El 'boom' demogr¨¢fico obligar¨¢ a duplicar la producci¨®n de alimentos, seg¨²n Norman Borlaug

El enorme crecimiento demogr¨¢fico que los pa¨ªses en v¨ªas de desarrollo experimentar¨¢n en los pr¨®ximos 50 a?os obligar¨¢ a multiplicar por dos la producci¨®n y distribuci¨®n de alimentos. El Nobel de la Paz de 1970, el estadounidense Norman Borlaug, hizo esta advertencia ayer en una conferencia en la Universidad de Granada, que hoy le otorgar¨¢ el doctorado honoris causa. La lucha contra las plagas a trav¨¦s de la biotecnolog¨ªa y la construcci¨®n de infraestructuras de transporte son los principales retos que la humanidad deber¨¢ abordar si quiere erradicar el hambre en el siglo XXI.

Ha pasado la barrera de los 90 a?os y se mantiene tan l¨²cido como para hablar durante una hora sobre algunos de los principales problemas que asolan a la humanidad. Norman Ernest Borlaug, premio Nobel de la Paz en 1970, ofreci¨® ayer a los alumnos y profesores de la Facultad de Ciencias de Granada una conferencia titulada Retos en la agricultura para reducir el hambre y la pobreza en el mundo. En un fluido espa?ol, el estadounidense analiz¨® la repercusi¨®n de diferentes proyectos dedicados a aumentar la producci¨®n de alimentos que han tenido como l¨ªneas b¨¢sicas la formaci¨®n de agricultores en pa¨ªses subdesarrollados.

En 1944, despu¨¦s de lograr su doctorado en fitopatolog¨ªa, Borlaug lleg¨® a M¨¦xico como asociado a un programa de la secretar¨ªa de Agricultura Mexicana y la Fundaci¨®n Rockefeller, que enfocaba sus esfuerzos a las royas (plagas) que destru¨ªan los campos de trigo. El proyecto logr¨® un resultado excelente que culmin¨® con la autosuficiencia en trigo del pa¨ªs y el inicio de la llamada Revoluci¨®n Verde. "Al ver los resultados obtenidos en M¨¦xico percib¨ª que el proyecto se pod¨ªa trasladar a Oriente Pr¨®ximo, el norte de ?frica y la India". En aquel momento redact¨® un informe que dio lugar a un programa de capacitaci¨®n de la FAO, la Fundaci¨®n Rockefeller y el Gobierno de M¨¦xico.

En 1960, j¨®venes cient¨ªficos procedentes de lugares subdesarrollados fueron formados y "regresaron a sus pa¨ªses llevando tecnolog¨ªa para generar un alto rendimiento". El resultado no se hizo esperar. "En India y Pakist¨¢n hab¨ªa una hambruna terrible mientras la producci¨®n de sus campos pod¨ªa multiplicarse por cinco", explic¨® ayer Borlaug. Los datos relativos a la efectividad de sus estudios son escalofriantes. En 1950 se produjeron 650 millones de toneladas de cereales mientras que en 2000 la cantidad lleg¨® a ser de 1900 millones. Si en 2000 se hubieran utilizado las t¨¦cnicas agrarias de 1950 se hubieran tenido que plantar 1.100 millones de hect¨¢reas m¨¢s, con un da?o incalculable a la fauna y la flora del planeta.

Borlaug resalt¨® sin embargo el estado de pobreza que asola a¨²n a gran parte de la humanidad. "Hay que lograr producir lo suficiente pero tambi¨¦n distribuirlo equitativamente. En pa¨ªses como la India he visto que se almacenan toneladas de trigo mientras la poblaci¨®n est¨¢ malnutrida", a?adi¨®. El cient¨ªfico aclar¨® que ante el crecimiento de la poblaci¨®n en 2050 ser¨¢ necesario duplicar el suministro de alimentos, para lo que ya se trabaja en nuevos proyectos.

"En Brasil estamos haciendo importantes ensayos para convertir tierras ¨¢cidas en campos de cultivo". Pero es en el continente africano en el que existen mayores problemas. Los agricultores no usan fertilizantes y sufren la falta de infraestructuras. "No hay carreteras, tampoco caminos. Donde haya un camino podr¨¢ haber despu¨¦s una escuela rural, e incluso un servicio m¨¦dico. Pero no podremos hacer pr¨¢cticamente nada sin ellos". Desde 1986 Borlaug trabaja con 10 pa¨ªses africanos en diferentes experimentos que podr¨ªan triplicar su producci¨®n, pero el problema del transporte es "un obst¨¢culo que ralentiza el progreso".

El cient¨ªfico alerto sobre la aparici¨®n de nuevas plagas, la roya del Tallo y la amarilla, que surgieron en Uganda en 1999. "Hay que afrontar con toda energ¨ªa este problema y evitar que se expanda ya que podr¨ªa ser una cat¨¢strofe", concluy¨®.