La diputada paral¨ªmpica
Teresa Perales, de 29 a?os, se mueve desde los 19 en silla de ruedas. Eso no le impide desplegar una admirable actividad y optimismo, y triunfar en lo que se propone. Es diputada en las Cortes de Arag¨®n y campeona paral¨ªmpica de nataci¨®n, con 11 medallas.
Teresa Perales es una mujer fant¨¢stica. Hay que dar datos para demostrar esa afirmaci¨®n en una revista, pero nada como compartir el tiempo con ella para llegar a esa conclusi¨®n. Es campeona paral¨ªmpica de nataci¨®n (cinco medallas en Sidney, seis en Atenas el pasado verano) y diputada del Partido Aragon¨¦s (PAR) en las Cortes de Arag¨®n; pero lo mejor de ella es su actitud solidaria y optimista, desplegada en una extraordinaria vitalidad, que incluso hace olvidar que Teresa, zaragozana de 29 a?os, se mueve en una silla de ruedas desde hace 10. Es la peculiar interpretaci¨®n de la tozudez ma?a: "Basta que me digan que no puedo hacer algo para que me empe?e en hacerlo y no se me ponga nada por delante".
01 Pol¨ªtica
Diputada en las Cortes de Arag¨®n
Teresa Perales suele entrar en el palacio de la Aljafer¨ªa, reformado para acoger en parte el Parlamento aut¨®nomo, a las diez de la ma?ana. Desde 2003, ella es uno de los 67 diputados de la C¨¢mara aragonesa; uno de los ocho con que cuenta el Partido Aragon¨¦s (PAR) -la n¨²mero dos en la lista electoral-. El PAR forma parte del Gobierno aut¨®nomo, por acuerdo con el PSOE, y se hace cargo de cuatro consejer¨ªas. La agenda parlamentaria de Teresa est¨¢ bien llena: aparte de presidir la Comisi¨®n de Asuntos Sociales, es secretaria en la de Educaci¨®n, Cultura y Deporte, y portavoz de su partido en las comisiones de Sanidad y Consumo y de Derechos Humanos. Teresa habla bien, sabe expresar las ideas de forma clara y concisa, no duda ni se atasca; confiesa que en los primeros m¨ªtines lo pas¨® mal, que se lo llevaba todo escrito, aunque ella prefiere "hablar de coraz¨®n". "He procurado no encasillarme s¨®lo en un tema. Represento al colectivo de discapacitados, entiendo bien sus necesidades porque yo lo soy, pero tambi¨¦n soy mujer, soy joven, soy trabajadora".
Y es aragonesa, muy aragonesa, aunque la familia de su padre y la de su madre proceden de un peque?o pueblo de C¨¢ceres, Acebo. "El PAR naci¨® en 1977 para defender Arag¨®n, porque suelen olvidarse de nosotros. Somos nacionalistas, pero moderados, muy moderados. Queremos que se cumpla plenamente el estatuto de autonom¨ªa. Trabajamos siempre pensando y defendiendo Arag¨®n, pero dentro de Espa?a, jam¨¢s deshaciendo Espa?a". "Somos de centro, tenemos cosas de la izquierda y cosas de la derecha, como nuestra postura en econom¨ªa y educaci¨®n, por ejemplo, de compatibilizar lo p¨²blico y lo privado, de aprovechar lo bueno de cada sector y fomentar un trabajo conjunto. En lo social, me gustar¨ªa tener para Espa?a un modelo tipo n¨®rdico". "Estuvimos en contra del trasvase del Ebro, una obra totalmente irracional; reclamamos la deuda que el Gobierno central tiene con nosotros por las transferencias en Sanidad; pedimos inversiones en infraestructuras y somos grandes defensores de la familia y del medio rural. El despoblamiento del campo nos preocupa mucho; en Arag¨®n lo vivimos de forma especial, porque la ciudad de Zaragoza acapara, ella sola, en torno al 60% de la poblaci¨®n de toda la comunidad aut¨®noma; frente a zonas como la provincia de Teruel, que me encanta, con lugares realmente impresionantes, pero con poco m¨¢s de 40.000 habitantes".
De sus iniciativas parlamentarias se siente especialmente orgullosa con dos: la proposici¨®n no de ley que insta al Gobierno de Arag¨®n para que se dirija al Gobierno central para proteger y promocionar la lengua de signos, y su implicaci¨®n en la ponencia Paz para el Pueblo Saharaui: "En marzo de 2004 fuimos al S¨¢hara, al Muro de la Verg¨¹enza, un muro de 2.000 kil¨®metros que divide el S¨¢hara, que mucha gente no sabe ni que existe. Estuvimos cuatro d¨ªas dando nuestra solidaridad al pueblo saharaui, y ha sido una de las experiencias que m¨¢s me han llenado en mi vida. No s¨¦ por qu¨¦. Sent¨ª algo especial, por c¨®mo nos acogi¨® esta gente, que no tiene nada y te da todo; me identificaba de una forma especial con ellos. Es una causa con la que me siento muy implicada. Hace justo mi edad, 29 a?os, que los espa?oles nos marchamos de all¨ª y les dejamos a su suerte".
