Casillas y Ronaldo se disputan el trono

Casillas y Ronaldo mantuvieron un duelo en el Ciutat de Val¨¨ncia. A la formidable parada de uno respond¨ªa el otro con una fulgurante carrera hacia la otra porter¨ªa. Se disputaron el trono. Dominaron las dos ¨¢reas, sin necesidad de dominar todo lo dem¨¢s. Entre ambos resolvieron un partido en el que el Madrid jug¨® poco, sin apenas intensidad, pero con la vida f¨¢cil que le proporcionaron sus dos fen¨®menos. Nada nuevo bajo el sol por lo que respecta a Casillas, instalado en la excelencia toda la temporada. La impresi¨®n la dio Ronaldo, que acab¨® el choque dejando rivales en el suelo con su arrancada de b¨²falo y sus quiebros en seco. Provocando suspiros de admiraci¨®n en la grada. Por la cura de adelgazamiento o por lo que sea, el brasile?o exhibi¨® una exuberancia f¨ªsica que record¨® al de antes de las lesiones. Alcanz¨® los 15 goles y tumb¨® al aseado Levante, que acus¨® una vez m¨¢s su habitual falta de pegada. Tan bonito como tierno y est¨¦ril, el conjunto de Schuster se fue de vac¨ªo pese a contar con un gran Rivera, el mejor entre una n¨®mina de c¨¦lebres centrocampistas.

El Madrid, eso s¨ª, tuvo el olfato de descubrir el tal¨®n de Aquiles de su rival: el lateral izquierdo irland¨¦s Harte, que ni sub¨ªa ni bajaba sino todo lo contrario. Por ah¨ª sali¨® disparado Beckham para practicar sus centros en comba. Por ah¨ª se dej¨® caer Owen en busca de aire. Y por ah¨ª entr¨® Salgado, cambi¨® de ritmo, super¨® al larguirucho Camacho y su disparo pifiado a gol se convirti¨® en un pase perfecto para Ronaldo, en el lugar adecuado en el momento justo. Como siempre. As¨ª es Ronaldo. Hasta ese instante (m. 37), el as brasile?o hab¨ªa transmitido esas sensaciones de estar m¨¢s fuera que dentro del partido. De tener un inter¨¦s relativo en el encuentro. Sin embargo, a la primera que dispuso, dentro. De un simple toque. Y lo celebr¨® corriendo hacia el banquillo de su equipo para abrazar a los suplentes, primero C¨¦sar y despu¨¦s Solari. Solidaridad con los marginados.

El gol invirti¨® lo que hab¨ªa sucedido en tres cuartas partes del campo: la superioridad del Levante, que domin¨® en las zonas blandas. Ah¨ª el partido lo gobern¨® Rivera, que tuvo una gran presencia, tanto en la recuperaci¨®n como en la creaci¨®n. El capit¨¢n granota activ¨® una fluida conexi¨®n con Sergio Garc¨ªa, muy inteligente en la media punta. Entre ambos sirvieron balones de oro al err¨¢tico ¨²ltimo eslab¨®n: Manchev. Pero el b¨²lgaro no remat¨® y, cuando lo hizo, se encontr¨® con un Casillas insuperable. Rapid¨ªsimo para reaccionar en las situaciones extremas, que fueron varias. Vol¨® varios metros, por ejemplo, para despejar un disparo de Rivera que cont¨® con todos los elementos a su favor para envenenarse: el rebote en un defensa y el efecto perverso del viento racheado.

La ventaja le dio toda la tranquilidad al Madrid, que jug¨® la segunda parte con las piernas encima de la mesa, sin apenas tensi¨®n. Toc¨® el bal¨®n a su antojo y Zidane, desenfocado toda la tarde, se permiti¨® un lujazo t¨¦cnico en el centro del campo muy aplaudido desde la grada. El Levante hab¨ªa perdido energ¨ªa y se dedic¨® a querer pescar alg¨²n contragolpe. Para eso entr¨® Congo en sustituci¨®n del desafortunado Manchev. Se trataba de aprovechar la potencia del colombiano, su ilimitado entusiasmo, siempre sofocado por Casillas. Para potencia, la de Ronaldo, que le ech¨® una carrera por el extremo izquierdo a Pinillos y al lateral le salieron los colores. Que le pare otro, vino a decir.

A Schuster le quedaba una bala, Ettien, que ven¨ªa de varias semanas de lesi¨®n. Pero fue el central Alexis, en un cabezazo, quien alcanz¨® la l¨ªnea de gol. De all¨ª sac¨® el bal¨®n Roberto Carlos en la primera y ¨²nica vez que Casillas hab¨ªa sido superado. Luxemburgo dio paso a Guti y a Figo para el ¨²ltimo cuarto de hora, lo que debe ser una especie de humillaci¨®n para el portugu¨¦s, aligerada ayer por la oportunidad de lanzar a Ronaldo en lo que ser¨ªa un gol espectacular del brasile?o. Espectacular la arrancada, la carrera en la que le rob¨® 15 metros al pobre Jesule y el recorte que dej¨® en el suelo al meta Mora. Ronaldo sinti¨® que se parec¨ªa al de sus mejores tiempos y prob¨® una rabona fallida poco despu¨¦s de regalarle un gol a Guti, que cruz¨® demasiado su disparo. En el duelo entre ambos, reaccion¨® Casillas con otra intervenci¨®n ante Congo, que entendi¨® que ya pod¨ªa el Levante estar una semana intent¨¢ndolo con id¨¦ntico resultado: el lucimiento del portero del Madrid. Y la r¨¦plica de Ronaldo.