Una lengua afilada
Los futbolistas y la directiva acusan al t¨¦cnico de decir las cosas con crudeza
A C¨¦sar Ferrando, seg¨²n los jugadores rojiblancos, le pierde su lengua, su sinceridad con la prensa, sus prolongados discursos que regatean a los t¨®picos. "Es un tipo fenomenal hasta que se pone delante de una grabadora", dicen de ¨¦l los pesos pesados del vestuario. En la directiva no s¨®lo opinan lo mismo, sino que tambi¨¦n tienen verdaderas dudas de su capacidad real como t¨¦cnico. Pero esas dudas no son nuevas. No provienen de la nefasta racha que ha acabado con cualquier aspiraci¨®n del equipo y con el definitivo divorcio con la afici¨®n. No han surgido tras los gritos de un sector de los hinchas al palco: "?Cerezo, fuera del Calder¨®n!". Son muy anteriores.
En diciembre, con la renovaci¨®n, extra?a, a¨²n caliente, el propio Ferrando le confesaba a un antiguo jugador suyo que estaba "m¨¢s fuera que dentro". Entonces, el Atl¨¦tico gan¨® al Bar?a en el Camp Nou.
Nada m¨¢s renovar, el valenciano confes¨® a un jugador: "Estoy m¨¢s fuera que dentro"
Toni Mu?oz, el director deportivo, le defend¨ªa. "Siempre defiende a los entrenadores", comentan en los c¨ªrculos de poder del club. Pero la relaci¨®n personal de Ferrando estaba deteriorada. El valenciano nunca ha comprendido, por ejemplo, la pol¨ªtica de fichajes del club. Toni, tampoco. Pidieron un delantero y se trajo al uruguayo Richard N¨²?ez. Pidieron a Jandro y no se pudo hacer el esfuerzo -"es muy caro", dec¨ªan- mientras algunos miembros de la directiva vend¨ªan a los medios una futura contrataci¨®n de Baptista.
No mucho antes, varios coches de lujo aparcaban en un establecimiento hostelero de La Roda, un pueblo entre Albacete y Madrid. Juanma L¨®pez, el representante de Ferrando, iba en uno de ellos. En otro, Miguel ?ngel Gil Mar¨ªn. Tambi¨¦n Toni y el propio Ferrando. Pactaron una temporada. El a?o anterior, el Albacete, entrenado por ¨¦l, se hab¨ªa quedado en Primera. Hab¨ªa jugado bien. Entonces, a Ferrando le gustaba que sus equipos tocasen la pelota. Luego, ya en el Atl¨¦tico, empez¨® a pensar que hab¨ªa otras f¨®rmulas para ganar partidos. Gil Mar¨ªn era uno de sus m¨¢s entusiastas valedores.
El t¨¦cnico quiso trasplantar su filosof¨ªa de equipo peque?o, de copas compartidas y camarader¨ªa, a un vestuario compartimentado, aquejado de una apat¨ªa cr¨®nica, de un miedo perenne a su afici¨®n y de celos profesionales. Y fracas¨®. No ha podido invertir la tendencia de los ¨²ltimos a?os, ¨¦sa que lleva a que varios jugadores se hundan en una profunda depresi¨®n, caso de Novo.
"S¨®lo fracasan los vagos", es la tesis de Ferrando. El t¨¦cnico es un obseso del trabajo. Pero desde la directiva ese celo no basta. Quieren resultados. El equipo, con una deuda reconocida de 120 millones de euros, va a perder una cantidad incuantificable,aunque se cifra en 12 millones de euros, por no clasificarse para una competici¨®n europea.
El t¨¦cnico, hasta la eliminaci¨®n en las semifinales de la Copa ante Osasuna, siempre hab¨ªa defendido la calidad de sus jugadores y achacaba su rendimiento a cuestiones de tipo psicol¨®gico. Ferrando ha culpado a la "tristeza y la falta de autoestima" de la baja aportaci¨®n de muchos de sus futbolistas. Algunos de ellos se escond¨ªan: que Fernando Torres resuelva todo, aunque algunos le tilden de "invento de la prensa". No ha conseguido hacerles cambiar de opini¨®n y el otro d¨ªa cay¨® en la misma argumentaci¨®n de sus predecesores, Gregorio Manzano y Luis Aragon¨¦s: "Falta calidad". Lo dijo para justificar el hecho de que su equipo haya marcado dos goles en ocho partidos.
Ahora, muy dolido, aguarda una sentencia que Enrique Cerezo neg¨® ayer, que Gil Mar¨ªn dej¨® en el aire, que Toni se siente incapaz de controlar. Mientras tanto, algunas fuentes filtran que Juande Ramos ya tiene un compromiso con el club.
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