Los est¨¢ndares y las bater¨ªas condicionan el despegue de la televisi¨®n por m¨®vil

Televisi¨®n por el m¨®vil. ?Para cu¨¢ndo? ?Para qui¨¦n? Las primeras experiencias de televisi¨®n en el m¨®vil, como la vemos en casa, ya se han puesto en marcha en Europa. Operadoras, fabricantes y proveedores de contenidos apuestan por este servicio que todav¨ªa plantea interrogantes como la capacidad de la bater¨ªa de los tel¨¦fonos, la variedad de est¨¢ndares para hacer llegar el contenido y el modelo de negocio. Y, sobre todo, ?estar¨¢ el cliente dispuesto a pagar por el servicio?

"Es como la televisi¨®n digital, pero en el m¨®vil. Sin embargo, el modelo de negocio est¨¢ por determinar. Ser¨¢ una realidad en un par de a?os", vaticina Fernando Sosmozas, de la empresa coreana LG.

Ahora mismo las operadoras espa?olas Telef¨®nica M¨®viles, Amena y Vodafone ya ofrecen contenidos de televisi¨®n para el m¨®vil como el v¨ªdeo bajo demanda, que te permite, por ejemplo, descargar los ¨²ltimos goles. A partir del minuto siguiente al gol, el cliente ya tiene el gol en su m¨®vil y puede verlos tantas veces quiera.

Vodafone, por ejemplo, permite la conexi¨®n en directo al canal CNN+ a trav¨¦s de la tecnolog¨ªa de tercera generaci¨®n (3-G). Amena dispone de contenidos de canales en directo de Bloomberg/TV3.

Movistar Emoci¨®n ofrece a sus abonados de 3-G un canal exclusivo de noticias, suministrado por Antena 3. Son bloques de noticias de actualidad y de corta duraci¨®n que se renuevan constantemente durante todo el d¨ªa.

"Nuestra apuesta es hacer una programaci¨®n adaptada al m¨®vil, p¨ªldoras informativas", explica Pilar Latorre, de Telef¨®nica M¨®viles de Espa?a. Seg¨²n un estudio de Ericsson, la televisi¨®n por el m¨®vil est¨¢ a la vuelta de la esquina. Y pone fecha: finales del pr¨®ximo a?o. El estudio cita algunos ejemplos que ya funcionan.

20 canales por 10 d¨®lares

En Estados Unidos la operadora Sprint ofrece 20 canales de televisi¨®n por 10 d¨®lares al mes; la CNBC vende las noticias en directo a 15 euros mensuales. En Europa, hay actualmente 17 millones de tel¨¦fonos capaces de transmitir v¨ªdeo. La operadora italiana TIM est¨¢ ofreciendo un servicio para ver Gran Hermano en el m¨®vil.

El estudio plantea interrogantes de futuro: "?Cu¨¢les ser¨¢n las relaciones entre las cadenas de televisi¨®n y las operadoras? ?C¨®mo determinar¨¢ la regulaci¨®n el modelo de negocio y c¨®mo ser¨¢ distribuido el espectro?". Las operadoras y las televisiones est¨¢n llegando a acuerdos para ofrecer contenidos de televisi¨®n en el m¨®vil de la misma manera que cualquier otro tipo de contenidos, mediante un acuerdo de compra o reparto de ingresos, explican en Amena. Sin embargo y de nuevo, hay que tener en cuenta los derechos de autor.

De momento lo cierto es que la pantalla de m¨®vil es demasiado peque?a y que se deber¨¢ abordar el tema de la duraci¨®n de las bater¨ªas. "Supondr¨¢ un problema porque tendr¨¢s la pantalla encendida constantemente y eso consume mucha bater¨ªa", advierte Sosmozas, de la empresa LG.

?Tiene inter¨¦s ver la tele en el m¨®vil? Seg¨²n Ericsson "existe una demanda. La mayor¨ªa de la gente prev¨¦ que la usar¨¢ mientras viaja o para entretenerse ellos mismos cuando no hay nada que hacer".

No todo el mundo lo ve con tanto optimismo. "Es dif¨ªcil pensar que una persona siga en directo desde el autob¨²s su serie favorita, como m¨ªnimo, bajo el mismo formato que vemos y reconocemos actualmente la televisi¨®n. Ya lo intentaron los japoneses hace 20 a?os con sus televisiones de mu?eca y no tuvo ¨¦xito. Adem¨¢s, pensemos que pa¨ªses como Jap¨®n son terreno abonado porque pasan tres o cuatro horas diarias en situaciones proclives para su consumo (transporte), coyuntura que no se reproduce en Europa", explica Oriol Ros, director de desarrollo corporativo de Latinia, fabricante de software de infraestructuras. "Existe incertidumbre sobre los modelos de negocio, estamos todav¨ªa lejos de vislumbrar un mapa tecnol¨®gico estable y definitivo y, encima, tenemos a una cadena de valor que debe empezar por entenderse sobre qui¨¦n aporta qu¨¦ y el consiguiente reparto de ingresos. Todos estos factores hacen dif¨ªcil pronosticar un inmediato despegue de la televisi¨®n en el m¨®vil", dice Ros.

Experiencia finlandesa

En Finlandia el primer fabricante de tel¨¦fonos m¨®viles ha iniciado un proyecto piloto con 500 abonados de Helsinki. Estos elegidos pueden ver televisi¨®n en tiempo real en sus Nokia 7710 equipados con un accesorio para recibir la se?al de transmisi¨®n y acceder a programas como MTV o CNN. El proyecto usa el est¨¢ndar DVB-H, soluci¨®n del Instituto Europeo de Estandarizaci¨®n de Telecomunicaciones (ETSI).

"La clave para llevar la televisi¨®n al m¨®vil est¨¢ en la combinaci¨®n de los sistemas tradicionales con caracter¨ªsticas t¨¦cnicas espec¨ªficas de los m¨®viles. La tecnolog¨ªa se llama IP Datacasting sobre DVB-H, una combinaci¨®n de emisi¨®n digital y protocolo de Internet, que permite la recepci¨®n del servicio en los tel¨¦fonos", explica Ignacio Manzanares, de Nokia.

Los terminales necesitan un receptor de radio adicional, separado del receptor del m¨®vil, para recibir la se?al. El receptor se integra en el terminal de la misma forma que la tecnolog¨ªa Bluetooth.

DVB-H, apoyado por fabricantes en Europa como Samsung, no es el el ¨²nico est¨¢ndar. Samsung trabaja en Corea con otro est¨¢ndar llamado DMB. Adem¨¢s, los servicios de televisi¨®n en el m¨®vil est¨¢n siendo proporcionados en la actualidad mediante las redes de segunda y tercera generaci¨®n. Otro est¨¢ndar, el MBMS (Multimedia Broadcast & Multicast Services), permite la difusi¨®n simult¨¢nea de hasta 10 canales a trav¨¦s de la redes 3-G.

"Hay que tener en cuenta que en el caso de DVB-H hay que construir una infraestructura y tambi¨¦n es necesario incluir un nuevo hardware en los terminales. En cambio, con MBMS simplemente se trata de aprovechar la redes del 3-G", explica Alfonso Aguado, de Ericsson. Aguado est¨¢ convencido de que el a?o que viene asistiremos al despliegue masivo de la televisi¨®n por m¨®vil. "Lo fundamental es que con una soluci¨®n o con otra, tengamos en 2006 una experiencia competitiva".