Bienestar Social cierra una residencia ilegal de ancianos en Cala

La delegaci¨®n de Bienestar Social en Huelva orden¨® ayer el cierre de la residencia de ancianos La Muralla de Cala por no ofrecer las prestaciones y servicios adecuados. El centro "funcionaba de forma ilegal", seg¨²n afirm¨® el delegado, Jos¨¦ Mart¨ªn. Los 12 ancianos de la residencia clausurada, seis hombres y seis mujeres de edades comprendidas entre los 72 y 99 a?os, fueron realojados en una residencia de Nerva tras pasar un reconocimiento m¨¦dico.

Jos¨¦ Mart¨ªn se?al¨® que el centro carec¨ªa de la autorizaci¨®n necesaria porque "no hab¨ªa adaptado sus instalaciones a los continuos requerimientos que le hab¨ªa solicitado la Administraci¨®n". La residencia pidi¨® permiso en 1999.

"Una residencia no s¨®lo requiere habitaciones para alojar a los ancianos sino que ha de facilitar unos dispositivos adecuados y un equipo multidisciplinar para ofrecer una atenci¨®n de calidad y con los que no contaba esta residencia. La atenci¨®n b¨¢sica estaba cubierta, pero exist¨ªan muchas deficiencias que la propietaria no hab¨ªa subsanado", afirm¨® el delegado.

Jos¨¦ Mart¨ªn a?adi¨® que la Junta deneg¨® la licencia de apertura ya en 1999 e inst¨® al cierre de las instalaciones. Posteriormente, intervino la Fiscal¨ªa de Huelva, que entendi¨® que la due?a hab¨ªa incurrido en un delito de desobediencia a la autoridad eludiendo el cierre, indic¨® Mart¨ªn. Y agreg¨®: "Una vez conocida la resoluci¨®n judicial la Junta ha decidido proceder al cierre forzoso y al precintado de las instalaciones".

Rom¨¢n Bueno, del servicio de Inspecci¨®n de los Servicios Sociales que ha intervenido en la elaboraci¨®n del informe sobre las condiciones de la residencia, detall¨® las principales carencias: "Son aspectos relativos a las dimensiones de las habitaciones, de los ba?os, hab¨ªa carencias de salas en las que desarrollar actividades de terapia ocupacional y, aunque la comida era buena, no respetaba los reg¨ªmenes que cualquier m¨¦dico hubiera determinado en cualquier residencia. La propietaria, con el objetivo de eludir la acci¨®n de la administraci¨®n, prepar¨® unos contratos de arrendamiento de las habitaciones para las personas mayores, pero finalmente la Administraci¨®n detect¨® que eso era un fraude de ley y demostr¨® que los residentes recib¨ªan una atenci¨®n integral".