Espa?a oscila entre la "grand¨ªsima alegr¨ªa" del Opus y la decepci¨®n de cat¨®licos de base

La jerarqu¨ªa cat¨®lica reaccion¨® ayer con preocupaci¨®n por la imagen de "autoritario" que importantes medios de comunicaci¨®n han difundido de Benedicto XVI. "Es muy buena gente", su imagen de ortodoxia r¨ªgida desaparecer¨¢ "en muy poco tiempo", dijo el cardenal de Sevilla. El Opus expres¨® su "grand¨ªsima alegr¨ªa" por la elecci¨®n. En cambio, te¨®logos progresistas y el catolicismo de base expresaron su decepci¨®n, no exenta de una cierta "esperanza". Juan Jos¨¦ Tamayo, reprobado por Ratzinger hace dos a?os, espera que el Papa le levante el castigo, y Benjam¨ªn Forcano, con citas textuales por delante, reclam¨® que lleve a cabo las reformas que aconsej¨® en sus libros cuando s¨®lo era un brillant¨ªsimo te¨®logo alem¨¢n.

Los cat¨®licos de base, que la semana pasada publicaron un manifiesto cr¨ªtico sobre el pontificado de Juan Pablo II, est¨¢n decepcionados, pero no descartan "un peque?o milagro". Se unen as¨ª a la tesis del te¨®logo Hans K¨¹ng, compa?ero del nuevo Papa en la Universidad alemana de Tubinga y en el Concilio Vaticano II, adonde los dos acudieron como expertos invitados por Juan XXIII. En concreto, Benjam¨ªn Forcano, uno de los redactores del manifiesto firmado por 15 grupos de base con el t¨ªtulo Recuperemos la credibilidad de la Iglesia [ver EL PA?S, 15-4-2005], esgrimi¨® ayer numerosos textos publicados por el te¨®logo Joseph Ratzinger en los a?os sesenta y setenta del siglo pasado para ilustrar que s¨ª hay un resquicio para esa esperanza si, como parece l¨®gico, Benedicto XVI lleva a cabo las propuestas que defendi¨® cuando era un exitoso te¨®logo universitario.

Por su parte, Juan Jos¨¦ Tamayo, condenado por el Vaticano hace dos a?os tras una larga investigaci¨®n sobre sus libros, llevada a cabo por la Congregaci¨®n para la Doctrina de la Fe, presidida por el nuevo Papa, se mostr¨® confiado en que Benedicto XVI le levante el castigo. "Este nombramiento es seguir en el conflicto porque fui censurado por Joseph Ratzinger. Pero, ahora que es Papa, conf¨ªo en que me levante las sanciones en cuanto asuma el poder. Si no lo hace, pues seguiremos en el debate teol¨®gico. Ni espero novedades ni creo que vaya a haber sorpresas en la nueva etapa", declar¨® a Efe en Ciudad de M¨¦xico, donde participa, junto a un grupo de te¨®logos, fil¨®sofos y escritores, en un debate sobre el futuro de la religi¨®n en un mundo globalizado.

"Las nostalgias"

Desde Roma, donde ha participado en el c¨®nclave, el cardenal de Sevilla, Carlos Amigo, reconoci¨® que en muchos ambientes se tiene una imagen poco amable del ya ex cardenal Ratzinger. "Es muy buena gente, una expresi¨®n que en Andaluc¨ªa comprenden perfectamente. Ya ver¨¢n c¨®mo en muy poco tiempo esa imagen va a desaparecer", replic¨® Amigo, antes de pronosticar que el Papa mirar¨¢ hacia adelante. "Las nostalgias, tanto las de derechas como las de izquierdas, o las mediopensionistas, son para las tardes de invierno y para el ¨¢lbum familiar", brome¨®.

Tambi¨¦n expresaron su decepci¨®n por la imagen de conservador que se est¨¢ dando del nuevo Papa el cardenal Ricard Maria Carles, em¨¦rito de Barcelona, y los arzobispos de Toledo, Antonio Ca?izares, y de Pamplona, Fernando Sebasti¨¢n. Carles pronostic¨® que "a medida que la gente conozca al Papa, se borrar¨¢ la imagen caricaturesca que han querido hacer de ¨¦l".

Otros importantes dirigentes religiosos espa?oles se limitaron a resaltar las virtudes del nuevo pont¨ªfice. "Es un momento de grand¨ªsima alegr¨ªa", declar¨® el prelado del Opus Dei, Javier Echevarr¨ªa. Tambi¨¦n mostr¨® su alegr¨ªa Juli¨¢n Carr¨®n, l¨ªder del movimiento Comuni¨®n y Liberaci¨®n tras el reciente fallecimiento de su fundador, Luigi Giussani. El rector mayor de la Congregaci¨®n Salesiana y noveno sucesor de san Juan Bosco, Pascual Ch¨¢vez, renov¨® su fidelidad al Papa y le mostr¨® "el respeto filial heredado de Don Bosco".