Caravana de nost¨¢lgicos
Antiguos carreteros recorren varias comarcas valencianas en carro en ocho etapas
El carro y el caballo jugaron un papel muy importante en sus vidas, cuando ¨¦ste era el principal medio de transporte junto con el ferrocarril. Ahora reconvertidos por el paso del tiempo en empresarios, bancarios y otras profesiones, se unen una vez al a?o desde hace una veintena para recordar, durante una semana, tiempos duros pero tambi¨¦n rom¨¢nticos en los que recorr¨ªan muchos kil¨®metros por "necesidad".
La Vuelta en Carro a la Comunidad Valenciana naci¨® en Benissa en 1987 y en 2001 Alberic recogi¨® el testigo de la organizaci¨®n. En esta edici¨®n son 15 los carros que iniciaron la primera de las ocho etapas previstas. A primera hora de la ma?ana del pasado s¨¢bado el chirriar de las ruedas de los carros en contacto con los adoquines y las voces de los conductores despertaron a muchos vecinos. Era la salida oficial que les llevar¨ªa al final de la jornada hasta la pedan¨ªa setabense de Anahuir, donde la caravana de nost¨¢lgicos recuperar¨ªa fuerzas para afrontar el domingo la segunda etapa por caminos de la Vall d'Albaida y de l'Alcoi¨¤-Comtat.
La noche anterior hab¨ªan permanecido concentrados en Alberic, donde hicieron repaso a todos los enseres y v¨ªveres que requer¨ªa la vuelta. Literas, neveras repletas de bebidas, jamones y otras viandas,adem¨¢s de comida para los animales. Alg¨²n carro lleva instalada hasta una placa solar. El director, Vicente Escriv¨¢, no pierde detalle y est¨¢ en todo para que la aventura tenga ¨¦xito. A cada carro que pasa en direcci¨®n a Castell¨® de la Ribera le echa un par de camisetas oficiales; aqu¨ª no hay maillots amarillos ni verdes, ni rosas, todos son de color negro.
Los ayuntamientos de los pueblos por donde pasan les invitan a comer y cenar y les ceden polideportivos para descansar. Pero se trata de rememorar tiempos pasados. "La vida la hacemos arriba del carro, como antes" se?ala Escriv¨¢. Por eso prefieren dormir en sus literas y colchones.
"Mis padres eran carreteros y yo me cri¨¦ desde peque?o en un carro", dice Vicente Savall, de Callosa d'En Sarri¨¤, propietario de un negocio de compra-venta de camiones y de alquiler de veh¨ªculos industriales en Alicante. Recuerda que iba montado en el carro desde primera hora de la ma?ana hasta la noche: "El carretero no ten¨ªa derecho a descansar nunca, si hac¨ªamos alguna parada era porque las caballer¨ªas estaban agotadas". Mientras acaricia sus tres caballos en un descanso pr¨®ximo a Manuel, a?ora aquella "etapa dura pero rom¨¢ntica" y reflexiona en voz alta: "Ahora los caballos viven de nosotros y antes nosotros viv¨ªamos de ellos".
Para Ram¨®n Oliver, directivo de banca, se trata de "compartir con los amigos la afici¨®n al caballo y pasar una semana juntos". Este bancario advierte: "Nuestras ra¨ªces est¨¢n muy ligadas al caballo y al carro porque antes era el principal medio de transporte". Siempre reserva ocho d¨ªas de sus vacaciones para participar en la vuelta.
El m¨¢s veterano del grupo, Ra¨²l Llorens, jubilado de 70 a?os, aprovecha cualquier descanso para contar sus batallitas a los compa?eros de viaje. "He tenido los tres mejores caballos de Espa?a en tiro y arrastre", presume y se enorgullece de ir en carro desde que su madre le "pari¨®". Maestro de carreteros, asegura que los caballos "son muy inteligentes", mientras explica c¨®mo manejar los ramales cuando el animal que va delante de la reata tira m¨¢s que los otros. Quitapesares y Gary Cooper son los que llevar¨¢n a Llorens hasta el final de la vuelta en Tavernes de la Valldigna hoy mismo, despu¨¦s de dejar atr¨¢s localidades como Callosa d'En Sarri¨¤, Benidorm, Benissa, Altea, Calp y Guadalest.
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