"Teresa aporta vitalidad al partido, y nos lo contagia", se?ala su jefe, Javier Allu¨¦, uno de los vicepresidentes del PAR y portavoz parlamentario de este partido. "Ella es una estrella en Zaragoza, y la convergencia entre su forma de pensar y el programa del partido nos ha venido muy bien a todos. Adem¨¢s es un ejemplo de c¨®mo organizar el tiempo".
02 Ciudadana
Con Mariano, su marido, periodista, y con 'Golfo', su perro
La jornada habitual de Teresa comienza a las cinco y media de la ma?ana. Varias horas de entrenamiento en la piscina. A las diez, Parlamento. Luego, a casa para comer con su marido reci¨¦n estrenado, Mariano. Luego, tarde de preparativos de su actividad parlamentaria, plenos, reuniones con colectivos, asistencia a actos sociales? Entre trabajo y entrenamientos, poco tiempo para descansar. Una de sus actividades favoritas en ese poco tiempo libre es pasear con Golfo, su precioso perro golden retriever.
Teresa se qued¨® parapl¨¦jica con 19 a?os por una enfermedad del sistema nervioso. Un episodio del que no quiere hablar, por su af¨¢n de normalizar. "Es que, de verdad, para m¨ª esta silla de ruedas no supone nada, no es algo significativo, no me ha impedido hacer lo que he querido. A la vida hay que echarle inventiva y ganas, no tener barreras en la cabeza. Yo creo que las principales barreras son las que uno se monta en su cabeza. Aquella enfermedad no ha sido lo peor que me ha pasado; lo peor fue la muerte de mi padre cuando ten¨ªa 15 a?os. Me afect¨® mucho. Es que estaba muy enchochada con ¨¦l. Muri¨® de leucemia, en 11 meses. Fue algo muy traum¨¢tico. Mi padre era un trabajador de ultracongelados, tambi¨¦n se levantaba a las cinco de la ma?ana, pero no para entrenar, sino para cargar y descargar, y para que a nosotros, a mi hermano (David, de 21 a?os) a mi madre y a m¨ª, no nos faltara de nada. De mi padre aprend¨ª el valor por encima de todo de la familia; de mi madre, la voluntad de superaci¨®n. Son dos valores muy s¨®lidos que me han transmitido".
Teresa Perales estudi¨® ciencias de la educaci¨®n, pero lo dej¨® en tercero porque la aburr¨ªa, y luego complet¨® fisioterapia, "me apasion¨®". Trabaj¨® dos a?os en el Archivo del Servicio de Protecci¨®n de Menores del Gobierno de Arag¨®n, hasta que decidi¨® implicarse en pol¨ªtica.
El pasado enero se cas¨® en la Pilarica con Mariano Menor, editor y presentador del informativo de la noche de la televisi¨®n regional privada Antena Arag¨®n -¨¦l antes era periodista deportivo y as¨ª se conocieron, haciendo entrevistas-, y marcharon de viaje de novios quince d¨ªas a Los ?ngeles y San Francisco. "Me encanta ir a Estados Unidos, pero no porque me guste c¨®mo piensan ni nada de eso, sino por lo bien que est¨¢ preparado todo para las personas con discapacidad, para llevar una vida cotidiana absolutamente normal; puedes entrar en el servicio de cualquier local, acceder a cualquier tienda, por chiquita que sea; subir a cualquier autob¨²s. Lo tienen muy asumido, y es muy c¨®moda la vida cotidiana all¨ª".
Teresa tiene clavadas dos espinitas en Zaragoza: no poder ir de tiendas con normalidad, a la panader¨ªa o a la tienda de ultramarinos del barrio, con lo que a ella le gusta el peque?o comercio -"cuando empec¨¦ a usar la silla de ruedas, de repente no pod¨ªa entrar en las tienditas que tanto me gustaban; s¨®lo el frutero adapt¨® la entrada para facilitarme el acceso"-, y la a¨²n escasa adaptaci¨®n del transporte p¨²blico en Zaragoza para la gente con problemas de movilidad.
