Formados entre fogones

La Fundaci¨®n C¨¢ndido est¨¢ llevando a cabo en Segovia un programa de formaci¨®n de personas con discapacidad intelectual en grado ligero, con el fin de ofrecerles el medio hostelero como una v¨ªa de integraci¨®n en el mercado laboral. Con el patrocinio de la Consejer¨ªa de Cultura y Turismo de la Junta de Castilla y Le¨®n, tras 400 horas de formaci¨®n te¨®rica, el a?o pasado, ahora han dado comienzo las pr¨¢cticas en contacto directo con los clientes, en un comedor pr¨®ximo a donde el conocido mesonero mayor de Castilla -un t¨ªtulo que fue refrendado por el rey Juan Carlos- recib¨ªa a los premios Nobel o a las bellezas de Hollywood y les invitaba a compartir con ¨¦l la ceremonia de partir el cochinillo asado con el borde de un plato, que luego lanzaban al aire, a los pies del acueducto.

Los alumnos practicar¨¢n 400 horas, de lunes a viernes, desde las 11.30 a las 16.30, hasta diciembre

Con edades de entre 25 y 35 a?os, dos mujeres y seis hombres -Concepci¨®n Marinas, Sonia G¨®mez, Jes¨²s Misis, Jos¨¦ Carlos Garc¨ªa, Juan Antonio Bermejo, Luis Miguel G¨®mez, Alberto Bravo y Roberto Trapero- se distribuyen cada ma?ana entre el comedor y la cocina dispuestos a atender con el m¨¢ximo esmero a los clientes del d¨ªa, apoyados en todo momento por profesionales de la casa, como el sumiller Pablo Mart¨ªn y el cocinero Iv¨¢n de Abajo, junto a expertos de la Asociaci¨®n de Padres de Deficientes F¨ªsicos y Mentales (Apadefim), encargados de seleccionar a los alumnos.

De lunes de viernes, con una dotaci¨®n de 60 euros mensuales para transporte, los futuros camareros y cocineros practicar¨¢n otras 400 horas, con un horario que empieza a las 11.30 y acaba a las 16.30, hasta el mes de diciembre, con vacaciones en verano. Su jornada habitual consiste en preparar el comedor y las mesas o elaborar el men¨² en la cocina, seg¨²n el grupo, para almorzar despu¨¦s con el resto del personal del restaurante y, a continuaci¨®n, abrir las puertas a la clientela, haciendo suya la t¨ªpica pregunta de "?qu¨¦ van a tomar los se?ores?".

El secretario de la fundaci¨®n, C¨¢ndido L¨®pez Cuerdo, explica que se ha querido reservar un comedor como escuela, para una capacidad m¨¢xima de 25 a 30 personas, para no complicar el servicio en exceso, adem¨¢s de que hay un men¨² fijo, a un precio de 30 euros por cubierto, con el fin de que los alumnos aprendan "sin agobios".

Tras pasar la entrada del comedor, donde se advierte que se trata de un proyecto de integraci¨®n de personas con minusval¨ªas, innovador y pionero en la hosteler¨ªa espa?ola, los futuros profesionales podr¨¢n ofrecer al cliente un aperitivo a base de chips de vegetales, junto a un ajoblanco de esp¨¢rragos y cerezas, para continuar con salmonetes rellenos de mi-cuit de rape y bar¨®n de conejo relleno de crema de ajos asados, finalizando con un postre llamado nocilla, con helado de leche, galleta de cacao y mousse y az¨²car de avellanas.

Mientras que C¨¢ndido L¨®pez mantiene la ilusi¨®n de ampliar el proyecto a m¨¢s alumnos, teniendo en cuenta las peticiones que le han llegado de diversos puntos, Pablo Mart¨ªn insiste en que a estos alumnos especiales les mueve la inquietud de ser ¨²tiles a la sociedad y, aunque requieren una formaci¨®n con un desarrollo m¨¢s lento, son muy constantes a la hora de trabajar y terminan trabajando como cualquier otro profesional.