El TSJ anula al Consell toda la reclasificaci¨®n del monte Benacantil

El Tribunal Superior de Justicia (TSJ) valenciano puso ayer fin con una sentencia a la tensi¨®n urban¨ªstica que sufre el monte Benacantil desde hace m¨¢s de un lustro, cuando el gobierno local y la administraci¨®n auton¨®mica iniciaron la recalificaron de una ladera de la emblem¨¢tica monta?a alicantina para construir un palacio de congresos. El fallo del TSJ, que no es firme, anula la reclasificaci¨®n y ordena expresamente que se proteja la zona donde iba a edificarse el palacio. Hasta cinco acuerdos del Consell y del Ayuntamiento, tres de ellos normativos, anula el fallo judicial.

El fallo resalta que el palacio interferir¨ªa en la imagen paisaj¨ªstica del Castillo

La sentencia de Sala de lo Contencioso-Administrativo del TSJ, de la que ha sido ponente Fernando Nieto Mart¨ªn, es compartida por sus 15 magistrados y su presidente, Jos¨¦ D¨ªaz Delgado. Con el fallo hecho p¨²blico ayer se resuelven un total de nueve recursos contra la reclasificaci¨®n del monte Benacantil que promovi¨® el alcalde de Alicante, Luis D¨ªaz Alperi, del PP para poder construir en su ladera oeste un palacio de congresos. Los recursos fueron presentados por los dos grupos de la oposici¨®n municipal, PSPV y EU, por el colectivo Salvem el Benacantil y por el arquitecto Manuel Ay¨²s.

En concreto, la Sala anula un acuerdo de 15 de septiembre de 2000 del consejero de Obras P¨²blicas, Urbanismo y Transportes por el que se aprob¨® de forma definitiva una modificaci¨®n del Plan General de Alicante (el art¨ªculo 1001 de las normas urban¨ªsticas) para autorizar la construcci¨®n de un palacio de congresos en la ladera oeste del monte Benacantil. El fallo tambi¨¦n deja sin efecto una resoluci¨®n de abril de 1999 del director general de Patrimonio Art¨ªstico que autoriz¨® el desarrollo de un proyecto b¨¢sico de palacio de congresos en el lugar antes indicado.

La sentencia anula igualmente el acuerdo municipal de enero de 2001 que aprob¨® el proyecto de ejecuci¨®n del palacio de congresos, y deja sin efecto varios preceptos normativos de un plan especial que la administraci¨®n local redact¨® con la intenci¨®n de encajar el palacio en el monte sin contravenir la legislaci¨®n en materia de protecci¨®n del Bien de Inter¨¦s Cultural (BIC) que corona la monta?a, el Castillo de Santa B¨¢rbara. El TSJ anula varios de los art¨ªculos de ese plan especial y ordena, expresamente, la modificaci¨®n de uno de sus apartados, para que la zona donde iba a construirse el palacio quede sujeta a una protecci¨®n de tipo paisaj¨ªstico de uso como parque p¨²blico.

El Alto Tribunal entiende que cualquier construcci¨®n en la ladera oeste del monte da?ar¨ªa la silueta paisaj¨ªstica caracter¨ªstica del Castillo de Santa B¨¢rbara. Y estima que con la prueba practicada en autos de exhibici¨®n de im¨¢genes, se ha demostrado la relevancia de la interferencia visual que una edificaci¨®n situada en el borde de la Avenida Jaime II de Alicante, en la ladera del Benacantil, tiene para la contemplaci¨®n de las murallas y del propio Castillo de Santa B¨¢rbara, "al anular de forma plena la perspectiva de este monumento".

El TSJ considera que las administraciones deb¨ªan de haber aportado m¨¢s pruebas a la causa, e insiste en que los datos visuales le llevan a la "convicci¨®n" de que la construcci¨®n de un palacio de congresos de nueve plantas, con una altura m¨¢xima de cornisa de 29 metros y situado 20 metros por debajo del punto superior de la muralla de Poniente del Castillo interferir¨¢ "de modo indudable" en la imagen arquitect¨®nica y paisaj¨ªstica del BIC. Y no cree que las limitaciones establecidas posteriormente (2002) por Patrimonio sean "suficientes" para excluir da?os en el BIC.

Sobre el Plan de Protecci¨®n Especial, la sentencia afirma que la Administraci¨®n "no puede decidir de forma lib¨¦rrima" si los edificios o usos de suelo proyectados alteran el car¨¢cter arquitect¨®nico y paisaj¨ªstico de la zona, o perturban la contemplaci¨®n BIC protegido. "El Ayuntamiento puede optar por diversos usos de suelo y distintas tipolog¨ªas edificatorias", pero "lo que no puede es decidir, sin restricciones pautadas por el Derecho, que estas tipolog¨ªas son incapaces de alterar el car¨¢cter arquitect¨®nico y paisaj¨ªstico de la zona".

El TSJ destaca que el Castillo "es el monumento m¨¢s importante de la ciudad y el mayor icono visual de esta poblaci¨®n", lo que exige "una dosis elevada de esfuerzos" en el an¨¢lisis de la situaci¨®n que se generar¨¢ mediante la construcci¨®n en la zona.

En defensa de su proyecto, el Ayuntamiento aleg¨® que el Plan Especial de Protecci¨®n respet¨® la "totalidad de los hitos o pasos normativos" que le impon¨ªa el ordenamiento y que la "piedra angular" de la regulaci¨®n normativa era precisamente la protecci¨®n de la silueta urbana del Castillo. La Generalitat argument¨® que el Plan dispon¨ªa de un informe t¨¦cnico favorable de la Administraci¨®n p¨²blica, que es la competente para "decretar cu¨¢l debe ser la vinculaci¨®n entre esta figura normativa y las prescripciones jur¨ªdicas que garantizan que no se produzca ning¨²n da?o de la intervenci¨®n urban¨ªstica en el entorno de los BIC".