"Europa va mal y con riesgo de entrar en una espiral de desintegraci¨®n"
Daniel Cohn-Bendit tiene ya 60 a?os. Pero el tiempo no ha apagado su pasi¨®n pol¨ªtica, desbordada en Mayo del 68 como l¨ªder de la revoluci¨®n estudiantil y hoy volcada, con el mismo verbo inflamado, en defensa de Europa. El que fuera Dany el Rojo considera que Europa atraviesa momentos tan cr¨ªticos que puede verse abocada a la desintegraci¨®n. Los ego¨ªsmos nacionales se han impuesto y, para colmo, la clase pol¨ªtica europea no est¨¢ a la altura del reto hist¨®rico. Su consuelo es que Europa como mercado ha llegado para quedarse y que para que ese mercado pueda competir y sobrevivir en el siglo XXI ser¨¢ necesario actuar tambi¨¦n pol¨ªticamente.
El hoy europarlamentario verde defendi¨® contra viento y marea en numerosos m¨ªtines en Francia el s¨ª a una Constituci¨®n que fue rotundamente rechazada por franceses y holandeses.
"Los responsables pol¨ªticos europeos no est¨¢n hist¨®ricamente a la altura. Nadie dice qu¨¦ es lo que se espera de Europa, cu¨¢l es la visi¨®n de Europa"
"Hay que ver qu¨¦ partes del Tratado se pueden salvar y someterlas a refer¨¦ndum en toda Europa con la idea de que si se aprueba en 19 o 20 pa¨ªses entre en vigor"
"La iron¨ªa de la historia es que los brit¨¢nicos toman la presidencia de la UE en el momento en el que se ha hecho un gran regalo a su visi¨®n de Europa"
"No hay alternativa a la econom¨ªa de mercado. La antiglobalizaci¨®n se reduce cada vez m¨¢s a una ideolog¨ªa estatalizadora"
"Las sociedades din¨¢micas del Este o del Sur deben implicarse a fondo, hacerse responsables del futuro de Europa"
Pregunta. ?Est¨¢ usted deprimido?
Respuesta. He acusado el fracaso. Mentir¨ªa si negara que para m¨ª la derrota en Francia es una derrota personal. Es evidente que mis argumentos no han resistido el choque de la democracia. Se han dado muchas razones, pero el hecho es que hemos perdido, que Europa va mal, que existe el riesgo de entrar en una espiral de desintegraci¨®n. Hay una incapacidad para reactivar el proyecto europeo. Y eso es peligroso porque quien va en bicicleta y se para, se cae. El proyecto europeo debe avanzar; si no, cae. Se desintegra. Estamos en un momento muy peligroso.
P. ?Puede llegar a desaparecer la Uni¨®n Europea?
R. No puede desaparecer. Con la congelaci¨®n de la Constituci¨®n se congela la Europa pol¨ªtica. Europa continuar¨¢ con su formidable fuerza de integraci¨®n por el mercado, porque Europa sigue siendo una zona de mercado. Tiene capacidad de iniciativa pol¨ªtica, pero limitada. El motor estructurante de Europa va a seguir siendo el mercado interior, y yo creo que es insuficiente para hacer frente a los problemas que Europa tiene ante s¨ª. Hay que ver si hay voluntad pol¨ªtica o no de seguir.
P. Es la visi¨®n brit¨¢nica: negocios, mercado, nada de sue?os de uni¨®n pol¨ªtica...
R. La iron¨ªa de la historia es que los brit¨¢nicos toman la presidencia de la UE en el momento en el que se ha hecho un gran regalo a su visi¨®n de Europa, dados los llamativos fracasos de las otras visiones. Pero creo que los brit¨¢nicos se van a dar cuenta de que esa l¨®gica del mercado no es suficiente, ni siquiera para hacer funcionar el mercado. Si queremos que la econom¨ªa europea sobreviva, que compita con los pa¨ªses emergentes, con China, con India, con EE UU, hay que actuar no s¨®lo econ¨®mica, sino pol¨ªticamente. Creer que la organizaci¨®n de un mercado est¨¢ fuera de la pol¨ªtica es algo que ni a Blair se le ocurre.
P. Precisamente para que Europa sea competitiva, Blair ha propuesto cambios profundos en el funcionamiento de la UE.
R. No ha propuesto nada concreto. Si quiere tener ¨¦xito debe proponer cosas que sean admitidas por los dem¨¢s. Soy esc¨¦ptico.
