La ciencia convierte a Tutankam¨®n en el primer fara¨®n digital
En el reciente encuentro entre Tutankam¨®n y la m¨¢s moderna tecnolog¨ªa, el fara¨®n, como es sabido, ha salido ganador, con todo su poder de fascinaci¨®n y su misterio intactos: seguimos sin saber c¨®mo muri¨® el querido Tut. La maldici¨®n de Tutankam¨®n, el sensacional documental que emite hoy National Geographic Channel (21.00, Digital + y redes de cable) sobre ese extraordinario encuentro entre la ciencia y la momia -el uso de un esc¨¢ner de ¨²ltima generaci¨®n para escudri?ar en enero pasado el cuerpo del joven rey-, es, no obstante, una de las m¨¢s apasionantes producciones sobre egiptolog¨ªa jam¨¢s realizadas y un ejercicio honesto en el que se demuestra que la verdad no tiene por qu¨¦ estar re?ida con el inter¨¦s ni, incluso, con el espect¨¢culo.
El documental, cr¨®nica de una gran aventura cient¨ªfica y arqueol¨®gica, expone las teor¨ªas, hip¨®tesis y leyendas cl¨¢sicas sobre Tutan-kam¨®n para irlas examinando a la luz de la nueva, complet¨ªsima, investigaci¨®n. S¨®lo por las impresionantes im¨¢genes de la momia y su procesamiento por ordenador, que convierte a Tutankam¨®n en el primer fara¨®n digital, vale ya la pena la visi¨®n del programa. Podemos mirar mucho m¨¢s all¨¢ de lo que lo hicieron Carter y Carnarvon, y asomarnos, tan asombrados como ellos, a unas maravillas que los descubridores de Tutankam¨®n nunca imaginaron.
La presencia de Zahi Hawass, el estricto responsable m¨¢ximo de antig¨¹edades de Egipto, en la empresa de examinar al fara¨®n, ha garantizado no s¨®lo la seriedad de la misma sino la equitativa participaci¨®n de cient¨ªficos egipcios y el tratamiento digno de la momia (algo de lo que careci¨® el examen de Carter en 1925). De enorme inter¨¦s son las explicaciones sobre los desperfectos en el torso de Tutankam¨®n y el agujero en su cr¨¢neo, as¨ª como el an¨¢lisis de las tumbas egipcias en pos de g¨¦rmenes que expliquen cient¨ªficamente la c¨¦lebre maldici¨®n.
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