Gibernau recobra cr¨¦dito, pero gana Rossi
Sete, segundo tras el campe¨®n italiano, que firm¨® su tercera victoria de la temporada
Tres victorias en las cuatro carreras disputadas hasta ahora. Y eso que, hasta ayer, Valentino Rossi y todo su equipo no hac¨ªan m¨¢s que quejarse de su moto, esta Yamaha M1 de 2005 que, a pesar de no estar al gusto del piloto de Urbino, ya ha escalado hasta el escal¨®n m¨¢s alto del podio en lo que va de temporada en tres de las cuatro primeras carreras. "No sabemos cu¨¢nto tiempo podremos aguantar esta presi¨®n", declaraba Jeremy Burgess, jefe de mec¨¢nicos de Rossi durante los entrenamientos del Gran Premio de Shanghai.
Ayer, en Le Mans, el seis veces campe¨®n del mundo volvi¨® a ganar y evidenci¨® que, este a?o y por el momento, a ¨¦l nadie le tose. Por su parte, en Yamaha hacen todo lo que est¨¢ a su alcance para ofrecerle una herramienta a su gusto. Una moto con la que pueda revalidar el t¨ªtulo conseguido el a?o pasado con la marca de los diapasones. Este fin de semana, consigui¨® la victoria en el Gran Premio, bati¨® el r¨¦cord del circuito en la sesi¨®n del s¨¢bado al hacerse con la pole position y ayer, en el ¨²ltimo giro, realiz¨® la vuelta m¨¢s r¨¢pida llevada a cabo nunca en Le Mans (1m 33,678s).
"Estamos haciendo progresos. Por fin, he tenido buenas sensaciones con la puesta a punto de la moto en seco", declaraba Rossi en la rueda de prensa posterior a la carrera. El de Urbino estaba custodiado por Sete Gibernau, segundo ayer en un circuito en el que se hab¨ªa impuesto los dos ¨²ltimos a?os, y por Colin Edwards, tercer clasificado ayer, tambi¨¦n con Yamaha, y para quien Rossi y Sete son: "Dos bastardos que van demasiado r¨¢pido para m¨ª".
Gibernau, despu¨¦s de realizar una mala salida, consigui¨® salvar, con un meritorio segundo puesto y tras una fulgurante remontada, un fin de semana que el s¨¢bado se presentaba preocupante. Tras una progresi¨®n que lo llev¨® desde la s¨¦ptima posici¨®n en la que cruz¨® la meta tras la primera vuelta hasta la segunda posici¨®n final, Sete ha recuperado cr¨¦dito con vistas a la clasificaci¨®n general. A falta de 13 carreras, la diferencia que le separa de Rossi es abismal, 42 puntos, pero ni mucho menos insalvable. "El equipo ha trabajado muy duro porque tras la sesi¨®n de clasificaci¨®n de ayer no ten¨ªa un buen ritmo. Hemos tenido que cambiar la moto de arriba abajo", apuntaba un Gibernau que tras los varapalos de Estoril y Shanghai parece volver a mirar la clasificaci¨®n general del Campeonato. "En el warm up no ten¨ªa nada claro lo que iba a pasar. Sab¨ªa que en las primeras vueltas de la carrera sufrir¨ªa y as¨ª ha sido. A la mitad, la moto iba perfecta y he podido tirar hacia adelante. Por un instante he pensado que no atrapar¨ªa a Rossi y Edwards, pero al final he contactado. Valentino ha adelantado a Colin y yo he hecho lo mismo porque s¨¦ que Rossi siempre se quiere ir".
Fueron un total de siete vueltas las que Gibernau y Rossi estuvieron luchando cuerpo a cuerpo. Hasta que, ya en la ¨²ltima, Sete entr¨® demasiado r¨¢pido en un viraje y tuvo que rectificar. Este error le impidi¨® realizar la ¨²ltima intentona para alzarse con la que habr¨ªa sido su primera victoria de la temporada.
Tras Gibernau, Toni El¨ªas fue el espa?ol mejor clasificado, en novena posici¨®n. Rub¨¦n Xaus termin¨® duod¨¦cimo y Carlos Checa, rod¨® por los suelo en la primera vuelta tras golpear a Biaggi.
Luego de cruzar la meta como vencedor, Rossi tendi¨® la mano a Gibernau, que se la acept¨®. Desde la reclamaci¨®n de Honda de 2004 en Qatar no se hablaban y la situaci¨®n se agrav¨® tras la ¨²ltima curva en Jerez.
Los Mundiales se interrumpen tres semanas. El retorno ser¨¢ en Mugello (Italia), territorio Rossi, y antes de Montmel¨®, casa de Gibernau.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.