Paseo por Velluters

De pronto, me sobrevinieron las sabias palabras de San Agust¨ªn, como una revelaci¨®n divina, mientras paseaba caviloso y compungido por el barrio de Velluters de la ciudad de Valencia.

Cualquiera que desee pasearse por la zona podr¨¢ contemplar los resultados del "programa regenerador" que el Ayuntamiento de Valencia est¨¢ llevando a cabo sobre el antiguo barrio de los artesanos de la seda.

All¨ª, progresiva e inexorablemente, las m¨¢quinas han ido echando abajo -y en ello contin¨²an- grupos enteros de casas, sustituy¨¦ndolos por fr¨ªos bloques de edificios del todo discordantes con la vida e historia del barrio, tanto por su est¨¦tica ultra vanguardista, como por la utilidad a que se destinan.

Y es que de nuevo leemos en Valencia, sin abrir libro alguno, el manual del perfecto especulador: un barrio deliberadamente abandonado que se despuebla, para luego derrumbarlo y sacar no pocos beneficios con la consiguiente reconstrucci¨®n.

El resultado: un barrio perdido, una historia ignorada, un pueblo insultado... y las calles vac¨ªas, tristes y ausentes de vecindario.

?Pero es que no hay normas reguladoras de la est¨¦tica urban¨ªstica? ?No hay pol¨ªticas serias a las que acogernos para recuperar los barrios hist¨®ricos de las ciudades de una manera respetuosa y armoniosa?

Seguro que s¨ª. Pero, normas y regulaciones a parte, el principio del amor por lo propio de cada uno deber¨ªa ser suficiente para que les nuestras autoridades actuaran en consecuencia. Y a la vista de la realidad de los barrios hist¨®ricos de Valencia, es evidente que nuestros gobernantes viven en la m¨¢s tenebrosa de les insensibilidades.

De otro modo si no, bastar¨ªa con que amaran... e hicieran lo que quisiesen..