Javier Maqua relata en una novela la historia del ¨²ltimo fusilado en Espa?a por delito civil
'Fusilamiento (instrucciones de uso)' narra un episodio de los ¨²ltimos a?os del franquismo
Pedro Mart¨ªnez Exp¨®sito llevaba marcado el estigma de la fatalidad. Se hab¨ªa criado en la miseria, su coeficiente intelectual era ¨ªnfimo y ha pasado a la historia porque fue el ¨²ltimo fusilado en Espa?a por delito civil. Un pelot¨®n de soldados lo abati¨® el 8 de enero de 1972. Javier Maqua (Madrid, 1945) ha publicado recientemente una novela sobre este s¨®rdido episodio que ilustra la negrura de los estertores del franquismo. Fusilamiento (instrucciones de uso) obtuvo el VIII Premio de Novela Ciudad de Badajoz y ha sido publicada por la editorial sevillana Algaida.
La novela parti¨® de un taller de escritura de documentales impartido por Maqua en Gand¨ªa (Valencia). "Uno de los alumnos me dej¨® un v¨ªdeo que hab¨ªa hecho sobre un vecino suyo, que era el ¨²ltimo fusilado por delito civil. Me gust¨® mucho el documental, y tambi¨¦n que lo hiciera por un asunto de conciencia moral, venciendo las dificultades que le pon¨ªan en el pueblo y con cuatro pesetas", relata Maqua.
"Unos a?os despu¨¦s, me dijo que hab¨ªa encontrado a uno de los soldados del pelot¨®n de fusilamiento. Y comenz¨® a interesarme el tema. Empec¨¦ un relato de ficci¨®n y a cartearme por correo electr¨®nico con el autor del documental", agrega. Director de pel¨ªculas como T¨² est¨¢s loco, Briones o Carne de gallina, Maqua es autor de varias novelas, entre las que figuran Invierno sin pretexto (1992) o Amor africano (1998).
Mart¨ªnez Exp¨®sito siempre hab¨ªa chapoteado en la miseria. Cuando hac¨ªa la mili asesin¨® a dos mujeres. "Estaba marcado por el destino", dice Maqua. ?C¨®mo un muchacho con tan pocas luces pod¨ªa hacer el servicio militar? "Su abogado, Jes¨²s Sancho Tello, intent¨® defender la tesis de que Mart¨ªnez Exp¨®sito era un disminuido mental. Yo hice la mili en aquellos a?os. Hab¨ªa mucha gente l¨ªmite. Como alf¨¦rez tuve problemas con gente que detectabas que era l¨ªmite: robaban coches, apostaban en masturbaciones colectivas... Creo que este chico era oligofr¨¦nico. Es un tipo que mata a dos mujeres para conseguir 320 pesetas para ir al baile", se?ala.
Maqua cree que en su ejecuci¨®n influy¨® el miedo que la dictadura sent¨ªa ante el supuesto poder de la oposici¨®n antifranquista. "Quisieron dar ejemplo de mano dura. El r¨¦gimen ten¨ªa mucho miedo. Estaban convencidos de que ¨¦ramos muchos y feroces. Y no ¨¦ramos tantos ni tan feroces", ironiza el autor.
Lo cierto es que muchas personas de Gand¨ªa quer¨ªan la muerte de Mart¨ªnez Exp¨®sito. "Es la reacci¨®n de la gente de la pel¨ªcula Furia, de Fritz Lang. No lo linchan de milagro. Le tiran piedras. Est¨¢ todo el pueblo cuando todav¨ªa no est¨¢ demostrado nada. Rodean la chabola donde viven los padres y empiezan a pedradas", dice.
El escritor insiste en que lo "fundamental del libro son las palabras" del miembro del pelot¨®n de fusilamiento. "Hoy en d¨ªa es un ecologista radical. Y en aquellos momentos era de izquierdas, de una izquierda muy radical. Cuenta c¨®mo se montan en el cami¨®n con una botella de co?ac, los llevan mam¨¢ndose a fusilar al muchacho mientras oyen lo que dice el jefe del pelot¨®n...", evoca Maqua.
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