Pero a Teresa no se le pone nada por delante; buena es ella? Le hac¨ªa ilusi¨®n comprarse un Chrysler PT Cruiser, y lo tiene y se mueve con ¨¦l por Zaragoza con una destreza admirable. Uno no puede evitar asombrarse cuando escucha el plan de Teresa para las pr¨®ximas dos horas: "Cogemos el coche, vamos a casa, sacamos a pasear a Golfo, vamos todos a Dog Garden, en Movera, un pueblo de aqu¨ª al lado, es la guarder¨ªa y escuela canina donde educaron a Golfo; volvemos, dejamos a Golfo en casa, luego vamos a casa de mi madre a por la mochila, y luego vamos a la piscina". Para hacer todo esto hay que cruzar Zaragoza de punta a punta un par de veces, y es una ciudad de tama?o respetable. Confesi¨®n: fot¨®grafo y periodista parecen sentir m¨¢s pereza que ella.
Pues nada, dicho y hecho: en un pis pas, Teresa pasa de la silla de ruedas al asiento del coche, desmonta las ruedas y dobla la silla, lo coloca todo en el asiento de atr¨¢s, conduce y aparca, en un pis pas monta la silla y pasa a ella, y en otro pis pas sube a casa, baja con Golfo, damos una vuelta con ¨¦l, lo sube al coche, coloca al periodista y al fot¨®grafo, se sube ella de nuevo y nos vamos al Dog Garden, a varios kil¨®metros de la capital. Y todo sin perder la sonrisa? S¨ª, es una expresi¨®n tan manida -"todo sin perder la sonrisa"- que a veces da apuro ponerla, pero en el caso de Teresa hay que escribirla. No hay m¨¢s remedio.
Es guapa Teresa Perales. Cuanto m¨¢s la conoces y est¨¢s con ella, m¨¢s guapa es.
Reunidos en torno a una chimenea -¨²ltimos d¨ªas del invierno y a¨²n hace fr¨ªo-, Marigel y Jes¨²s, propietarios de Dog Garden, hablan con Teresa y recuerdan los tres meses que estuvieron asistiendo ella y el perro a la escuela, tres d¨ªas por semana, dos horas cada d¨ªa. Teresa acaricia a Golfo con ternura. Y Golfo, que une al buen car¨¢cter de los golden retriever su educaci¨®n para portarse a¨²n mejor -no tirar de la correa, andar al ritmo de la silla de ruedas-, la mira con devoci¨®n.
03 Deportista
Campeona paral¨ªmpica de nataci¨®n
A Teresa se la ve feliz en su esca?o en las Cortes, se la ve disfrutando enormemente con Golfo, pero hay un ambiente en el que su cara se ilumina, despide una satisfacci¨®n especial: en la piscina, cuando nada. Teresa entrena ahora en un colegio privado, el Liceo Europa. Se cambia en cinco minutos y, cuando se echa al agua, se convierte realmente en esa sirena que la vida ha querido que sea. Con el gorro azul de ba?o enmarcando sus facciones, su sonrisa resulta a¨²n m¨¢s grande.
Tras las vacaciones de unos meses que se dio despu¨¦s de los Juegos de Atenas, Teresa ha retomado su rutina: entrena todos los d¨ªas, todos los meses. Su pr¨®ximo desaf¨ªo: la Copa del Mundo en Manchester (Reino Unido), entre el 12 y el 15 de mayo.
De camino a la piscina nos ha ido explicando c¨®mo no le gusta nada la palabra integrar, que prefiere normalizar; es lo que lleva intentando hacer diez a?os; por eso la desagrada sobremanera alguna entrevista en plan paternalista que le han hecho en televisi¨®n. Y cuenta an¨¦cdotas e historias de los Juegos Paral¨ªmpicos: que comenzaron a organizarse en Roma en 1960, adonde acudieron 400 deportistas; pero que fue en Se¨²l, en 1988, cuando ya alcanzaron aut¨¦ntico relieve, con 3.000 deportistas. Habla de la cantidad de amputados japoneses que hay porque, de ni?os, jugando, se cuelgan de los cables de alta tensi¨®n, que all¨ª discurren a escasa altura; de lo fuertes que vienen los chinos, tambi¨¦n en esta modalidad, y de c¨®mo, en estas especialidades deportivas, la edad de competici¨®n se alarga -"una de mis principales rivales, la francesa Beatrice Hess, se ha retirado con 48 a?os".
Comenta lo bien que estuvieron organizados los Juegos Paral¨ªmpicos en Sidney -"all¨ª, a todos los deportistas, todos, nos trataban como estrellas"- y lo mal que lo estuvieron en Atenas; trata el tema del dopaje, que tambi¨¦n existe aqu¨ª: "En Sidney hubo 11 casos de dopaje entre 4.000 deportistas nuestros; m¨¢s del doble que en los Juegos Ol¨ªmpicos, porque tambi¨¦n hubo 11 casos, pero los deportistas eran unos 11.000".