P. ?No cree que sea capaz de convencer a los otros?
R. Todos estamos de acuerdo en que hay que reformar Europa. Pero no hay acuerdo en c¨®mo hacerlo. La cuesti¨®n es si Blair ser¨¢ capaz de ser un integrador. Tengo mis dudas, dado su comportamiento sobre Irak.
P. Se ha dicho que el no a la Constituci¨®n supuso la ruptura de un sue?o, en referencia a la uni¨®n pol¨ªtica.
R. Europa debe organizarse pol¨ªticamente si se quiere regular la globalizaci¨®n; si se quiere, como Blair ha dicho, tener una pol¨ªtica ambiciosa de protecci¨®n del medio ambiente; si se quiere tener otra visi¨®n de la organizaci¨®n del mundo.
P. ?Tiene sentido hablar de uni¨®n pol¨ªtica con 25 pa¨ªses, y creciendo, tan diferentes entre s¨ª?
R. Fue un error reunificar Europa antes de haber profundizado en Europa. El Tratado fue el ¨²ltimo compromiso a Quince. Ahora es m¨¢s dif¨ªcil, pero la uni¨®n es necesaria. Que sea dif¨ªcil no quiere decir que sea imposible.
P. El debate constitucional ha dejado claro que en la opini¨®n p¨²blica no se sigue lo que pol¨ªticos, prensa y ¨¦lites dicen.
R. Es cierto, y por eso, aunque no se abandone la idea de la uni¨®n pol¨ªtica, se debe intentar comprender por qu¨¦ la gente no considera a Europa como una soluci¨®n a los problemas, sino como parte del problema. Hay que ver qu¨¦ deficiencias hay y c¨®mo se pueden mejorar. No hay que dar marcha atr¨¢s. Hay que dar otro rostro, otra pr¨¢ctica econ¨®mica y social a la Uni¨®n Europea. Eso es fundamental.
P. Suena todo muy vago, no hay idea-chispa que cree emoci¨®n.
R. Hay que marcarse un objetivo concreto que afecte a todos los europeos. Un ejemplo: en Europa hay en estos momentos un proceso de modernizaci¨®n de las l¨ªneas f¨¦rreas. Se le puede mostrar a un ciudadano europeo un mapa de Europa, y decirle que con una nueva utilizaci¨®n del presupuesto europeo vamos a definir, por ejemplo, la l¨ªnea M¨¢laga-Sevilla hasta Estocolmo, o de Brest a Varsovia, o de Glasgow a Calabria. Ah¨ª tenemos, de repente, una visi¨®n real de Europa para los europeos. Puede hacerse lo mismo en investigaci¨®n, en energ¨ªas renovables, que es algo que afecta a todos los pa¨ªses, porque todos estamos pendientes de Kioto. Otro ejemplo: invertir en los universitarios y en programas de intercambio, como Erasmus, S¨®crates o Leonardo.
P. Son propuestas que llegan en el momento en que se avecinan cortes presupuestarios dr¨¢sticos.
R. Es que es en momentos as¨ª cuando hay que coger el toro por los cuernos. Por cierto, ?sabe que Espa?a jug¨® un papel importante en el no holand¨¦s?
P. ?Y eso?
R. En las dos ¨²ltimas semanas de campa?a del no, en todas las estaciones y en todos los lugares hab¨ªa un gran cartel con un "Decimos no" junto a un toro al que estaban matando. Porque la Constituci¨®n no prohib¨ªa las corridas, y en Holanda hay un sentimiento muy fuerte de protecci¨®n a los animales. Fue una imagen que impact¨® mucho. La excepci¨®n cultural que hay en la Constituci¨®n para las corridas fue un argumento que moviliz¨® a muchos holandeses.
P. Habl¨¢bamos del presupuesto...
R. Ah¨ª se ve uno de los grandes dramas de Europa, que los responsables pol¨ªticos europeos no est¨¢n hist¨®ricamente a la altura. Nadie dice qu¨¦ es lo que se espera de Europa, cu¨¢l es la visi¨®n de Europa, y as¨ª no se puede llegar a un acuerdo sobre el Presupuesto. El Presupuesto no consiste en llegar a un compromiso entre el cheque brit¨¢nico, la pol¨ªtica agraria comunitaria y la pol¨ªtica de solidaridad, sino sobre qu¨¦ es lo que se quiere de Europa, qu¨¦ es necesario. Y a partir de ah¨ª ponerlo todo junto y darle un soporte financiero.
