Una coproducci¨®n recrea la figura de Hemingway

Par¨ªs, a?o 1923. Ernest Hemingway tiene 24 a?os, est¨¢ reci¨¦n casado, vive de sus colaboraciones para un diario de Toronto (Canad¨¢) y se relaciona con la bohemia literaria. La escritora Gertrude Stein, estadounidense como ¨¦l, le recomienda que deje el periodismo porque "estropea el estilo" y viaje a los sanfermines para "encontrar historias excitantes para escribir".

As¨ª comienza Hemingway en el ruedo ib¨¦rico, un documental coproducido por Multicanal, New Atlantis, TVE y Tesauro, que se estrenar¨¢ el 7 de julio (17.00 y 22.00) en Odisea (redes de cable e Imagenio), coincidiendo con la popular fiesta de San Ferm¨ªn.

Llega a Pamplona el 6 julio de 1923 para descubrir un mundo, el de los toros, lleno de aventura, emoci¨®n, riesgo, coraje, violencia, sangre y muerte. All¨ª encuentra todo lo que hab¨ªa buscado su esp¨ªritu atormentado, entre otros motivos, por el suicidio de su padre. Tanto le impact¨® el ambiente de la fiesta nacional y el juego gratuito del hombre con la muerte que los eligi¨® como escenario de dos de sus grandes obras, Fiesta y Muerte en la tarde.

Realizado por Mart¨ªn Costa, el documental centra la atenci¨®n en las relaciones que Hemingway entabl¨® con distintos personajes del mundo taurino, como Cayetano Ord¨®?ez. Todo ritual necesita un sumo sacerdote, y Hemingway lo encontr¨® en este matador, que le revel¨® los secretos de la escuela ronde?a. Por su hijo, Antonio Ord¨®?ez, el premio Nobel sinti¨® verdadera admiraci¨®n, y tambi¨¦n cultiv¨® la amistad de Luis Miguel Domingu¨ªn.

Hemingway en el ruedo ib¨¦rico cuenta con valiosas im¨¢genes de archivo y con los testimonios de expertos conocedores de su vida y obra, como Fernando Hualde, investigador de Hemingway en Pamplona; el periodista Manuel Leguineche; el escritor y periodista Carlos G. Reigosa, o Carlos Gonz¨¢lez, copropietario del restaurante Bot¨ªn, uno de sus preferidos de Madrid junto al del Callej¨®n de la Ternera.

La producci¨®n tambi¨¦n descubre el amor de Hemingway por la causa de la Rep¨²blica. De hecho, jur¨® que mientras hubiera un solo republicano en las c¨¢rceles franquistas no volver¨ªa a Espa?a. Sin embargo, en 1953 regres¨®. El 2 de julio de 1961 se vol¨® la cabeza con su mejor rifle de caza. Ten¨ªa 63 a?os y en la capital navarra le esperaba, una vez m¨¢s, San Ferm¨ªn.