Privilegios, pero para Defensa
En los a?os sesenta del pasado siglo se construyeron infinidad de viviendas sociales por el Instituto Nacional de la Vivienda de Franco, el simbolizado con una casita sobre el yugo y las flechas. El INV cedi¨® muchos bloques a los antiguos patronatos de Casas Militares, o les dio muchas facilidades para que los construyera directamente y los alquilara a los miembros de los tres ej¨¦rcitos. Por cierto que a nadie le ha dado por tirar, adem¨¢s de las estatuas del dictador, los millones de viviendas sociales que propici¨®.
Volvamos a los a?os sesenta y setenta. En muchas localidades se hac¨ªan, por ejemplo, 20 bloques de viviendas sociales y se ced¨ªa uno a los patronatos militares. Las civiles se alquilaban a 200 ¨® 300 pesetas mensuales y, al cabo de 30 ¨® 40 a?os, cuando la renta hab¨ªa alcanzado las 2.000 pesetas, pasaban a propiedad de los inquilinos. En algunos casos se vendieron a un mill¨®n de pesetas, pero descontando los alquileres capitalizados, se quedaban en 80.000 o menos pesetas.
Tambi¨¦n se ced¨ªan o daban facilidades a los patronatos de casas de funcionarios civiles, incluidos los ferroviarios y policiales, de los sindicatos verticales y empresas del INI, a los patronatos municipales, etc., que terminaron cediendo la propiedad a sus inquilinos por los alquileres pagados o vendi¨¦ndoselos por cantidades simb¨®licas.
Los cedidos para militares, de las mismas calidades y calificaci¨®n, se alquilaban por los patronatos al "precio especial" de 2.000 ¨® 3.000 pesetas mensuales (10 veces superior a los civiles), que se han ido actualizando hasta alcanzar los 250 ¨® 300 euros actuales. Al final, tambi¨¦n est¨¢n siendo vendidos a sus inquilinos, pero a 25 ¨® 30 millones de las antiguas pesetas. Leyes especiales, privilegios, autorizan a Defensa a actuar as¨ª, justific¨¢ndolo en que necesitan dinero para el ej¨¦rcito profesional. De esta manera tan especial vela el Estado por los militares, sacando el dinero para las FAS no de los Presupuestos del Estado sino de los bolsillos de los militares, generalmente en reserva y retirados, y de sus viudas y hu¨¦rfanos.
Por favor, ?pap¨¢ Estado, deja de desvelarte por los militares y tr¨¢tanos como a los dem¨¢s ciudadanos, incluidos los funcionarios civiles! ?No nos quieras tanto, que nos est¨¢s matando.
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