M¨¦ndez de Lugo rechaza las cr¨ªticas de asociaciones de jueces

El apoyo de la Junta a la reelecci¨®n de Augusto M¨¦ndez de Lugo como presidente del TSJA -muy criticado por las asociaciones de jueces- tuvo un peso importante en su designaci¨®n. As¨ª se deduce de los agradecimientos que expres¨® ayer a la consejera de Justicia, Mar¨ªa Jos¨¦ L¨®pez, y al consejero del Poder Judicial Juan Carlos Campo por haber apostado por ¨¦l. El presidente rechaz¨® los reproches a su gesti¨®n que la tachaban de personalista y alejada de los jueces de base.

Acabado el proceso electoral en el que el reci¨¦n reelegido presidente procur¨® no hacer manifestaciones sobre su candidatura "para dejar que el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) estudiara las candidaturas y valorara su idoneidad", Augusto M¨¦ndez de Lugo dedic¨® palabras de agradecimiento al vocal Juan Carlos Campo, su principal valedor en el seno del Consejo y antiguo director general de Relaciones con la Administraci¨®n de Justicia de la Junta de Andaluc¨ªa. "Apost¨® desde un principio por m¨ª porque me conoce; hemos trabajado juntos durante muchos a?os y ha transmitido su apoyo a los dem¨¢s vocales del Consejo", dijo.

El presidente extendi¨® sus reconocimientos al papel de la consejera de Justicia, Mar¨ªa Jos¨¦ L¨®pez, que reiter¨® expresamente su apoyo a la candidatura de M¨¦ndez de Lugo semanas antes de su nombramiento. "La presidencia del TSJA y la Sala [de Gobierno del tribunal] han trabajado muy cercanamente con la consejer¨ªa [de Justicia] consiguiendo una mejora muy sustancial de la Administraci¨®n de Justicia en Andaluc¨ªa", a?adi¨®.

Ambos agradecimientos reconocen impl¨ªcitamente el peso espec¨ªfico de esos apoyos en la reelecci¨®n a pesar de las cr¨ªticas que Jueces para la Democracia, y el candidato de la Asociaci¨®n Profesional de la Magistratura (APM), Jos¨¦ Antonio Montero, expresaron al respecto. "Hay que pedir a la Junta que, como m¨ªnimo, se mantenga al margen del proceso de designaci¨®n, que respete el papel que constitucionalmente corresponde a los consejeros del Poder Judicial, que deje a ¨¦stos hacer su trabajo sin intromisiones ni interferencias", manifest¨® la asociaci¨®n minoritaria y progresista de la judicatura el pasado 15 de junio. Montero expres¨® su preocupaci¨®n de que la estrecha relaci¨®n entre M¨¦ndez de Lugo y la consejera de Justicia pudiera afectar a la independencia del TSJA.

M¨¦ndez de Lugo respondi¨® tambi¨¦n a los reproches de "personalismo" en la gesti¨®n y "lejan¨ªa a los jueces", se?alados por Jueces para la Democracia -que apoyaba a su candidata, la magistrada jiennense Lourdes Molina- y el propio Montero. "Si ser personalista es tanto como empe?arme en llegar a la sociedad civil y a la administraci¨®n auton¨®mica y medios de comunicaci¨®n; si es lanzar el TSJA en todo el territorio andaluz; si es dejar claro que su sede es Granada con respecto a las salas desplazadas [de M¨¢laga y Sevilla]; si es acudir a todos los actos, incluso los culturales, en los que tiene que estar el TSJA, entonces he sido un presidente personalista", dijo M¨¦ndez de Lugo, que asegur¨® que da cuenta de todos sus actos a la Sala de Gobierno del tribunal (dominada por la conservadora y mayoritaria APM).

El presidente, con cuya reelecci¨®n se rompe la norma no escrita de limitar los mandatos al frente del TSJA a diez a?os, hizo p¨²blica la memoria (programa) con la que acompa?¨® su candidatura el pasado 19 de mayo. "El conjunto de iniciativas que se han abordado desde la presidencia que he desempe?ado pueden beneficiarse de mi continuidad como presidente del TSJA", se?alaba en ese documento.

En ¨¦l, M¨¦ndez de Lugo destacaba su buena sinton¨ªa con la Junta y el plan de actuaci¨®n para solucionar el atasco en las salas de lo Contencioso-Administrativo del tribunal, y promet¨ªa "la potenciaci¨®n del servicio de estad¨ªstica" para conocer mejor el funcionamiento de los juzgados y tribunales andaluces. Entre los retos de su tercer mandato, subray¨® la reforma del Estatuto de Autonom¨ªa que podr¨ªa desembocar en convertir a los TSJ en la ¨²ltima instancia judicial en cada Comunidad Aut¨®noma.