Populares y socialistas pactan evitar conflictos en la gesti¨®n de residuos

La gesti¨®n de los residuos y la construcci¨®n de las nuevas instalaciones de tratamiento exige el consenso de las administraciones y los partidos. As¨ª lo destacaron ayer el presidente de la Generalitat, Francisco Camps, y el secretario general del PSPV-PSOE, Joan Ignasi Pla, en la firma de un protocolo con el que pretenden desatascar los planes de residuos y evitar los conflictos que genera su ejecuci¨®n. Socialistas y populares crear¨¢n una comisi¨®n de coordinaci¨®n y establecer¨¢n un plan transitorio para eliminar la basura mientras se construyen las plantas y vertederos.

Tanto Camps como Pla resaltaron en sus intervenciones tras la firma del protocolo en el Palau de la Generalitat que ¨¦ste es el segundo acuerdo entre los dos partidos mayoritarios en pocos d¨ªas y que incide en la calidad de vida de los ciudadanos, aunque no consiga la proyecci¨®n p¨²blica del Estatut d'Autonomia. Ambos coincidieron tambi¨¦n en la necesidad y voluntad de consenso para alcanzar pactos en asuntos de inter¨¦s general m¨¢s all¨¢ de las diferencias partidarias.

"Es un acuerdo important¨ªsimo" que pone en marcha "la voluntad pol¨ªtica de quienes tienen que tener consorciados esfuerzos en relaci¨®n a una cuesti¨®n tan importante" como la gesti¨®n de los residuos, afirm¨® el presidente del Consell. "No se resuelven todos los problemas [de los residuos], pero se avanza en el espacio donde se pueden resolver", manifest¨® el secretario general de los socialistas valencianos, quien resalt¨® que la gesti¨®n correcta de las basuras es "fundamental" para la calidad de vida de los ciudadanos y la protecci¨®n del medio ambiente.

El acuerdo cierra una etapa de enfrentamientos entre socialistas y populares en torno a la planificaci¨®n de la eliminaci¨®n de las basuras y la forma de resolver los conflictos que genera la instalaci¨®n de vertederos y plantas de tratamiento en los municipios -Camps record¨® que los dos partidos gobiernan en la mayor¨ªa de ayuntamientos-. El pacto firmado hace un a?o entre el Consell, la Federaci¨®n Valenciana de Municipios y la patronal Cierval dej¨® fuera a los socialistas, que acusaron al PP de "dinamitar" el consenso alcanzado al cerrarlo justo en v¨ªsperas de la campa?a electoral europea y sin darles tiempo a consultarlo con sindicatos y ayuntamientos. En el acto de ayer, los dos dirigentes rubricaron aquel acuerdo marco y un protocolo adicional de cinco puntos "que puede proporcionarle la efectividad que hasta ahora no ha tenido", en palabras de Pla.

El protocolo que complementa el primer acuerdo prev¨¦ la revisi¨®n del Plan Integral de Residuos (PIR) aprobado en 1997 "atendiendo a la situaci¨®n actual". Adem¨¢s, incide en el desarrollo de los 11 planes zonales en los que est¨¢ dividido el territorio, y que contienen la previsi¨®n de nuevas instalaciones, con la b¨²squeda "del consenso social" respecto de su ubicaci¨®n. Tambi¨¦n prev¨¦ la elaboraci¨®n de un Plan Transitorio de Gesti¨®n de Residuos Urbanos para "asegurar un destino adecuado" a las basuras mientras se construyen las nuevas plantas. El protocolo abre la puerta a la financiaci¨®n de infraestructuras por parte de la Generalitat y las diputaciones, y flexibiliza la gesti¨®n de los planes zonales, que ser¨¢ posible a trav¨¦s de entidades distintas a los consorcios de los municipios afectados en cada zona que est¨¢n ahora en v¨ªas de creaci¨®n. Para garantizar el desarrollo del protocolo y resolver posibles conflictos, socialistas y populares crear¨¢n una comisi¨®n de coordinaci¨®n "paritaria".

El ¨²ltimo punto pretende conseguir la adhesi¨®n al pacto de otras fuerzas pol¨ªticas, empresariales y sociales, y Camps y Pla destacaron esta invitaci¨®n para lograr la m¨¢xima eficacia e implicaci¨®n en la resoluci¨®n del problema de las basuras. Las primeras respuestas no se hicieron esperar. Jose Bort, portavoz de EU-L'Entesa en la Diputaci¨®n de Valencia, afirm¨® que populares y socialistas "no pueden firmar acuerdos" y despu¨¦s pretender que otras fuerzas pol¨ªticas "los hagan suyos sin participar en su elaboraci¨®n". El sindicato UGT afirm¨® que "si existiera voluntad real de consenso", los firmantes deb¨ªan haber contado con su participaci¨®n. La recientemente creada Mesa por un Residuo M¨ªnimo, integrada por formaciones de izquierda, entre ellas EU, Comisiones Obreras y grupos ecologistas, dijo que el acuerdo "no se corresponde con las directivas europeas de medio ambiente y no cuenta con la participaci¨®n de la ciudadan¨ªa".