Los forenses explorar¨¢n a la ni?a que no pudo declarar ante su presunto agresor

La Secci¨®n Segunda de la Audiencia de Barcelona acord¨® ayer que dos m¨¦dicos forenses examinen a la menor de 11 a?os, para que determinen si se encuentra en condiciones de declarar en el juicio que se sigue contra su presunto agresor sexual, que fue su profesor de artes marciales. Cuando conozcan esa opini¨®n, los jueces escuchar¨¢n a las acusaciones y la defensa, y decidir¨¢n si la ni?a declara. El presidente del tribunal, Pedro Mart¨ªn, anunci¨® ayer que, si finalmente se acuerda, se har¨¢ sin utilizar una mampara para aislar visualmente a la menor del acusado.

La menor estaba citada a declarar ante el tribunal el pasado d¨ªa 18, pero el d¨ªa anterior, cuando supo que deb¨ªa acudir al juicio, sufri¨® una crisis nerviosa y los padres decidieron que no declarase. Las otras tres ni?as s¨ª comparecieron y ratificaron que entre 2000 y 2003, durante la clase extraescolar de k¨¢rate, el profesor que la impart¨ªa les realiz¨® diversos tocamientos en la vulva, les dio besos en la boca y las acarici¨®.

Sin embargo, la fiscal y la acusaci¨®n particular, ejercida por la abogada Lara Padilla, consideran que fue precisamente esa ni?a quien sufri¨® los mayores abusos y que el maestro la oblig¨® incluso a que le realizara una felaci¨®n. Seg¨²n las acusaciones, los tocamientos se repitieron al menos una vez por semana y "en innumerables ocasiones" el profesor llev¨® a la ni?a a un pasillo aparte y abus¨® de ella.

La versi¨®n de la menor sobre lo ocurrido est¨¢ recogida en una cinta de v¨ªdeo que se grab¨® en el juzgado de instrucci¨®n en presencia de la defensa, pero el tribunal se ha negado hasta ahora a reproducir la cinta e insiste en que la ni?a vaya a la sala de vistas.

Gloria Escudero, coordinadora de la Asociaci¨®n de Mujeres Agredidas Sexualmente, declar¨® ayer, al conocer la decisi¨®n del tribunal: "Se est¨¢ produciendo un linchamiento de esta ni?a y de las futuras v¨ªctimas. No s¨¦ qu¨¦ pretenden los jueces de este tribunal".

La fiscal¨ªa solicita para el acusado, Francisco C. S., sendas penas de tres a?os de c¨¢rcel por tres delitos continuados de abusos sexuales y 10 a?os m¨¢s de prisi¨®n por la agresi¨®n cometida contra la menor S.

El magistrado Pedro Mart¨ªn anunci¨® la decisi¨®n de que los dos m¨¦dicos forenses examinasen a la ni?a al finalizar la prueba pericial y sin ninguna deliberaci¨®n. La fiscal se opuso y reclam¨® que esa exploraci¨®n la realizasen psic¨®logos o pediatras, incluso distintos a los que en su d¨ªa trataron a la ni?a, pero el presidente del tribunal se neg¨® y dio a entender que los m¨¦dicos forenses ser¨ªan m¨¢s imparciales en su diagn¨®stico.

La decisi¨®n del tribunal caus¨® agrado, seg¨²n revel¨® su rostro, al profesor, que ayer se sentaba en el estrado de la Secci¨®n Segunda junto a su abogada defensora, In¨¦s Portabella, en lugar de ocupar el banquillo de los acusados. De esta permisibilidad judicial no se conocen precedentes en la Audiencia Provincial de Barcelona.

Los psic¨®logos que en su d¨ªa exploraron a las cuatro menores, as¨ª como los dos m¨¦dicos de la unidad de abusos sexuales del hospital de Sant Joan de D¨¦u de Barcelona, ratificaron ayer ante el tribunal lo que d¨ªas antes ya hab¨ªan manifestado las tutoras de las menores, que ahora tienen entre 9 y 13 a?os: que su relato de los supuestos abusos sexuales resulta cre¨ªble y que descartan una "tendencia a fabular". Tambi¨¦n coincidieron en que las secuelas que han dejado los hechos en las ni?as aparecer¨¢n en la adolescencia.