Contra el olvido

"No existe la muerte, sino s¨®lo el olvido". La cita de Mazzini, grabada sobre una tumba del cementerio protestante de Capri, abre un libro intenso y l¨ªrico. El escritor, viajero y en¨®logo apasionado Mauricio Wiesenthal (Barcelona, 1943) evoca en sus r¨¦quiems unos amores perpetuos que, desde su adolescencia hasta la actualidad, contin¨²an siendo el soplo de su alma. Como el amante a?ejo que regresa a los para¨ªsos en los que un d¨ªa fue feliz, Wiesenthal revive los innumerables viajes por la Europa de sus sue?os, desde San Petersburgo a Taormina. Una prosa elegante, a veces de tono levemente elegiaco en violeta o gris, y otras, ir¨®nica y apasionada, luminosa y engalanada con una sutil mezcla de egotismo y humildad, recrea, rememora y rescata a unos personajes inolvidables. Ensayos breves sobre la biograf¨ªa de grandes y peque?os personajes, salpicados con alguna cursiler¨ªa autobiogr¨¢fica, recrean las vidas de unos seres tan atractivos como simb¨®licos: retrata a Dostoievski, con sus amores y su relaci¨®n con las casas de juego; viaja al Par¨ªs de Coco Chanel y desde la penumbra del hotel Ritz brinda por el recuerdo de las fiestas en el pabell¨®n de la Rue Jacob y sus venusianas sublimes: Mata Hari, la Garbo o Marlene Dietrich. Hay recuerdos para Stefan Zweig, suicida en la lejana Pers¨¦polis, o la bella Lou von Salom¨¦. Tambi¨¦n hallamos retratos de Falla, Vel¨¢zquez, P¨ªo Baroja y D'Ors. Todas estas vidas y lugares maravillosos alberga este precioso cat¨¢logo de nostalgias, inspirado por ese inquietante secreto que s¨®lo conocen los so?adores, clave de la felicidad de todos los infelices: que se disfruta m¨¢s imaginando la realidad que con la realidad misma.