P. Los Gobiernos de la UE insisten en que hay que limitar el gasto.
R. La financiaci¨®n mediante la contribuci¨®n de los Estados llega a un l¨ªmite, de acuerdo, pero habr¨¢ que buscar otros recursos financieros. Alguna forma de impuestos..., una base de impuestos sobre las empresas que ir¨ªa directamente a Europa, o una tasa sobre el queroseno de los aviones, o tasas ecol¨®gicas sobre el consumo de energ¨ªa, o cargar con un c¨¦ntimo o medio c¨¦ntimo cada llamada telef¨®nica, exceptuados estudiantes y jubilados. Con un c¨¦ntimo o medio c¨¦ntimo sobre cada llamada de tel¨¦fono como una tasa europea se tendr¨ªa una recaudaci¨®n fiscal importante que podr¨ªa permitir a Europa actuar. Hay que rechazar todo presupuesto a la baja porque eso supone la muerte de Europa. Los pol¨ªticos tienen que afrontar su responsabilidad.
P. Pues est¨¢ claro que va a haber una reducci¨®n en el presupuesto.
R. Se han impuesto el ego¨ªsmo nacional y la visi¨®n restrictiva nacional. Por eso me parece bien que no haya acuerdo. Hay que ir hasta el final de la crisis. Que todo el mundo se vea obligado a redefinir sus perspectivas para Europa; porque si no se hace, no se podr¨¢ avanzar. Hoy en d¨ªa, un acuerdo a la baja es una impostura.
P. Blair propone recortar el gasto en agricultura para potenciar la tecnolog¨ªa.
R. La agricultura necesita reformas en el interior, porque opera con un r¨¦gimen productivista, que no pone el acento en la calidad. La reforma necesaria es la de reorganizar el espacio rural. El Reino Unido ha bloqueado sistem¨¢ticamente las reformas propuestas.
P. La Constituci¨®n ha quedado congelada y se han cancelado referendos. ?Temen los Gobiernos a la opini¨®n p¨²blica?
R. Lucidez no es temor. No veo por qu¨¦ Europa debe ser masoquista. Est¨¢ claro que el proyecto constitucional, por razones de pol¨ªtica nacional, pero tambi¨¦n por el modo en que los ciudadanos ven Europa, no es aceptado. Por tanto, habr¨¢ que cambiar las pol¨ªticas de Europa. Tomemos el texto como una base de actuaci¨®n. Hay muchas cosas que se pueden hacer. Por ejemplo, el hecho de que ocho Parlamentos nacionales puedan rechazar una directiva. As¨ª se ver¨¢ que el debate legislativo nacional y el europeo van de la mano. El problema que hoy tenemos es que Europa decide, y cinco a?os despu¨¦s se tiene que aplicar lo decidido en Espa?a y los dem¨¢s pa¨ªses. Eso es terrible. Hoy se nos habla de una diplomacia europea com¨²n, pong¨¢mosla en pr¨¢ctica. Se puede avanzar tambi¨¦n en pol¨ªticas sociales y fiscales. Hag¨¢moslo. El Tratado constitucional sirve de referencia y se puede seguir avanzando.
P. ?No ser¨ªa visto eso en Francia u Holanda como colar la Constituci¨®n por la puerta de atr¨¢s?
R. La gente dice no a la Constituci¨®n porque no quiere que Europa sea un super-Estado. As¨ª se dar¨ªa a los Parlamentos nacionales la posibilidad de intervenir. Ser¨ªa una respuesta a sus inquietudes.
P. El pr¨®ximo domingo, Luxemburgo vota la Constituci¨®n. ?Qu¨¦ va a pasar?
R. No lo s¨¦. Yo creo que hay que ver qu¨¦ partes fundamentales del Tratado se pueden salvar y someterlas a refer¨¦ndum en toda Europa, tanto en los pa¨ªses que ya han votado s¨ª como en los del no. Pero deber¨¢ ser despu¨¦s de las elecciones presidenciales francesas de 2007. Ser¨¢ un refer¨¦ndum no necesariamente el mismo d¨ªa, pero s¨ª con la idea de que, si se aprueba en 19 o 20 pa¨ªses, entre en vigor.
P. En los an¨¢lisis demogr¨¢ficos del no se ha visto que la mayor parte de los j¨®venes estaban contra la Constituci¨®n.
R. Las universidades son lugares muy ideol¨®gicos. Hay una oposici¨®n muy ideologizada a la Constituci¨®n nacida de los movimientos antiglobalizaci¨®n. La Universidad es un buen ejemplo de lo que pasa con Europa. A partir de una buena idea de Europa, la armonizaci¨®n de estudios pedida por el proceso de Bolonia para que todo el mundo pueda estudiar en cualquier lugar de Europa, se imponen reformas y se echa la culpa a Europa, a la que se acusa de instrumento del neoliberalismo.
