Suram¨¦rica busca el comercio y la inversi¨®n de los pa¨ªses ¨¢rabes

En una Brasilia blindada por 9.000 polic¨ªas, el presidente In¨¢cio Lula da Silva inaugur¨® ayer la primera cumbre ¨¢rabe-suramericana con un discurso en el que pidi¨® un mayor peso internacional de las naciones en desarrollo. Ante 22 delegaciones de pa¨ªses ¨¢rabes y 12 de Am¨¦rica del Sur, Lula dijo que el encuentro sentar¨¢ los fundamentos de un nuevo "puente entre civilizaciones". En la declaraci¨®n final, que se prev¨¦ firmar hoy, se espera un compromiso para el aumento de las inversiones y el comercio, adem¨¢s de respaldo pol¨ªtico mutuo.

La cumbre, que al principio se present¨® como eminentemente econ¨®mica, ha tomado un cuerpo m¨¢s pol¨ªtico dado lo in¨¦dito de la reuni¨®n y el momento en que se produce. "No estamos reunidos", dijo el presidente Lula en el discurso inaugural, "s¨®lo en busca de ventajas econ¨®micas y comerciales. Buscamos un comercio justo y equilibrado, libre de subsidios de los pa¨ªses ricos". Y en medio de fuertes aplausos, a?adi¨®: "Queremos voz para los pa¨ªses en desarrollo".

Asuntos como el del conflicto en Palestina (el presidente palestino Mahmud Abbas acudi¨® a la cumbre) y la ocupaci¨®n de Irak estuvieron presentes en la redacci¨®n del documento final. Mientras en un p¨¢rrafo se prev¨¦ condenar -sobre todo por presiones de Brasil y Argentina-, el terrorismo "sin adjetivos", en otro se defender¨ªa el derecho de los pueblos a la resistencia ante una ocupaci¨®n extranjera. Cuando le preguntaron al ministro de Exteriores de Brasil, Celso Amorim, si esa cl¨¢usula pod¨ªa estar relacionada con la ocupaci¨®n estadounidense de Irak, respondi¨® diplom¨¢ticamente: "Cada uno lo leer¨¢ de la forma que debe ser le¨ªdo", evocando la frase de Jes¨²s en los Evangelios: "Quien tenga o¨ªdos para o¨ªr que oiga".

Pedro Motta, responsable de los temas africanos del Ministerio de Exteriores brasile?o, afirm¨® que la cumbre quer¨ªa ser "un mensaje al mundo de que es posible que dos regiones del mundo se entiendan y dialoguen juntas". Y a?adi¨® con cierta iron¨ªa que si, adem¨¢s, "se consiguiese cambiar un poco la geograf¨ªa econ¨®mica del mundo, tanto mejor".

En eso estaban ayer. Los representantes suramericanos buscaban alternativas para lograr que la inversi¨®n ¨¢rabe en la regi¨®n, actualmente en torno a los 10 millones de d¨®lares, aumentara al menos un 50% para 2007. A?adido a esto, se estudiaban v¨ªas para incrementar el comercio entre las regiones y hasta la negociaci¨®n de un acuerdo de libre comercio entre el Mercosur y el Consejo de Cooperaci¨®n del golfo P¨¦rsico.

Pese a todo, el acuerdo m¨¢s s¨®lido cerrado en esta cumbre fue el pactado entre Lula y los presidentes de Argentina y Venezuela, N¨¦stor Kirchner y Hugo Ch¨¢vez. Juntos han perge?ado tres propuestas de colaboraci¨®n mutua: la creaci¨®n deuna gran empresa petrolera bautizada Petrosul; una televisi¨®n p¨²blica que podr¨ªa llamarse Telesur, y un banco de desarrollo regional.