Espejismo
Hace treinta a?os, tras la revoluci¨®n de los claveles, Portugal liquid¨® su imperio. Se independizaron los vastos territorios de Angola y Mozambique y tambi¨¦n otras colonias m¨¢s peque?as: Cabo Verde, Sao Tom¨¦, Guinea-Bissau y, en el extremo de Asia, Timor Oriental. Este ¨²ltimo pa¨ªs, sin embargo, fue absorbido inmediatamente por la Indonesia del infame general Suharto, y a partir de entonces pocas personas en este mundo creyeron que Timor Este, un lugar donde apenas vive un mill¨®n de personas, pudiera liberarse alguna vez de una potencia agresora que supera los 240 millones. Empero, Timor Este se libr¨® de las garras indonesias hace pocos a?os, pagando, eso s¨ª, un alto precio de muerte y destrucci¨®n.
En el mismo a?o en que Timor Este fue invadido, se produjo la ocupaci¨®n del S¨¢hara entonces espa?ol por Marruecos y Mauritania en una primera fase y por Marruecos finalmente. ?Tambi¨¦n aqu¨ª, despu¨¦s de tantos a?os, cabe la posibilidad de que se haga realidad otro sue?o como el de Timor? Parece harto improbable, salvo que se produjera el hundimiento del reino alauita, descalabro que no cabe esperar ni desear. Lo del S¨¢hara Occidental tiene mucho peor arreglo porque se trata de una tierra, aunque des¨¦rtica, rica, enorme y apetecible, lo que no concurr¨ªa en Timor Este. Y porque ser¨ªa dif¨ªcil imaginar a apenas 300.000 personas gestionar un territorio de un cuarto de mill¨®n de kil¨®metros cuadrados. Por otra parte, este hipot¨¦tico S¨¢hara liberado, ser¨ªa, probablemente, un sat¨¦lite de Argelia, enemigo secular de Marruecos, y valedor del Polisario. As¨ª las cosas, la ¨²nica posibilidad real de mejora para el S¨¢hara es una amplia autonom¨ªa, dentro del estado marroqu¨ª, tutelada por Naciones Unidas. Se trata de un proyecto humilde y casi con toda seguridad injusto, pero a veces as¨ª son las cosas en la vida pol¨ªtica y en la vida real. Por otra parte, ese proyecto menor no deja de ser tambi¨¦n dif¨ªcil de alcanzar, dada la dura actitud de Rabat y su conexi¨®n privilegiada con Washington. Y as¨ª se disipa otro viejo sue?o que muchos alentamos en tiempos. Aunque siempre nos quedar¨¢ Timor...
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