P. Usted ha sido un testigo de primera l¨ªnea. A lo largo de su campa?a en Francia, los estudiantes le acusaban de traidor, de mentiroso, de peque?o burgu¨¦s...
R. Gran burgu¨¦s.
P. Gran burgu¨¦s, liberal... porque a¨²n se le recuerda como Dany el Rojo, el revolucionario del 68.
R. No es la primera vez en mi vida que me llaman traidor. Lo inquietante de hoy es que hay una nueva dimensi¨®n del traidor. El traidor en tiempos del estalinismo era un agente del imperialismo. Hoy, el traidor es el agente del neoliberalismo. El horror es el liberalismo. Creo que hay una reducci¨®n del pensamiento que es peligrosa porque detr¨¢s del problema del liberalismo est¨¢ el problema de la econom¨ªa de mercado. No hay alternativa a la econom¨ªa de mercado La econom¨ªa de mercado puede desarrollarse de maneras muy distintas: hay una gran diferencia entre una econom¨ªa social de mercado y una econom¨ªa ultracompetitiva de mercado. Pero en el interior de la econom¨ªa de mercado hay competencia. Hay quienes quieren salir de la econom¨ªa de mercado. Y esta idea lleva a una tradicionalizaci¨®n del pensamiento pol¨ªtico. La antiglobalizaci¨®n, que comenz¨® como una cr¨ªtica totalmente l¨®gica a una globalizaci¨®n no regulada, se reduce cada vez m¨¢s a una ideolog¨ªa estatalizadora: es el regreso de la ideolog¨ªa del Estado todopoderoso, intervencionista a todos los niveles. Vuelve esa idea porque est¨¢ claro que, frente a la globalizaci¨®n, frente a la incertidumbre, frente a la precariedad, frente al paro, la pol¨ªtica social moderna no funciona. Y como no funciona se recupera la idea vieja de la protecci¨®n estatal.
P. ?Es el debate entre la vieja Europa y la nueva Europa?
R. En su d¨ªa, la definici¨®n de Donald Rumsfeld sobre Vieja Europa y Nueva Europa era difamatoria. Pero ten¨ªa algo de cierto. Los pa¨ªses del Este, que acaban de liberarse del comunismo, y los pa¨ªses del Sur, como Espa?a, que llegaron tambi¨¦n m¨¢s tarde a Europa, a causa del franquismo o del fascismo, son sociedades m¨¢s din¨¢micas, que no temen al futuro, capaces de evolucionar, que aceptan el desaf¨ªo del cambio. Y la Vieja Europa est¨¢ formada por sociedades cansadas, envejecidas. Yo creo que las sociedades din¨¢micas del Este o del Sur deben implicarse a fondo, hacerse responsables del futuro de Europa.
P. En t¨¦rminos geogr¨¢ficos es la Europa de la periferia, los Estados del Sur y del Este, frente a la del Centro.
R. Si la Europa marginal y perif¨¦rica entiende que su inter¨¦s no pasa s¨®lo por defender las subvenciones solidarias, que por supuesto debe defender, sino que pasa por defender la idea de que Europa funcione, se podr¨ªa dinamitar ese enfrentamiento entre Francia y Alemania, entre Francia y el Reino Unido, etc¨¦tera.
P. La ampliaci¨®n ha introducido en la UE ese factor dinamizador. Pero que no todo el mundo est¨¢ satisfecho con la ampliaci¨®n.
R. Europa se unific¨® con Polonia, la Rep¨²blica Checa, los pa¨ªses b¨¢lticos... Eso no es una ampliaci¨®n, es una reunificaci¨®n de Europa, la respuesta de la Historia a la liberaci¨®n de los pueblos de la Europa Central y del Este. Tenemos el deber de ser solidarios con esa reunificaci¨®n, como cuando se acept¨® a Espa?a, a Portugal y a Grecia.
P. De Turqu¨ªa ya se est¨¢ diciendo que no entrar¨¢ nunca en la UE.
R. Con Turqu¨ªa no se produce una reunificaci¨®n; ser¨ªa una aut¨¦ntica ampliaci¨®n de Europa. Europa es una entidad pol¨ªtica, y la cuesti¨®n es si esta entidad pol¨ªtica puede funcionar si se ampl¨ªa a Turqu¨ªa, al C¨¢ucaso o a otros. Esa es la cuesti¨®n. En las condiciones actuales y por primera vez, nadie sabe c¨®mo van a terminar las negociaciones que comienzan el pr¨®ximo 3 de octubre. Son negociaciones abiertas, y eso quiere decir que dependen, en primer lugar, de la evoluci¨®n de Turqu¨ªa. Los turcos no tienen idea de la densidad e intensidad de las reformas que deben hacer para llegar a conquistar el coraz¨®n y la cabeza de los europeos. Tiene que convertirse en un Estado moderno. No es algo que vaya a pasar de la noche a la ma?ana. Europa, por su parte, debe ser capaz de funcionar con una Turqu¨ªa integrada. Tampoco es algo que se vaya a conseguir de la noche a la ma?ana.
