Grandes triunfadores de Cannes vuelven a la 58? edici¨®n del festival
'Lemming', de Dominik Moll, inaugura ma?ana el certamen, que se clausurar¨¢ el d¨ªa 22
El Festival de Cannes 2005 abre sus puertas ma?ana, y dar¨¢ a conocer su palmar¨¦s el pr¨®ximo 22 de mayo. En la selecci¨®n oficial figuran cinco antiguos ganadores de la Palma de Oro, una decena larga de cineastas que ya hab¨ªan sido seleccionados en a?os anteriores, incluye un solo debutante en materia de realizaci¨®n que no es otro que el veterano actor Tommy Lee Jones y presenta por primera vez una obra de un cineasta kurdo que, tal y como acostumbra a suceder en esos casos de "exotismo cinematogr¨¢fico", vive en Par¨ªs.
Cannes 2005 comienza con la proyecci¨®n de Lemming, del franco-alem¨¢n Dominik Moll, una historia de angustia protagonizada por dos Charlottes -Rampling y Gainsbourg- y por Laurent Lucas y Andr¨¦ Dussollier. La idea es simple: reproducir el anterior ¨¦xito obtenido por Moll con Harry, un ami qui vous veut du bien, que fue una de las sorpresas agradables de la edici¨®n 2000, coronada luego con m¨¢s de dos millones de espectadores.
Tambi¨¦n los canadienses David Cronenberg y Atom Egoyan -autores, respectivamente, de A store of violence y Where the truth lies-, los estadounidenses Jim Jarmusch, Woody Allen, Gus van Sant y George Lucas -Broken flowers, Last days, Match point, Star Wars Episode III son las cintas que presentan, las dos ¨²ltimas fuera de competici¨®n-, o los japoneses Mashairo Kobayashi -Bashing- y Seijun Suzuki -Princess Raccoon-, ya hab¨ªan presentado filme en la Croisette, al igual que el alem¨¢n Wim Wenders -Don't come knockin-, el austriaco Michael Haneke -Cach¨¦-, el dan¨¦s Lars von Trier -Manderlay-, los hermanos belgas Jean Pierre y Luc Dardenne -L'enfant-, los chinos Hou Hsiao-hsien -Three times- y Yau Nai Hoi -Election-, y el israel¨ª Amos Gita? -Free zone-, todos habituales de Cannes. Otros, como el chino continental Wang Xiaoshuai -Shanghai dreams-, el mexicano Carlos Reygadas -Batalla en el cielo-, o el birmano Rithy Panh -Les artistas du th¨¦?tre br?l¨¦- hab¨ªan sido invitados antes en otras secciones, de manera que son muy pocos los debutantes.
El cine es un entretenimiento para j¨®venes: la edad media del p¨²blico oscila, seg¨²n los pa¨ªses, entre los 13 y los 17 a?os, es decir, el grueso de la clientela son ni?os y adolescentes. La edad art¨ªstica de los filmes corresponde a la de los clientes y es as¨ª como estos ¨²ltimos tiempos hemos asistido a la reivindicaci¨®n del cine kung-fu, a la proliferaci¨®n de adaptaciones de c¨®mics y a la traslaci¨®n a la pantalla de buen n¨²mero de obras fundadas en series creadas de nueva planta y que trascurren en mundos imaginarios y de orden social aristocr¨¢tico, ya sea ese mundo pasado o perteneciente a un futuro remoto. Cannes 2005 se interesa por una de ellas, la de George Lucas.
El atractivo de una presencia en Cannes, que algunas publicaciones profesionales estadounidenses han puesto en duda, no ha salido reforzado del palmar¨¦s de los ¨²ltimos a?os. En 1997 toc¨® fondo al premiar La anguila, de Shoei Imamura. La cinta era sin duda excelente, pero se estren¨® comercialmente en muy pocos pa¨ªses y no obtuvo ning¨²n ¨¦xito popular. La Palma de Oro de Cannes se revelaba, pues, como un galard¨®n sin atractivo comercial y que se desvalorizaba a ojos vista. En 2003, Elephant, de Gus van Sant, ratific¨® esa dificultad para traducir en entradas vendidas la distinci¨®n obtenida del jurado de Cannes. Y en 2004, al elegir como ganador el documental militante Fahrenheit 9/11, de Michael Moore, se acus¨® al festival de prestarse a la instrumentalizaci¨®n pol¨ªtica.
La selecci¨®n 2005 -que se completa con The three burials of Melqu¨ªades Estrada, de Lee Jones; Kilom¨¨tre zero, del franco-kurdo Hiner Saleem; Quando sei nato non puoi piu'nasconderti, del italiano Marco Tullio Giordana; Sin city, de Robert Rodr¨ªguez y Frank Millar; Chromophobia, de la brit¨¢nica Martha Fiennes, que protagonizar¨¢ la clausura, y con la francesa Peindre ou faire l'amour , una disyuntiva planteada por los hermanos Larrieu- apuesta, pues, por una mayor¨ªa de autores consagrados.
En busca de la sorpresa
Las sesiones especiales enriquecen la oferta y permiten abrir la puerta tanto a comedias par¨®dicas, como Kiss, kiss, bang, bang, como a documentales-ensayo que llegan precedidos de gran fama: The power of nightmares,
de Adam Curtis. En las otras secciones, al margen de la ¨²nica presencia espa?ola -Benito Zambrano al frente de la coproducci¨®n Habana blues-, figuran obras prometedoras, ya sea por su rareza -Le filmeur, de Alain Cavalier, que debiera prolongar su experiencia de autor de diarios personales filmados-, ya sea por la garant¨ªa de solvencia profesional que aportan nombres como Fran?ois Ozon -Le temps qui reste- o James Marsh -The king-. En Un certain regard
hay lugar para producciones que llegan de Marruecos, Brasil, Austria, Jap¨®n, M¨¦xico, Hungr¨ªa, Argentina, Rumania, Sri Lanka, Dinamarca o Ir¨¢n.
En la llamada Quinzaine des R¨¦alisateurs, el novelista y guionista Emmanuel Carr¨¨re presenta Le moustache, su primera realizaci¨®n, mientras que el bressoniano b¨¢ltico Sharunas Bartas y su Siete hombres invisibles encuentra el refugio que ahora le niega la, para este cineasta, antes acogedora selecci¨®n oficial. El georgiano Levan Zakareishvili mostrar¨¢ Tblisi-Tblisi, comenzada en 1997, pero no acabada hasta ahora.
Como cada edici¨®n, el Festival de Cannes, a trav¨¦s de sus cuatro secciones -competici¨®n, Un Certain Regard, Quinzaine y Semana de la Cr¨ªtica- y su mercado del filme, quiere ofrecer la m¨¢s amplia muestra de la producci¨®n mundial. El n¨²mero de t¨ªtulos reunido es muy alto, como variadas son las procedencias, en perfecta contradicci¨®n con el material que finalmente encuentra distribuci¨®n: el 85% de las entradas vendidas en el mundo lo fueron para ver una producci¨®n de Hollywood. En la UE, el cine europeo apenas representa el 25% del mercado contra el 72% del procedente de los EE UU. Lo dicho: Cannes como espejismo.
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