Trasvase Tajo-Segura y otros

La soluci¨®n salom¨®nica de la ministra Narbona respecto al trasvase de agua del Tajo al Segura no ha dejado satisfechos ni a manchegos, ni a murcianos. Parece lo l¨®gico en una situaci¨®n de escasez como la que padecemos. Contentar a unos en sus demandas supondr¨ªa que los otros se consideraran todav¨ªa m¨¢s perjudicados y viceversa.

La solidaridad supone que todos est¨¦n dispuestos a apretarse el cintur¨®n aunque nadie quede contento. De la situaci¨®n de sequ¨ªa nadie tiene la culpa; del conflicto de intereses la tiene la falta de solidaridad y el no existir una aut¨¦ntica pol¨ªtica de aguas en el pa¨ªs. Estas cosas han de estar previstas sabiendo que un trasvase desde la cabecera de los r¨ªos -como es el caso- plantear¨¢ problemas en ¨¦pocas de escasez de agua. Cosa distinta es si la captaci¨®n de los caudales se hace en el curso medio o en el tramo final del r¨ªo, como el trasvase del Ebro preve¨ªa en el Plan Hidrol¨®gico derogado. Entonces basta con determinar que s¨®lo se trasvasar¨¢ agua cuando los caudales seansuperiores al ecol¨®gico, y qu¨¦ tanto por cien de la cantidad trasvasada corresponder¨¢ a cada zona. Lo que no tiene ning¨²n sentido es que, en ¨¦pocas de sequ¨ªa como la que sufrimos, cantidades muy superiores al caudal ecol¨®gico m¨ªnimo se vayan al mar sin que nadie se beneficie.