P. Usted est¨¢ a favor de Turqu¨ªa si se cumplen todas las condiciones. Pero Angela Merkel, posible nueva canciller alemana, est¨¢ en contra, los franceses est¨¢n en contra, los holandeses est¨¢n en contra...
R. Yo no digo que lo vayamos a conseguir hoy. Pero hay que luchar porque Turqu¨ªa tenga una perspectiva de integraci¨®n.
P. ?Cu¨¢les son las fronteras de la Uni¨®n Europea? ?Debe Ucrania ser admitida en el club?
R. Ah¨ª estamos pillados. Si se da una perspectiva de integraci¨®n a Turqu¨ªa, ser¨¢ muy dif¨ªcil decir no a Ucrania. El problema que se le va a plantear a Europa es si tal espacio pol¨ªtico, econ¨®mico y social puede funcionar como Europa comunitaria. Esa es la gran cuesti¨®n a la que tienen que responder los europeos. El debate no est¨¢ maduro. En las condicionas actuales es impensable.

"La dictadura de Castro es una cat¨¢strofe"
ES, CON GRAN DIFERENCIA, el mejor orador del Parlamento Europeo, donde su grupo, cuarto por n¨²mero de eurodiputados, constituye una inagotable fuente de iniciativas porque, dice Cohn-Bendit, es el ¨²nico partido que se toma en serio Europa. Con esta legislatura, cumplir¨¢ tres en la Euroc¨¢mara, 15 a?os que para ¨¦l son ya m¨¢s que suficientes. Al concluir el actual ciclo tendr¨¢ 64 a?os y espera que muchos por delante para seguir en la agitaci¨®n pol¨ªtica y social.
"Ser¨ªa muy triste que la imaginaci¨®n pol¨ªtica s¨®lo pudiese funcionar siendo diputado" apunta Cohn-Bendit en su peque?o y destartalado despacho, en perfecta armon¨ªa con su atuendo y presencia f¨ªsica. "Hay otras posibilidades, como un programa de televisi¨®n o cosas as¨ª para agitar las ideas e intervenir en la sociedad". Todo menos volver a la pol¨ªtica nacional: "Me aburre mucho". Vaticina que los verdes de su amigo Joscka Fischer pasar¨¢n a la oposici¨®n, donde "si son capaces de proponer el proyecto social ecologista que Alemania necesita, deber¨¢n participar en la renovaci¨®n del pensamiento pol¨ªtico de la izquierda". Para el dirigente estudiantil de los sesenta, lo revolucionario pasa hoy por ser ecologista, definido como "ser alternativo a una sociedad de consumo y productivista que produce su propia destrucci¨®n".
Cohn-Bendit fue un icono de la izquierda cuando tambi¨¦n lo eran Fidel Castro y el Che. ?l ha evolucionado. "Europa deber¨ªa tener una pol¨ªtica mucho m¨¢s coherente contra la dictadura castrista y ante el embargo americano. El embargo es el arma objetiva que sostiene a Castro. A Castro hay que decirle que su dictadura no s¨®lo justifica a los americanos, sino que es una cat¨¢strofe para el pueblo cubano. Europa tiene raz¨®n en oponerse al embargo americano, pero debe poner fin a su connivencia con la dictadura castrista". ?Hay connivencia en la nueva pol¨ªtica de la UE, inspirada por Espa?a? "Digamos que de la nueva pol¨ªtica no sale una verdadera cr¨ªtica".
Fuera de la pol¨ªtica, sus pasiones son la literatura y el deporte. "No estar¨ªa mal que todos los europeos leyeran a Imre Kert¨¦sz [premio Nobel de 2002]. Tambi¨¦n hay una pel¨ªcula que todos los europeos deber¨ªan ver, de un kurdo iran¨ª, titulada Las tortugas tambi¨¦n vuelan. Es extraordinaria. Dram¨¢tica. Triste. Pol¨ªtica. No americana". El f¨²tbol le arrebata, pero la temporada deportiva va por otros derroteros: "Lance Armstrong va a ganar el Tour, por s¨¦ptima vez consecutiva".
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.