Y sigue, cuenta las cosas sin dramatismos: "La nataci¨®n es uno de los deportes en que m¨¢s espectro de discapacidades ves. Eso s¨ª que es el deporte en esencia pura. Gente incapaz de llevarse un vaso de agua a la boca, pero que atraviesa una piscina ol¨ªmpica; gente amputada de las cuatro extremidades, pero que nada con ligeros movimientos de hombros e ingles". "No, yo no me veo nadando con 40 a?os; tampoco s¨¦ si estar¨¦ dedicada de pleno a la pol¨ªtica, veo que es algo en lo que hay que volcarse totalmente, que todo lo que des es poco. En el futuro me gustar¨ªa dedicarme a alg¨²n proyecto solidario, algo relacionado con el deporte y con la normalizaci¨®n, estoy d¨¢ndole vueltas, a¨²n no lo tengo definido, pero es ahora mi principal ilusi¨®n".
Y subraya reivindicaciones: "Esto que salga grande y en may¨²sculas: los deportistas paral¨ªmpicos no tenemos ayudas. Le he pedido al secretario de Estado para el Deporte, Jaime Lissavetzky, un Plan de Ayuda para el Deporte Paral¨ªmpico, algo similar al Plan ADO (Asociaci¨®n de Deportes Ol¨ªmpicos). Competir es caro, y nuestro gran problema es que no nos podemos nutrir, como los otros deportistas, de los patrocinadores privados; yo he tenido el patrocinio de Ibercaja alg¨²n tiempo, pero no es lo normal, nos han llegado a decir que no nos pueden patrocinar porque ellos tienen que vender una imagen, y nosotros no damos imagen de gente sana; y te lo dicen as¨ª, literalmente. Necesitamos un plan de becas, y sobre todo pensando en quienes quedan los cuartos y quintos, no obtienen medalla, pero son la inversi¨®n m¨¢s segura para ganarla en convocatorias posteriores". "Si no se hace algo, vamos mal, porque hemos estado viviendo todav¨ªa del dinero de los Juegos de Barcelona, pero en el ranking paral¨ªmpico por pa¨ªses, Espa?a qued¨® cuarta en Sidney, y en Atenas ya bajamos al s¨¦ptimo puesto".
Teresa siempre fue una chica deportista; practicaba desde k¨¢rate hasta equitaci¨®n, pero nunca a nivel de alta competici¨®n. A ra¨ªz de la enfermedad se aficion¨® a la nataci¨®n, y ha llegado bien arriba. Once medallas paral¨ªmpicas: una de plata y cuatro de bronce en Sidney, y dos de oro (en 50 mariposa y 100 libres), una de plata (relevos 4¡Á50 estilos, confiesa que es la que m¨¢s alegr¨ªa le dio) y tres de bronce (50 espalda, 50 libres y 100 braza) en Atenas; fue la deportista espa?ola que m¨¢s medallas logr¨® en la ¨²ltima cita ol¨ªmpica. Respecto a la candidatura de Madrid para 2012, Teresa s¨®lo dice: "Conf¨ªo en la promesa que ha hecho Gallard¨®n (el alcalde de Madrid) de que la villa ol¨ªmpica ser¨¢ totalmente accesible".
"Yo creo que mi car¨¢cter siempre fue positivo y optimista, pero es verdad que con el tiempo lo he ido madurando y definiendo; creo que es normal, y sobre todo lo he ido moldeando en un sentido solidario, en no ser ego¨ªsta. En deporte es verdad que representas a un pa¨ªs, a una comunidad, a una ciudad, pero sobre todo quien gana eres t¨², una victoria alimenta tu estima personal, tu carrera; pero al entrar en pol¨ªtica, por quien luchas no es por ti, vas m¨¢s all¨¢, representas a la sociedad, buscas mejorar la vida de la gente".
Su entrenador desde hace tres a?os, ?ngel Santamar¨ªa, habla como hablan los entrenadores, pero a?adiendo un cari?o especial: "Teresa Perales es excepcional y todav¨ªa le queda mucho por dar. No est¨¢ al 100%. A¨²n le falta un 25% de mejora. Ojal¨¢ tuviera m¨¢s tiempo para entrenar. Teresa Perales no ha dado a¨²n lo mejor de s¨ª". "Sus principales valores: la constancia y la simpat¨ªa. S¨®lo hay que mirarla a la cara; es positivo todo lo que transmite. En lo que se proponga, Teresa Perales llegar¨¢ a ser la n¨²mero uno".
Al despedirnos, uno no quiere ser ni paternalista, ni cursi, ni redicho ni demasiado redondo, pero tampoco fr¨ªo. Dejamos a Teresa en la piscina, super¨¢ndose a s¨ª misma, sin barreras en la cabeza, a¨²n m¨¢s feliz nadando. Sonr¨ªe: "Hay que generar optimismo, superar los contratiempos, porque, si no, caes en una espiral que te va hundiendo y hundiendo. Uno es responsable de crear su propia espiral de optimismo, entrar en ella y mantenerse siempre a flote".
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