista los sellos del PNV junto a los de ETA en el Pacto de Lizarra. "?Le suena, se?or Ibarretxe?", dijo en un tono retador. "Aqu¨ª empez¨® todo, en sus pactos con los terroristas que finalmente aprobaron el plan Ibarretxe en la C¨¢mara vasca". Y le acus¨® de haber "abandonado" a las v¨ªctimas y de pactar con los "verdugos", pasando a la historia como el presidente que tiene "a toda la oposici¨®n escoltada". Por su parte, L¨®pez, que llevaba el pin de una ikurri?a en la chaqueta, tuvo un golpe de efecto cuando, sin agotar su tiempo, le pidi¨® a Ibarretxe: "?Puede usted mirar a la c¨¢mara, decir que ha sido el lehendakari de las v¨ªctimas, de los amenazados, de los que no son nacionalistas en este pa¨ªs?"

Mientras, Madrazo desgranaba en cada bloque los frutos de su acci¨®n de gobierno al frente de la Consejer¨ªa de Vivienda y Asuntos Sociales, sin dejarse enredar en lo que en alg¨²n momento el candidato Ibarretxe denomin¨® "insultos" y "descalificaciones" de los representantes del PP y de PSE por ligar nacionalismo democr¨¢tico y terrorismo.

San Gil utiliz¨® un lenguaje directo; Ibarretxe, sencillo; L¨®pez, sin fisuras y Madrazo, persuasivo. Aunque, como reconoci¨® el propio Ibarretxe, hubo hueco, aunque poco, para el aburrimiento.